Capitulo 24

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Pov's ______

Una pesadilla, no podía ser otra cosa, todo había comenzado como un día normal y de repente nada... Todo se volvió oscuro.
Cuando despertó noto que estaba rodeaba de blancas paredes, con una bata y un hombre que no conocía a su lado.

5 horas atrás.

Desperté a las 6:15, vi a Justin durmiendo a mi lado, acaricié su cabello y él llevo su mano a la mía, llevo mi mano hasta sus labios y la besó.

—Buenos días hermosa.

—Buenos días, ya levántate, recuerda que tienes que estar en la empresa a las 8:00.— le recordé

Justin puso cara de fastidio y soltó un suspiro .

—Te prometo que no iría si no fuera algo tan importante.

—Lose.— le di un pequeño beso en sus labios.— Ahora, ve y date una ducha campeón.

Justin volvió a bufar y se levantó a regañadientes de la cama.

Cuando entro al baño me levante lentamente de la cama. Baje las escaleras con mucho cuidado, tenía los pies algo hinchados y el embarazo no ayudaba mucho que digamos.

Al llegar al final de las escaleras me sostuve un momento de la pared, me sentí mareada por un momento.

Seguí mi camino y fui hasta la cocina para preparar el desayuno.

Hice tostadas y les unté mantequilla, acompañadas con un delicioso jugo de naranja.

Luego de unos minutos Justin bajo, ya estaba vestido con un hermoso traje de color azul, se acercó a mi y besó mis labios, posó su mano sobre mi cintura y me apego a él.

Lo separe levemente de mi.

—No des más vueltas, tienes una reunión importante hoy.— lo reproche

El suspiro y dio un pequeño beso en mis labios para luego soltarme.

Se sentó en la mesa y empezó a degustar de su desayuno.
Me senté al frente de él y también empecé a comer.

—¿Como te estás sintiendo?

—Bien, pero el bebé es muy inquieto.— reí mientras acariciaba mi vientre.

—Será un niño muy hiperactivo—Corroboró Justin mientras soltaba una pequeña carcajada.

—Espero que todo salga bien en la reunión.— le desee

—Yo también...— suspiro.

Justin comió lo más rápido que pudo, ya que necesitaba estar en la empresa desde temprano para arreglar los papeles para la reunión.

—Prometo volver tan pronto como acabe con los asuntos pendientes en la empresa.—

Se levantó, se acercó y se colocó detrás de mi, para luego rodearme con sus fuertes brazos.

—Te estaré esperando.—

Justin besó mi cabeza y salió de la cocina.
Lo acompañe hasta la puerta donde lo despedí Con un beso en los labios.

Justin subió a su auto y lentamentevi su auto perderse en la calle suspire.
Volví a entrar a la casa y nuevamente fui a la cocina a levantar los platos sucios, decidí limpiar un poco la cocina por mi cuenta ya que aún la servidumbre no llegaba.

Estaba lavando los platos cuando de repente pasó, treinta minutos después mas o menos, sentí un pequeño dolor en mi vientre, me quede quieta mientras controlaba mi respiración para tratar de controlar el dolor.

No pasó, el dolor seguía y ahora dolía aún más.

—¡Ahh!—

Empezaba a sudar frío, tenía miedo, no entendía que es lo que me pasaba, como pude fui hasta mi celular, que gracias a Dios, baje con migo.

Lo tome y rápidamente busque el número de Justin. Al encontrarlo llame rápidamente.
Un timbre... dos... tres...

Sentía los segundos como horas, suspire de alivio cuando lo oí contestar.

—¿Princesa?

—Ayúdame... Justin.—

De repente sentí un pinchazo que me hizo gemir de dolor.

—¡Voy en seguida! Espérame bebe...

Colgué y me apoyé en la pared mientras fui bajando hasta que finalmente me senté en el frío piso, que sirvió para calmarme un poco.

Y entonces... De repente ya no veía nada.

•••••

Miré a mi alrededor, al principio me alarmé, miré a mi alrededor y me tranquile un poco al darme cuanta que estaba en un hospital.

De repente la puerta se abrió y entró un hombre vestido con una bata blanca.

—¿Como se encuentra señora Bieber?

Alarmada recordé el dolor y coloqué mis manos sobre mi vientre.

—No se preocupe, su bebe se encuentra bien

Suspire aliviada.

—¿Que fue lo que me ocurrió?

—Contracciones, son normales a esta altura del embarazo, si no me equivoco ya tienes cerca de ocho meses de embarazo.

Asentí.

—Pero... también se dio debido al estrés, le sugiero que se relaje y se aleje de los problemas por ahora, piense en la salud de su bebé.

El doctor luego de revisar cómo estaba salió de la habitación.

¿Estrés? Todo aquel malestar, solo por mi estrés, no sabía que tenía estrés, la incomodidad que sentía estos últimos días se debía a eso.

Pero... ¿Estrés? ¿por que?

Suspire y lleve mis manos a mi rostro, sintiéndome tan tonta.

La puerta volvió a abrirse y vi a John entrar.

—¿Como se encuentra señora?

—Muy bien, gracias John.

—El señor Bieber tuvo que salir a la empresa, no pudo retrasar más la reunión, me dijo que le dijera que lo sentí mucho, pero que haría todo lo posible para venir a verla lo más pronto que pueda.

Asentí.

—Gracias John, puedes irte a casa.

El negó.

—Lo siento mi señora, tengo órdenes claras de quedarme aquí hasta que el señor Bieber llegue. Estaré en el pasillo, si necesita algo solo llámeme.

—Muchas gracias— le sonreí.

Él me devolvió la sonrisa levemente para luego salir de la habitación.

Solo debía relajarme y dejar de pensar en eso.

Todo saldrá bien.

Infieles. «jb Donde viven las historias. Descúbrelo ahora