Escribir "Amor" En Tus Brazos/H.S./(EDITANDO)

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-Esto te ayudará- Dije entregándole un vaso de té caliente, pues a Harry le comenzaba a doler la cabeza por un gran golpe que se había dado cuando aquél tipo lo estampó contra la pared. En sus ojos seguía esa preocupación la cual pude notar cuando estaba recuperando mi falta de aire.

-¿Tu padres saben que estás aquí?-

-Salí muy rápido sin avisarle a tia Magda y… El celular lo olvidé- Torcí la boca y Harry agitó la cabeza en negación. –Descuida, les explicare.-

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Ahora me encontraba entre los brazos de Harry recostada en su pecho mientras él leía en voz alta una pequeña novela que había estado escribiendo.

Su forma de redactarlo y expresarse era muy intensa y me ponía a pensar muy a fondo. La trama era impresionante, nunca había escuchado un tipo de historia tan exótica como la que había escrito Harry.

-…Él estaba a punto de descubrir cual era su destino desde ahora.- Cerró la libreta y volteó a verme con una linda sonrisa. -¿Qué te parece?- Apoyé mis manos en su pecho acomodando mi cara un poco cerca de la suya.

-Es muy hermosa, Harry. Deberías terminarla y publicarla en algún lugar donde la sepan reconocer como se debe- El soltó una pequeña risa y dejo la libreta en la mesita de centro.

-Esto lo hago como un hobby, Margarette. Aparte, tengo una editorial que manejar cuando salga de la escuela.-

-¡Estaría mucho mejor! Solo piénsalo, Harry. Esa novela es muy de mi agrado y te recomiendo hacerla reconocer-

-Ya veré.- Sonrió y acarició mi cabello con lentitud. -

Trate de mantener la mirada con la de Harry, eso no era el gran problema, el gran problema era que me ruborizaba con cada segundo que pasaba. A pesar de que sentía mis mejillas arder no lo deje de ver a los ojos. Él estaba muy serio, sus ojos brillaban pero aún mantenían ese decaimiento.

Quería ayudarlo pero no sabía como. No sabía por cual problema estaba pasando. Necesitaba que me dijera y tendría mi ayuda incondicional.

-Quiero ayudarte, Harry.- Susurré. Él movió su abdomen incómodo y luego miró al techo respirando hondo.

-De acuerdo, te diré.- Me recosté en su pecho de nuevo. El brazo de Harry me rodeó por la espalda y pude escuchar su profunda respiración. –Como había dicho aquella noche, mis padres no se pudieron hacer cargo de mí. Cuando se fueron y yo quede a cargo de mis tíos, pensé que todo lo malo ya había pasado, pero no. A mi padre le afecto tanto el dinero que estuvo dentro de una mafia por un tiempo. La editorial estuvo a punto de perderse por todas las deudas que debía mi padre. Llamemos a mi padre Dess.- Asentí. Harry continuó. –Dess me dejo los papeles para que yo me encargara de la editorial. Dess después de un tiempo regresó a la misma mafia y desde haya me manda a sus ayudantes a cobrarme el dinero que él mismo debía-

-¿Desde cuando lleva haciendo eso?-

-Realmente mucho tiempo. Aparte, yo mismo le he pedido dinero a Dess por algunas necesidades que tengo-