Roses y;m

Capítulo 10

YoonGi sintió como su corazón había sido roto en mil pedazos de tal manera que sólo quedaba cenizas y un gran vacio.

Apenas había despertado su pulso se aceleró y miró a todos lados, pellizcando su piel una y otra vez deseando que lo que estaba ocurriendo era un mal sueño y que pronto estaría en brazos de Jimin como todas sus mañanas.

Pero se equivocó, empezó a llorar como nunca lo hizo sintiendo como si le desgarraban la garganta. 

Estaba solo.

La puerta se abrió; YoonGi se encontraba en una habitación poco iluminada y con distintos muebles de cerámica y cristal. Recordó que la habitación en la que se encontraba era en la que Jimin descansaba y leía sus comics junto con él hace un tiempo. 

Su corazón se estrujo ante el recuerdo.

-YoonGi, mírame.-Taehyung tomó sus mejillas y le obligó a mirarle a pesar de sus ojos nublados por las lágrimas.-Tranquilo, pronto tendremos a Jimin de vuelta ya verás.-Taehyung lo abrazó fuertemente al mirar un poco más se dio cuenta de que todo sus hermanos y cuñados estaban ahí.

Su familia. 

Había sido el último en despertar.

Un dolor de cabeza apareció de nuevo.

-Tenemos que encontrarlo no saben lo que le pueden hacer...

[^^^]

Jimin despertó sin poder ver bien del todo, sabía que algo le cubría los ojos. Su corazón se aceleró al sentir frío en su piel desnuda y sin darse la posibilidad de moverse.

-¡Por favor, déjame ir!.-Trató de quitarse lo que tenía encima pero eran cadenas, no había manera en la cual salir.

Su cuerpo tembló al escuchar después de tantos años esa voz.

-Por fin te tengo solo para mi, Jimin.-Una risa socarrona retumbó en las paredes de aquél lugar.

-Jeon Minhyuk.-Su voz tembló ante el miedo y repugnancia.-Pasó demasiado tiempo desde la última vez que nos vimos.

Sintió como los pasos se acercaban hacia donde se encontraba, también como su aroma le comenzaba a marear.

-Esperé tanto por este día, no sabes las cosas que me tocó hacer para tenerte así de "dispuesto".

-¿Que hiciste, Jeon?.-Tenía que saber, sabía que la razón por la que se encontró solo todos estos años lejos del amor de su vida era por él pero había algo que lo intrigaba y que sabía que era más doloroso que eso.

Minhyuk sonrió con malicia, sabiendo que no lo podría ver.

-¿Qué crees que hice, pequeño?

-No tengo idea, pero sé que hiciste algo que  me dolió demasiado. Así que dilo de una vez.

-¿Quién crees que fue la persona que alejó a YoonGi de ti?

-Tú.-Jimin sonó irónico pero a su vez, enojado.

-¿Quién crees que fue la persona que mató a la gente que era cercana a ti en nuestra escuela?

-¿Qué?

-¿Quién crees que mandó a miles de personas a que mataran a la familia Kim y en su preferencia a YoonGi cuando viajaron a entregar la mercancía?

-Tú...

-Yo fui quien trató de lavar el cerebro de YoonGi y mucho más importante, torturarlo. ¿Por qué? ¡Por quitarme al amor de mi vida de mi lado!

Jimin no dijo nada, solo se mantuvo callado apretando su mandíbula.

-Ahora. Esta es la más importante.

El ambiente se tornó oscuro y aún más frío.

-¿Quién crees que mató al hijo que tenías en tu vientre?

Jimin comenzó a llorar.

-¡Hijo de puta! ¡Me las pagarás! ¡No sabes cuanto te odio!

-No deberías, podrías tomar el mismo lugar.

-Eres un maldito, ¿Que te hizo pensar que me enamoraría de ti? ¡Eres un asco de persona!

Jimin sintió un cachetada, acto seguido sintió como su mejilla era tomada con fuerza y como unos suaves pero venenosos labios besaban pero también saboreaban su piel desnuda y temblorosa.

-No tendrás ningún hijo que no sea mío, de eso me encargaré yo.

Jimin solo se dignaba a moverse bruscamente y llorar.

-¡No me toques! P-Por favor...

Se sentía vulnerable y asqueado. No quería que le ocurriera lo mismo que a su padre, no quería sentirse como él.

-P-Por favor...-Su voz sonó cada vez más suplicante y agudo.

Se escuchó como abría un empaque y sonaba alguna clase de liquido.

-Quédate quieto.

-N-No...

Sintió como le tomaba del trasero mientras seguía con caricias y besos que simplemente no podía soportar.

Separó ambas nalgas y se dispuso a meter su miembro dentro de él.

-¡No! ¡No  hagas esto te lo suplico!.-Minhyuk tapó su boca y siguió con lo suyo.

[...]

Las horas pasaron, Jimin ni siquiera decía algo. Se sentia como un juguete un muñeco que solo estaba ahí por complacer.

MinHyuk se había mantenido en hacerle todo lo que quisiera.

-Tendrás un hijo mío a este paso, ya verás.-Depositó un suave beso y lo miró fijamente, observando como sus piernas estaban pegajosas.

Su plan se iba a ejecutar de una manera perfecta a este paso.

-Te dejaré descansar por unos instantes.

Jimin escuchó como la puerta fue cerrada con fuerza y se dignó a llorar fuertemente y gritar de dolor.

Sólo esperaba no quedar embarazado a este paso. Temía que lo que le inyectaba en su cadera fuera lo que estaba pensando.

-No...Por favor, no pueden hacerme esto.

De la nada sintió como comenzaba a caer dormido o mejor dicho desmayado, sintiendo como hormigueaba  su cuerpo.

Despertó por el sonido de metales chocar, sabía que se trataba de Minhyuk.

-Hyuk...

-¿Si?.-Al parecer seguía haciendo lo suyo aunque estuviera prestando atención.

-¿Dónde está Jungkook?

Aquél sonido se detuvo, por un momento sintió miedo de lo que llegara a ocurrir.

-Anda, no pensé que hablarías de él.

-¿Lo incriminaste?

-No puedo responder eso.

Jimin bufó.

-Al menos puedes decirme ¿Que es lo que me inyectaste esa mañana? Cada cierto rato me inyectas, no es como si fuera muy lindo.

-Cuando veas tu vientre crecer y unas tremendas nauseas te diré.

-Hijo de puta, no puedes hacerme esto. ¡No quiero un hijo de ti!.-Jimin escupió con furia.

-Ya veremos, tal vez cuando lo veas cambies de opinión.

MinHyuk terminó lo que hacía y de nuevo, un portazo se escuchó.

Estaba solo, otra vez.

-Donde están, Kim...