Prólogo ✦

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     Observo con fijeza el ataúd frente a mí. Daniels fue un gran amigo. Gran compañero, leal al club y un extraordinario apoyo. Pero ahora ya no está. Se ha ido.

Ares nombra unas palabras en honor hacia él mientras todos escuchamos en silencio. Karen, su mujer, lo intenta pero no lo consigue. Su voz se rompe, y su cuerpo se derrumba antes de terminar la primera frase. Dibujo una sola línea con mis labios, intentando no dejar escapar las lágrimas. Es difícil decirle adiós a un miembro del club, especialmente a alguien que se le tenía bastante aprecio.

Alguien cierra la tapa del reducido rectángulo de madera donde el cuerpo de mi hermano descansa. Dejamos caer las rosas sobre él mientras la arena va cayendo, Hunter y David se encargan de ello.

A lo lejos se puede escuchar el sonido del resto de motocicletas que aún no tienen el permiso para poder presenciar esta escena, aceleran provocando que el ruido sea insoportable, pero es nuestra manera de ofrecerle homenaje a Daniels.

Los miembros del club Bloody Hell rugen con sus Harleys acelerando el manillar y dándole respeto a Daniels, jamás será olvidado. Su mujer se derrumba sobre el césped cuando el ataúd desaparece de nuestra vista y se pierde entre las profundidades del suelo. Trago saliva y aparto la mirada porque no quiero continuar grabando en mi retina esta escena. No lo deseo.

Me alejo antes de atravesar el Campo Santo y tomar a la mujer entre mis brazos, algo dentro de mí me dice que vaya y calme su sufrimiento. Mis zancadas son grandes, no controlo mis sentimientos, solo deseo irme de aquí de una vez por todas.

—Karen no puede permanecer en el club —me comunica Ares siguiendo mis pasos—, debes llevarla a la cabaña. Sabes que Los Hijos de Dios volverán con sed de venganza. No podemos permitir que nada le ocurra a Karen y su bebé.

—Lo sé. Hice la promesa.

—Bien. Vamos a por ella. —dice alejándose y comenzando a andar.

—¿Ahora?

—Por supuesto. ¿Crees que el club no está preparando ya el ataque? —arquea una ceja—. Debemos asegurar el bienestar de las mujeres y los niños. Quizá los lleve más tarde a la cabaña, también.

Niego, sabiendo que las dimensiones de la diminuta casa de madera no serán suficiente para acaparar con todos allí dentro.

Lost & Found © (Bloody Hell MC #3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora