CAPITULO 38

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Capitulo 38

-Claro, si voy a ser tu dama de honor tengo que encargarme de tu despedida de soltera

-Jajaja, estoy segura que sea como sea te encargarás de que sea increíble

-Jajaja, créeme que lo será

Tres meses después:

-¿Cómo puede tardar tanto? –preguntó Raquel 

-Shh, saldrá en cualquier momento –dije susurrando –entonces escuchamos como la puerta se abría y alguien salía de ella- ¡ya, vamos! –entonces salimos de nuestro escondite y nos dirigimos a nuestro objetivo

-¡Aaa! ¿Qué hacéis? –gritó Maria mientras Ayla le vendaba los ojos, y yo le ponía unas esposas

<< Sabía que era buena idea comprar las esposas del sex-shop >>

La metimos en el auto sin decir nada. Y conducimos hasta el hotel donde hicimos la reserva. La metimos en el ascensor sin decir nada, y luego la condujimos por el pasillo hasta una suit. La metimos, y entonces le quitamos las esposas.

-¡Sorpresa! –gritamos todas mientras Ayla le quitaba la venda de los ojos

-Pero… ¿qué es esto? –dijo Maria mirando a toda la gente que había en el suit

-¿Tu qué crees? –dije- es tu despedida de soltera, y ahora sin esperar más, ¡poned música y que el bar-man sirva los chupitos!

-Siii!!!! –gritaron todas las presentes a la vez

Parecía que aquella noche jamás acabaría. Realmente me sentía orgullosa por el trabajo que hice organizando la fiesta. Estaba hablando con la hermana de Mikel Cristina, y la de Maria Paula, cuando Enara se subió a una mesa y comenzó a hablar.

-Atención chicas, es un placer para mi presentaros a… ¡LOS BOYS! –dijo y entonces de la puerta entraron dos chicos

<< No me lo creo >>

-Hola señoritas –dijo Koldo- nos han llamado para una despedida de solteras

-Decidnos –prosiguió Eneko- ¿dónde está la prometida?

***

Estaba en la barra tomándome un vodka con limón presenciando la escena. Maria estaba sentada en un silla en el centro de la habitación, mientras Eneko bailaba para ella, bueno en realidad, bailaba encima de ella. Koldo estaba bailando con Cristina, entonces se despidió de ella, y se acercó a mí.

-Hola –me saludó- realmente has organizado una buena fiesta

-Gracias –dije dando un trajo de mi copa

-Antes me he pasado por la despedida de los tíos, realmente han organizado una buena juerga

-¿Dónde la celebran?

-¿No te lo han dicho?

-No, dicen que no quiere que nadie los interrumpa así que no nos lo han dicho

-Jajaja, bueno, a mi no me han dicho nada de eso, así que te diré que la celebran en el suit 5 el de la tercera planta

-Pues creo, que voy a mirar si se lo pasan bien –dije y salí de la habitación para dirigirme a la fiesta de los tíos

Narra Louis

Estaba en la barra con Niall contemplando el paraje. Mikel se encontraba de pie en un pequeño escenario que habían instalado en la suit, mientras una stripper bailaba o mejor dicho se restregaba con él. Mientras, Harry estaba sentado en un sofá y tenía encima de él a una hermosa muchacha que le dedicaba un estriptis.

-¿Harry nunca va a cambiar verdad? –me preguntó Niall mirando a Harry

-No, pero ya sabemos que es un mujeriego –dije

-Si, en fin, voy a la terraza a fumarme un piti –dijo levantándose del taburete

-Vale –dije mientras Niall se alejaba

-¿Está libre el asiento? –preguntó alguien detrás de mí

-¡(Tu)! –dije volteándose- ¿cómo sabías que nuestra despedida era aquí?

-Tengo mis contactos –dijo sentándose a mi lado

-Oye –me susurró al oído- esto está demasiado lleno, ¿te parece si vamos a un sitio más íntimo? –ella asintió ligeramente- bien, ven conmigo –dije extendiéndole la mano y ella la aceptó

Narra (Tu)

Louis me dio la mano, y me sacó de la habitación. Me llevó por el pasillo hasta que llegamos a la puerta de incendios, entonces la abrió y comenzó a subir las escaleras.

-Louis ¿a dónde vamos? –pregunté mientras seguía subiendo las escaleras

-Tu espera y lo verás –dijo empujando la puerta que estaba al acabar las escaleras

Entramos por la puerta, y salimos a la hermosa azotea del hotel.

-¡Guau! Es precioso –dije observando la azotea

-Pues tienes que ver las vistas –dijo llevándome al borde de la azotea 

-Es… no tengo palabras –dije shockeada

-Sabía que te gustaría –dijo abrazándome- oye ¿te gustaría pasar la noche en mi casa?

-Me gustaría, pero es que como sabes, el día anterior a la boda el chico y la chica tienen que dormir separados

-Se supone que esa tradición la tienen que cumplir los prometidos

-Ya, y espero que algún día tengamos que cumplirla nosotros también

-Yo también lo espero –dijo y nos besamos apasionadamente bajo la luz de la luna

Un choque afortunado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora