Capítulo 26 - Los celos.

663 28 14
                                    

*Narra Emily*

Me desperté, no sé ni qué hora era. Al girarme para buscar mi móvil vi que estaba Mangel en el otro lado de la cama. Parece ser que se quedó dormido al rato de decirle que se quedara conmigo. Me levanté intentando no hacer ruido para no despertarle. Di la vuelta a la cama para coger el móvil de la mesilla, al darme la vuelta dirección a la puerta Mangel tiró de mi. Me tumbó encima de él. Me dio un beso en la mejilla.

- Buenos días. - dijo susurrándome al oído. Yo me estremecí.

- Buenos días - sonreí.

- ¿A dónde ibas tan rápido?

- Pues al baño y a hacerme el desayuno. ¿Te parece mal?

- No, no. - dijo riéndose. - me harás el desayuno a mi también ¿no?

- Anda sí, que majo. No te lo crees ni tú. - dije en bromas. - Creo que ya eres  mayorcito.

- ¿Ah sí? - dijo con cara desafiante.

- Pues claro. - dije riéndome.

- ¿De verdad? - al instante empezó a hacerme cosquillas, sabía que desde pequeña tenía muchas, no podía dejar de reírme.

- Mangel, para… jajajaja paraaaa… - no podía ni hablar.

- ¿PODEIS CALLAROS YA? - dijo gritando Rubius desde la habitación. - HAY GENTE QUE QUIERE DORMIR EHH.

- Ups, creo que le hemos despertado. - dije en bajito.

- Anda tira a hacerte el desayuno. Ahora voy yo también.

Desayunamos los dos, nos vestimos y fuimos a casa de Willy y Vegetta, dejamos a Rubius que siguiera durmiendo, el pobre estaba cansado de editar y de grabar y no había podido apenas dormir.

- ¡¡Buenos días vecino!! - dije a Guille, que fue el que abrió la puerta.

- Hey, buenos días a los dos. Pasar.

- ¿Dónde anda Samuel?

- Emm… ¿no estaba contigo? - dijo extrañado.

- ¿Conmigo? Pero si no le veo desde ayer. - me estaba asustando.

- Pero si dijo anoche que iba a tu casa a verte y tal. - dijo mas raro aun.

- A casa no vino. - mierda, me debió de ver con Mangel en la cama.

- Mangel. - Le susurré al oído. - Ayer Vegetta vino a casa cuando estábamos dormidos y se ha debido de ir y no ha aparecido.

- No jodas. Vamos a buscarle.

- No, no voy yo sola mejor.

- Vale. Luego me cuentas.

- Guille voy a buscarle, creo que sé donde puede estar. - dije a Willy para que no se preocupara.

- Pero… ¿por qué no ha venido a casa? ¿Pero no estaba contigo? - dijo mirándome raro.

- Luego te lo explico, ahora voy…

De repente oímos abrirse la puerta y apareció Vegetta, con ojeras y con cara de cansado.

- Tío ¿Dónde estabas? Nos habías preocupado. - Le dijo Willy acercándose a él poniéndole la mano en el hombro.

- Es una larga historia… - dijo mientras me miraba con mala cara. - Me voy a la ducha, luego te cuento.

Mierda, había pensado que Mangel y yo… creo que esto me costará arreglarlo. A ver cómo le explico yo que anoche no pasó nada entre nosotros.

Cuando acabó de ducharse hizo un gesto a Willy para que fuera a su habitación, le hice un gesto para que me dejara ir a mí a hablar con él primero y fui  hacia su habitación.

- Samuel… - en ese momento me cerró la puerta en la cara, al ver que era yo y no Guille. - Joder déjame explicártelo todo. Por favor…

- Vete un poquito a la mierda anda. - dijo cabreado.

- Enserio, no pasó nada entre Mangel y Yo. - dije con lágrimas en los ojos. - Por favor, déjame hablar contigo tranquilamente. No seas así... - al momento abrió la puerta.

- A ver cuenta una excusa que me vaya a creer. - dijo mientras se sentaba en la cama.

- No es ninguna excusa, es la verdad. Resulta que Mangel es mi mejor amigo desde que era pequeña, pero no nos habíamos reconocido por que han pasado muchos años desde la última vez que nos vimos.

- Y claro habéis echado un polvo de reencuentro ¿no? - en ese momento le fui a dar un tortazo pero me agarró la mano.

- ¿Pero tú que te piensas? ¿Qué me voy tirando a todos los tíos que veo o qué? De verdad eres un gilipollas, eres como todos, pensaba que eras diferente pero veo que me equivoco. Que te den por culo majo. - me fui de la habitación, con lagrimas en los ojos y sin mirar a nadie me fui a casa.

Abrí la puerta de casa y fui directa a mi cama, cerré de un portazo. Al momento llamaron a la puerta.

- Emily ¿puedo pasar? - era Mangel.

- Pasa, ahora mismo necesito a mi mejor amigo. - intenté sonreír pero me fue imposible.

- Ven aquí pequeña. - me abrazó y me limpió las lagrimas. - No llores por un tío nunca, ¿me entiendes? Ninguno merece tus lágrimas. Si él no te quiere escuchar es problema suyo.

- Ya pero me da rabia, le quiero y me hace esto, sin motivos, solo porque se ha montado su película, cree que tu y yo… - estaba demasiado cansada como para estar pensando en esto.

Mangel siguió abrazado a mí un buen rato hasta que me quedé dormida, de tanto llorar. 

*Narra Willy*

- ¿Tío que cojones has hecho a Emily? Que se ha ido corriendo a casa y llorando. - pregunté cabreado a Vegetta.

- ¿Qué pasa que ahora estas de su lado?

- No estoy de su lado pero si supieras la historia no dirías lo mismo.

- ¿Qué historia? ¿Que se ha tirado a Mangel sin apenas conocerle?

- Tú eres gilipollas chaval, que se va a tirar a Mangel. Ella ayer se entero de que él era su mejor amigo de cuando eran pequeños, fue como un hermano para ella, estuvo llorando casi toda la noche al ver recuerdos y como se estaba quedando dormida él la llevo a la cama, Emily le dijo que se quedara con ella hasta que se quedara dormida y el que se quedo frito fue él.

- Pero… - antes de que acabara la frase le corté.

- Ni peros ni nada, creo que te has pasado demasiado con ella, ahora si la pierdes es culpa tuya y todo por los celos. Pero vamos que si la pierdes te estaría bien empleado. -le dije mas cabreado aun.

- Joder, la he cagado. Voy a hablar con ella y pedirla perdón.

Bueno gente aqui otro capitulo más. Tengo solo otros dos mas escritos y no se me ocurre que cosas pueden pasar en el E3. Espero que os guste y que no os enfadeis por que he tardado en subirle, ya que el viernes tuve concierto, el sabado me fui de fiesta y al estar de empalmada el domingo estuve todo el dia en la cama. Lo siento amores. 

z4 pa vosotras!!! Muuaks!!! 

Los nuevos vecinos. (YouTubers Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora