©Las Miradas Hablan

20: ¡¿Cita?!

Trato de controlar mi respiracion entrecortada tras leer aquel mensaje pero se me hace casi imposible... ¿Quien es el que me envio ese mensaje? ¿Conejita? ¿Por que me dice así?

Ni le voy a dar tanta vuelta al asunto, puede que incluso fuera un mensaje equivocado, aunque de algo si estoy segura: no puedo contarle a nadie sobre esto. Sera mejor guardar otro de mis secretos.

Me encamino a la casa y pienso en como sera esta noche, ¿que me voy a poner para la cita?

Cita. ¿cita?¡Cita!

¿Dios como es que yo he aceptado una cita? En si no es tanto la maldita cita sino ¿como he aceptado tener una cita con Michael Salas: el famoso nerd cibernetico, filantropo, guapo y creador de SC? Ni en ni sueños mas remotos se me habia pasado por la cabeza semejante idea y ahora estoy a dos horas de que pase realmente. Espera ¿estoy a dos horas? No tengo nada que ponerme.

Corro como mocosa de 11 años escaleras arriba a la habitacion de Rebeca y me detengo en seco en la puerta.

Aqui se le metio un tsunami,  un tornado y un terremoto de 9 grados por que no le hallo otra explicacion a este desastre: fue algo asi como que huvieran hechado una bomba en el armario y esta rego todo por todo lado. Intento hacer un camino entre todo lo que hay tirado, para dar con una cosa que creo que es una persona. Hay una mata de pelo revuelto tirada en el suelo hablando solafrente al armario mirando dos vestidos.

-¿Rebeca?-le digo cuidadosamente ya que se por que ha de estar asi. Ella nunca se pone asi a menos que este insegura lo cual es muy raro en ella. Tiene una cita o un evento muy importante al que asistir. Y es que no se como le hace Rebeca para asistir a tanto evento: fue a casi todos los conciertos de famosos aqui del pais, ademas fue invitada a la gala Hawaiian Tropic en Puntarenas, y nombrada chica Reef en el 2013 e incluso conocio a todos los de Combate, lo cual apesar de que los odio fue muy monopolizado por todas la redes. No me extrañaria que fuera invitada a participar en un concurso de playa  o que fuera a una fiesta de esas cosmopolitan. Pero nunca en mi vida la vi de esta manera, lo que quiere decir que es muy serio.

-¿Rebeca?-le digo de nuevo y ella al fin me voltea ver.

En sus ojos brilla la desesperacion, el desconsuelo, la inseguridad y el anelo que siente.

-Ali, dime ¿azul o rosa?- me dice casi surrurando y veo cono su dedo apunta al armario donde estan los  dos vestidos que ella acaba de mensionar. El azul es brilante strapless, ceñido al cuerpo, mientras que el rosa es de tirante y es volado aunque delicado.

-¿para que es?-le digo.

-Tengo una cita.

-¿Como que una cita?-le digo escadalizada.

-Bueno, es que Eduardo me invito a cenar...

-¡¿Eduardo!?- ¡Por amor a todos los chachos voladores, que alguien me sostenga que me caigo!

-Si, y no se que ponerme, es increible que lo conozca tanto que al final no se ni que ponerme-me dice haciendo pucheros.

-¿Pero pense que te gustaba Steven?- le acuse, yo casi jure que iban a terminar saliendo juntos.

-Si, bueno es que el hombre es tremendamente guapo ¿has visto su cuerpo? Dios es un Adonis, pero Eduardo me invito a cenar y el tambien es muy guapo y es lindo lo conozco mejor que nadie y bueno, acepte.

-¿y por que el huracan?-le digo señalando a su alrededor el desmadre que tiene.

-Creeme, mi cabeza en estos momentos esta peor, pero es que no encontraba nada que ponerme.