Intentemos ser Inmunes

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Narra Vanesa:
- ¿ Pero qué coño ? - dijo Malú mientras se levantaba y trataba de abrir la puerta - ¿ Pero cómo le pone seguro a la puerta ? ¿ Y si pasa algo ? ¿ Cómo nos dejan aquí encerradas ? - no paraba de caminar de un lado a otro del camerino y a mí es que me daba mucha risa verla así, hasta que no pude aguantar y salió la primera carcajada.

- ¿ Y tú de qué te ríes imbécil ?

- A mí no me hables así, si estamos en esta situación ahora mismo es por tu culpa tía, no hubieses venido y todos tan tranquilos como siempre. - "tan tranquilos como siempre" qué coño dices Vanesa.

- Pues perdona por interrumpir tu felicidad, trataré de no molestarte más lo que me queda de vida. - sus palabras se clavaron más que en mi sien en mi corazón, no puedo evitar que me duela el pensar que no volveré a verla.

- Malú, perdona, no quise decirte eso. Joder tía que tienen razón, no podemos comportanos como dos crías, como si nos odiásemos y no pudiésemos compartir el mismo oxígeno, el mismo espacio. - Le dije bastante apenada ante esta situación mientras me sentaba en uno de los muebles.

Narra Malú:

Tenía razón Vane una vez más, parecíamos dos crías, el ambiente se volvía tenso en cualquier lugar que coincidiésemos y hacíamos que nuestros amigos se sientieran incómodos sin saber si hablar con una u otra, ni saber qué decir y qué no. Me senté a su lado, no cerca pero si en el mismo mueble que ella. En mi cabeza se repetía en bucle una y otra vez ese "como si nos odiásemos" que dijo.

- Vanesa, tú...¿ me odias ? - mierda, ¿ por qué se me escapó eso de la boca ?

Veo que sonríe de medio lado y deja de mirar al suelo, se gira despacio, se queda mirándome y piensa unos segundos su respuesta. Yo temía que dijese que sí pero ya estaba dicho y como no entre nadie por esa puerta tendré que escuchar como la mujer de mi vida me dice un mi cara y mirándome a los ojos que me odia, si es lo que siente.

- ¿ Cómo se odia a una persona que has amado más que a tu propia vida ? ¿ Cómo se odia a la mujer con la que soñaste tener hijos, formar una familia, envejecer a su lado, celebrar cada triunfo y superar cada obstáculo de la vida ? ¿ Cómo se odia a quién creyó en mí cuando ni yo misma creía, a quién me dió la libertad y me permitió ser más yo que nunca ? ¿ Cómo se odia a la mujer de tu vida ? Si tú sabes odiarme enséñame a odiarte, porque en ocasiones me he odiado por no poder odiarte Malú. - Una lágrima rodaba por mi mejilla tras escucharla y la nostalgia se apoderó de mí porque me di cuenta tarde que todo eso que ahora me dice es lo que yo quise, quiero y querré tener con ella pero me dejé influenciar y dejé que otros me comieran la cabeza y decidieran que era lo "mejor" para mí. Cuando lo mejor de mi vida es ella.

- Vane, ¿todavía me amas? -

- No Malú, ya no te amo, te veo y me pongo nerviosa porque significaste mucho para mí, esta electricidad de nuestros cuerpos cuando se rozan va más allá de mi razón pero detrás no hay sentimiento más que de cariño por mi parte y quisiera tenerte siempre a mi lado. Pero me has dolido tanto que ya no recuerdo cómo era amarte. - y en este momento mi corazón se hizo cenizas, es más doloroso que me diga que no me ama a que me diga que no me odia porque yo si sigo enamorada de ella como desde el primer día o más porque él no tenerla me ha hecho darme cuenta de cuánto la quiero y la necesito.

- Ya, te entiendo. Pero no puedo negarte que me duele oírte decirme eso - me interrumpe

- Créeme que a mí también me duele y no sé si la cago más diciéndotelo porque de verdad me gustaría que al menos pudiésemos tener un trato cordial y - la interrumpo yo esta vez.

- Vane, no la cagas, nos debíamos está charla hace mucho. Todos esos sueños y sentimientos que tenías, fueron compartidos. La única diferencia es que yo fui una imbécil que no supo retenerte y una cobarde al dejar que otras personas interfieran en mi cabeza y se que es una excusa tonta pero me he dejado guiar tantos años por terceras personas, he dejado que decidan por mí por tanto tiempo que no supe ser valiente, no sabía serlo -