Crush ©

Capítulo 20: Sexo, dolor y lágrimas.

Lucas.

Martes, 05 de Abril de 2016.

No podía creer lo que estaba pasado, estaba estupefacto.

- Lucas- Dijo Tyson con voz suave y ronca-. Por favor, déjame hacerte el amor.

Sentí algo inexplicable en el pecho, y como las mariposas en mi estómago se revolvían y revoloteaban. No lo podía creer. Sentía que esto era un sueño echo realidad. ¿Acaso estaba soñando?

- ¿Qué sucede?- Preguntó con ciertos nervios en su tono-. ¿Acaso no quieres... coger?

Su rostro lentamente se tornaba rojo, y lentamente se volvía tímido ante mi.

No sabía qué responder, pero, contesté cuanto antes para que él entendiera que si estaba dispuesto a darle mi virginidad.

- Ty... Tyson..- Titubee, y él me miró con atención-. Si. P-Por favor, ¿podrías hacerme el amor?

La mirada de Tyson cambió, y expresó ternura y sorpresa al mismo tiempo. Asintió sonriendo de una forma que me hizo acelerar el corazón, y dejó un corto beso en mi mejilla dulcemente.

Se puso de pie, y me cargó de brazos entonces para subir conmigo arriba. Pudo levantarme con mucha facilidad, y yo aspiré el olor de su camiseta y me recosté en su pecho mientras que él me tenía en sus brazos como si fuera... su príncipe.

Subió conmigo las escaleras de madera, y salimos de ese horrible sótano. Estaba muy feliz, y la verdad sentía ganas de seguir llorando, pero de felicidad y estupefacción. Él subió las escaleras, y me llevó a su habitación. Dios mio.

Todo lo que estaba pasando seguía sin salir de mi asombro, y toda mi cara estaba roja. ¿Era vergüenza? No, era felicidad. Felicidad de por fin ser uno con el chico de mis sueños.

Cuando entramos a su habitación me recostó en las suaves sabanas de su cama, tirándose sobre mi, besando mi cuello con intensión de marcarme. Sus caderas se movían con un vaivén que rozaba nuestros miembros, y yo me encontraba erecto y con ganas de que me empotrara de una vez contra su cama.

Dejó de hacer succiones en mi cuello, y se levantó para volver a ponerse de pie.

- Quiero que continúes con lo que dejaste aquella vez- Habló él con voz grave y acelerada, llevándose una mano a su entrepierna para comenzar a tocarse el pene por fuera de sus pantalones-.

El corazón me dio un vuelco, y la respiración se me comenzó acelerar cuando noté que él quería que me metiera su pene a la boca. Oh Dios.

No pude reaccionar o contestar cuando él me cargó en sus brazos y suavemente me puso de rodillas frente a él en el suelo. Me quede lívido. Él sonrió con lujuria, y se sentó en la cama con las piernas abiertas. 

- Vamos prueba de mi- Habló de repente con la voz más grave de lo normal, de una manera malditamente sexi-.

Seguía sin salir del asombro, pero no volví a esperar otra pedida de Tyson, y me acerqué a sus piernas para comenzar a desabrochar sus pantalones y bajarlos con sus boxers con urgencia y desesperación. Sonreí, y su grande pene salió en un rebote cuando bajé su ropa interior. Era tan grande, y bonito.

Lo miré con deseo, y comencé a masajearlo lentamente de arriba hacia abajo. 

- ¿Quieres que lo chupe?- Pregunté juguetón, y él asintió frenéticamente-. Muy bien...

Saqué la lengua de mi boca y la deslicé por todo el glande, dejando caer un poco de saliva para luego dejarlo entrar en mi boca para abrazarlo con mis labios. Escuché sus gruesos gemidos mientras que lo metía poco a poco a mi boca hasta llegar a la mitad de su enorme tronco venoso. Entonces él me sostuvo de los cabellos, y yo saqué lentamente su pene de mi boca, succionando y acariciando su longitud con mi lengua. Tomé un corto respiro, y volví a meterlo a mi boca.