EL CÓDIGO
—¿Debajo de...? —Leo entrecerró los ojos como si lo que acabaran de decirle fuera una mala broma, o al menos eso pudo intuir Venus.
—De mi cama, sí.
Él llevó sus manos al cubo y lo sostuvo, lo giró un par de veces buscando algo, pero no encontró nada.
—¿Qué estás haciendo?, ¿qué buscas? —le pregunto obviamente interesada.
—Este cubo está completamente liso —se lo dijo como si ella supiera de que estaba hablando y se volteó para mirarla a los ojos—, ¿lo ves?
—Claro que sí, esta frente a mí y llevo horas con él.
—No entiendes...
—Obviamente —volteó los ojos—, es justo por eso que vine contigo, porque no sé qué diablos hacía debajo de mi cama —elevó un poco la voz sin querer, aunque era entendible, aquello era muy confuso para ella, ese día parecía no acabar y mientras más avanzaba más cosas desconocidas y raras se le presentaban en el camino.
—Esto debería de tener un código, una forma al menos en alguna de las seis caras, pero no tiene nada, no hay ninguno y así es imposible descifrar que quiere que hagas —hablaba en un tono de voz serio, la mayoría de las veces lo hacía, por lo que Venus no podía tomarse nada a la ligera. Entonces ella recordó, la noche en que los vio a todos rodear el cubo que destellaba una potente luz escarlata y que estaba rodeado de figuras raras que pensó que eran códigos, después de todo no estaba tan equivocada.
«¿Descifrar lo que quiere que haga?», le había dicho.
—¿Se supone que debo hacer algo? —trago saliva a duras penas, todavía le costaba trabajo entender las cosas.
—Tal vez sea la prueba —negó con la cabeza—, sigo sin entender porque esto apareció cerca de ti —«lo entiendo, pero no quería que sucediera, no tan rápido» pensó él. Desvió su mirada a la fogata, se removió en su asiento, sintió algo en su pecho, una terrible punzada—. Y aunque quisiera no puedo hacerlo —susurró para él.
«¿Prueba?» lo pensó antes de hablar.
—¿Hacer qué? —Venus se acercó más a él para escucharlo mejor.
—Nada —respondió suspirando—, debemos regresar al lugar en el que apareció y ver si así aparece un código que nos guíe hasta tu prueba.
—Así que escape de casa para venir aquí y ahora tengo que regresar —el fastidio se mostraba en su voz lenta y pesada, soltó un largo suspiro de frustración, sus manos estaban apoyadas en sus rodillas y las impulsó para ponerse de pie.
—Y fue peligroso hacerlo, sino te hubiera encontrado a tiempo ese bebé dragón habría acabado contigo, te hubiera comido o partido en dos, me sorprende que tu novio no esté aquí contigo para protegerte —él también se puso de pie, remarcó la última palabra poniendo los ojos en blanco. Eso no pasó desapercibido para Venus.
—¿Era un bebé? —Venus abrió mucho los ojos mostrando su impresión, si ese dragón era un bebé no quería conocer a la mamá.
—Por eso salió corriendo, por su tamaño debe tener cuatro o cinco meses de haber nacido, ¿creíste que era más grande? —entrecerró un poco los ojos, como si estuviera seriamente pensando en ello.
—Apenas puedo creer que existen —murmuró perdida. El mundo que conocía escondía muchos secretos.
—Te dije que esto era algo de vida o muerte, no es una broma, no creas que pierdo el tiempo cuando merodeo en el bosque, estoy protegiendo tu ciudad porque así me lo asignaron, y esto del cubo y tu prueba tampoco es algo que debas tomarte a la ligera.

ESTÁS LEYENDO
VENUS Un nuevo mundo
FantasiVenus un nuevo mundo es es la historia de una adolescente llamada Venus que está conociendo un lugar totalmente desconocido, por lo tanto, un nuevo mundo para ella que estará lleno de aventuras sorprendentes, este lugar es algo que nunca creyó posib...