Forever Together (Percabeth)

Capítulo 28 PoV Annabeth:

Desperté abrazada a mi almohada.

Supongo que durante la noche, soñé con Percy.

Me levanté y duché para salir a desayunar.

Hoy era mi día libre, por lo que había planeado pasar todo el rato con Percy. Pero nuevamente la mesa de Poseidón estaba vacia. Trate de mantener la calma y comer mi desyuno.

Lo terminé y aún no aparecia haciendo que mis nervios se incrementaran.

-¡Hola Annabeth!- Piper besó mi mejilla y se sentó a mi lado

-Hola, Piper.¿Que tal?

-Apuesto a que no sabes quien me dio una encomienda para ti.

-¿Quién?- dije aún pensando en el estúpido Sesos de Alga.

-El sexy idiota de tu novio.

En un segundo Piper obtuvo toda mi atención.

-¿Percy?

-¿Que otro en el Campamento es sexy e idiota al mismo tiempo?

-Hey-sonreí de acuerdo con lo que decía mi mejor amiga- Ese idiota es mio.

-Lo se, Annie. Sólo estoy jugando. Pero bueno, Percy me dijo que te entragara esto- dijo entregandome una cajita alargada forrada con papel azul- le prometí no decirte nada, pues es una sorpresa. Asi que no lo intentes, ni conmigo ni con los demás.

-¿Los demás?

-Ups, dije demasiado. Cuando veas a Jackson dile que necesito hablar con él.

Se levantó y volvió a besar mi mejilla despidiendose. Abrí el paquete y no pude evitar que mi quijada cayera ante el obsequio.

Un precioso collar de diamantes se escondía entre el estuche. Justo en el medio de el collar y corazón mediano con tonalidades rosadas, se apreciaba resaltando aún más su belleza. También había una pequeña nota perfumada con su aroma. La abrí y un pequeño texto escrito a mano por Percy decia:

Hola mi amor.

"Desde aquí comienza una especie de busqueda del tesoro (yo soy el tesoro. Lo se, que modesto) sigue las pistas que te daré en cada nota para que me encuentres, te espero.

P.D.1. ¿Recuerdas donde nos conocimos? Me asombró tu romanticismo. "Babeas cuando duermes" (esta es la pista)

P.D.2. Por si no lo haz hecho mira al reverso del diamante."

Al instante lo hice y pude ver grabado un "P&A" detrás de el.

Guarde el collar, y me dirigí hacia la enfermeria, pues ese fue el lugar donde lo conocí.

Llegué y me encontré con Jason ayudando a Michael, de Apolo. Y Jason saludó.

-Annie, hola. Yo soy la segunda fase de Percy.

-Hola Jason-salude- Bien, ¿cuál es la sorpresa?

-Oh mira, ten-dijo sacando un ramo de rosas blancas-recuerda leer la nota. Me tengo que ir, espero que te la pases bien. MUY bien-salió riendo del lugar, dejandome desconcertada.

Tome la nota y admiré las bellas flores:

Hola de nuevo, Annie.

Esta es tu pista.

"Muchas veces nos divertimos en aquel lugar. Lugar de supuesto trabajo nos servia para jugar. Recuerdo besar tus labios color carmín y dejarme llevar por tu olor a jazmín.

P.D. No soy bueno para rimar, por si no lo habias notado."

Al instante recordé un día soleado en el que nos habían dicho que fueramos a los campos a recojer fresas. Mas que trabajar jugabamos entre nosotros. Regularmente Percy se colocaba una fresa en la boca ofreciendomela, pero solo dejaría que la tomara si lo hacia con mis labios. Corrí hacia allá y vi a Grover sentado entre las plantas, tocando una canción con su flauta de junco. Me vió y me invitó a sentarme.

-Annabeth, perdón por ser tan directo, pero muero de calor. Ten- colocó en mis manos un pequeño sobre brillante- Me tengo que ir, tengo que ayudar a Enebro.

Me despedí de él casualmente con la mano, mientras hurgaba en el sobre para saber su contenido. De este salió una tarjeta azul y no fue hasta que le di vuelta, que me di cuenta que era una tarjeta de descuento durante un año, en mi libreria favorita.

¡Di inmortalis! ¡Como amo a este hombre!

Cuando guarde la sorpresa observe que un pequeño trozo de papel, habia caido al suelo. Lo recogí y leí:

"Ya estoy harto de intentar hacer rimas sin sentido, asi que la ultima persona que buscas es ardiente. Literalmente es ardiente.

Con amor Sesos de Alga."

-¡Leo!- dije al instante.

Me eche a correr hasta la fragua de Hefesto, mientras gritaba su nombre y una vez que me vio se acercó para charlas.

-Hey Annie, veo que ya vas a finalizar esto. Toma- coloco en mis manos una caja grande donde bien pudieran caber un par de zapatos. Justo cuando iba a poner una mano encima de la caja, para abrirla, Leo me regañó.

-¡No! Percy me dijo que no la abrieras hasta que estuvieras con el. Y te prometo que aunque estuve tentado, yo tampoco la abrí- y en efecto la caja aun seguía sellada con cinta adhesiva.

-Bien, gracias Leo. Ahora a donde…

-Ah cierto. Ve con Blackjack.

-Pero no está.

-Según mis calculos, deberia llegar en… 3… 2….1- y cuando Leo dijo el último número, un relinchido se escucho tras de mi.

-Yo me voy a trabajar, suerte Annabeth.

-Adios Leo.

Me acerque al pegaso que tenia una nota amarrada a su pecho. Extendí el papel algo arrugadoy leí por quinta ocasión el mensaje de Percy.

Annabeth:

A este ritmo me encontraré contigo en unos minutos. Pero te pido que vengas con todos tus obsequios, y espero no hayas desayunado.

Te espero impaciente.

Tuyo, Percy Jackson.

Al instante me monté en el pegaso, pues llevaba conmigo, cada cosa que Percy me habia dado. Desde el collar hasta "la caja misteriosa".

Tal pareciá que el animal sabia a donde llevarme, pues despego y se dirigió a la ciudad.