Tu corazón es mío (Terminada)

Parte 16: Linda extraña

POV CALLE

Inicio Flashback 19 años atrás

Escuchaba las gotas de agua chocar contra la ventana de mi hogar y el olor a tierra mojada inundaba mi olfato mientras el recorrido de las gotas de agua dejaban caminos en todas las direcciones, me acomode en el sofá de la sala observando atentamente el fluir del agua.

En mi mano tenía una taza de café y en la otra mi celular, de vez en cuando la pantalla se encendía mostrándome algunas notificaciones sin importancia, escuche unos suaves toques en la puerta así que me levante dejando mi celular y la taza de café en una pequeña mesita de la sala, me dirigí a la puerta para abrirla y del otro lado me encontré con Macarena Gabe.

Tenía el cabello un poco alborotado, su ropa estaba totalmente mojada y desordenada, su maquillaje estaba corrido y sus ojos llenos de lágrimas, una sonrisa nostálgica apareció en sus labios y sin decir una sola palabra se lanzó a mis brazos apretando mi cintura.

-Hola Dani – susurro bajito – estás calientita.

-Hola Maca – apreté más su cuerpo – buscaré ropa seca para ti y una taza de café.

Macarena asintió separándose de mí cuerpo permitiéndome cerrar la puerta, vi a Maca acercarse a la ventana quedándose de pie allí así que me apresure a tomar ropa de mi closet, volví a la sala y antes de llegar a Maca entre a la cocina y serví una taza de café para ella.

-Maca – susurre haciendo que girara su rostro hacia mí – traje ropa seca para ti.

-Gracias Calle.

Macarena se quitó la blusa y el pantalón quedando en ropa interior frente a mí, rápidamente se colocó la camisa negra de 1975 junto a un pants de lana blanco, se acercó a mí y tomo la taza de café bebiendo de ella lento.

-¿Qué pasa Maca?- dije sentándome en el sofá.

-Quiero contarte algunas cosas, pero no sé cómo Dani – acomodo su cuerpo cerca al mío en el sofá.

-Nos conocemos hace un año Maca y sabes que puedes contarme todo lo que quieras, estoy aquí para acompañarte, escucharte y aconsejarte.

-Sabes que te amo, ¿cierto? – me dijo mientras tomaba mi mano y la acariciaba suavemente.

-Lo sé Maca, yo también te amo amiga.

Su rostro se tornó más triste de lo que ya estaba, sus ojos se llenaron nuevamente de lágrimas y un gran suspiro salió de sus labios.

-¿Esto es por Isaac? – pregunte mirando sus ojos fijamente.

-Han pasado muchas cosas Dani, estoy ahogada en mi silencio.

Me levante del sofá y estire mi mano ofreciéndosela, sus ojos me expresaron confusión así que le sonreí con amor.

-Entonces toma mi mano y salgamos juntas de este silencio.

En seguida tomó mi mano y levanto su cuerpo del sofá, se acercó a mí disminuyendo la distancia entre nosotras y me abrazo, sutilmente en medio de un suspiro débil guardo su rostro en mi cuello.

-Vamos a mi habitación – le propuse – el calor de las cobijas nos harán bien a ambas, te abrazaré mientras a tu tiempo me cuentas que pasa.

Separo su cuerpo del mío y asintió con nostalgia, caminamos a la pequeña habitación de ese apartamento y entramos en la cama, abrí mis brazos para que acomodara su rostro en mi pecho y luego afirme mis brazos en ella, cuando sentí sus manos sujetando mí cintura cerré los ojos y espere a que el silencio acabara.