Past.© [Ray x Norman]

09 | Teacher.

          El pequeño peliblanco golpea suavemente el hombro de la persona a su lado, con amabilidad.
Pues Ray se ve perdido mientras camina junto a él por una de las calles. No parece escuchar.

Después del instituto y las clases extras, ambos han decidido irse juntos.

En el camino, descubrieron algunas cosas que para algunos pueden ser sin importancia, pero que sin embargo, para ellos resulta ser un gran descubrimiento.

Ambos jóvenes toman la misma ruta para ir a casa.

Y por si eso fuera poco, a tan sólo dos calles antes del hogar de Norman, se encuentra el hogar de Ray.

El pequeño peliblanco no puede evitar sentir un extrañó sentimiento de sensatez en su pecho. Él está realmente feliz.

Aunque tal vez no puede decir lo mismo de Ray.

Ni siquiera con observarlo detenidamente puede tratar de entenderlo y tampoco puede tener la más mínima sospecha de lo que puede pensar.
Parece una pequeña caja de secretos que causan suspenso prohibido.

Ray es extrañó...

...Pero lindo.

—Hummm... ¿Puedo... Preguntar algo?— Norman ve sus pequeñas manitas sudorosas temblar un poco.

Él tiene curiosidad sobre lo que paso en el aula, sobre lo que escucho y sobre las atrocidades que con sólo dos palabras llegó a imaginar.

Tal vez se estaba adelantando y vio mal las cosas, pero él era curioso y necesitaba saciar aquel hambre por saber.

—Ya lo hiciste.— Ray le mira con obviedad, pero también, un ligero tono juguetón se asoma en su voz.

Norman le mira extrañado, pocos segundos pasan antes de que pueda comprender a que se refiere.

—No... Por favor, hablo en serio.

—Yo también habló en serio.— Sin más, el pelinegro barre su mirada. La devuelve al frente y camina como si nada hubiese pasado.—. ¿Qué quieres preguntar?

Y, aunque aquello último le haya tomado por sorpresa, el joven peliblanco se detiene unos momentos para pensar bien en la pregunta.

Pronto vuelve a tomarle el paso a Ray quedándose nuevamente a su lado.

—Cuando regresé al aula escuché a nuestro profesor decir algo en particular...— Guardó silenció mientras suspiraba.—. Fue algo como, “Eres bastante lindo.” Pero a decir verdad... No me dio tan buena espina que digamos. ¿A qué se refería con eso?

Ve la espalda de Ray estremecerse ante la frase, parece que un ligero viento helado a cruzado su cuerpo de forma violenta.

          Y aunque por más que le gustaría hablar, siente que no puede hacerlo.

Ray está atado. O eso siente cuando la soga imaginaria aprieta cada vez más sus muñecas y cuello.
Está a punto de ser asfixiado.

Siente el terror correr por sus venas.
Pero es uno que él puede controlar de forma fácil y rápida.

O al menos eso es lo que cree.

No tiene intenciones de hablar. No ahora y jamás.

—No es nada.— Contesta de la forma más cortante posible. De nuevo quiere estar sólo. No puede pensar en algo más que eso.

Entonces toma un camino diferente para ir a su hogar.

No deja que Norman hablé, evita la disculpa de su parte por ser muy estúpido y preguntar algo así.