Por Tu Amor...

Primer Semana

Narra Poché

Había pasado una semana desde que Daniel recapacito y quitará la demanda de custodia. Pero toda la semana Calle había estado distante. Se iba temprano a trabajar y regresaba cuando yo estaba dormida, casi no contestaba mis mensajes o llamadas, estaba bastante confundida, pues no entendía lo que sucedía con ella.

Hoy no fue la excepción, cuando desperté Calle se había ido. Así que me levanté de la cama, y me dí una ducha antes que Sarah despertará.

Cuando salí de la ducha, me puse algo casual y le mandé un mensaje a Calle "De nuevo te vas sin despedirte y apuesto que regresaras, cuando yo esté dormida ¿no?".

Después de escribir el mensaje, fui a la habitación de Sarah para darle de desayunar, bañarla y cambiarla.

Cuando termine de hacer eso, llegó Daniel por la bebé, pues hoy la cuidaría porque por primera vez desde el embarazo regresaría al trabajo.

-Hola Poché, hola mi amor.
Dijo salúdame a mí con un beso en la mejilla y a Sarah con un beso en la frente
-¿Nerviosa por volver al trabajo?
Dijo mientras yo le pasaba a la bebé.
-Algo, pero la verdad ya estaba extrañando tomar fotos.
-¿Tan mal trabajo tu equipo?
-jaja, No, de hecho hicieron un gran trabajo en el estudio, pero extraño mi trabajo.
-Bueno, me alegro que no hayan destrozado tu estudio
-Jaja, gracias, pero ya me voy.
-¿Quieres que te llevemos?
-No es necesario, tomare un taxi.
-No, como crees, yo te llevo, además iré a ver a mi hermano y tu estudio es yendo a su casa.
-Bueno está bien.
-Bien entonces, vámonos.

Narra Calle

Me había despertado temprano antes que Poché se levantará a darle de comer a Sarah, me duché y cambié en el cuarto de invitados y salí para mi oficina.

Toda la semana había hecho eso de despertar antes que Poché lo hiciera y regresaba cuando ya estaba dormida, además que casi no respondía sus llamada y mensajes, la verdad me dolía el estar haciendo esto, pero debía empezar a alejarme para poder terminar con Poché, pues así debía de ser por el pacto que había hecho con Daniel.

Cuando llegué al lugar, baje del auto, subí a mi oficina, y me recosté un rato en el sofá que había en ella, para esperar a que Pau y Juana llegarán, pero durante la espera me quede dormida, hasta que el sonido de mi celular me despertó, era un mensaje de Poché.

"De nuevo te vas sin despedirte y apuesto que regresaras, cuando yo esté dormida ¿no?".

Decidí no contestar y mejor ir a ver si Juana y Pau habían llegado. Así que fui directa a la oficina de Pau.

Al entrar a su oficina, Pau ya estaba ahí, así que arreglamos unas cosas sobre una pasarela en la cual nosotras seríamos las maquillistas. Cuando terminamos de ver ese asunto llegó Juana y ahora trabajamos las tres en el diseño de una línea de ropa que queríamos lanzar, cuando por fin acabamos, comenzamos a charla un rato.

-Oye Calle, ¿Por qué has estado llegando tan temprano y te vas hasta tarde? O sea sabemos que eres puntual y todo, pero toda esta semana llegaste antes que todos.
Dijo Juana.
-La verdad, no sé qué pasa.
-¿Tienes problemas con Poché?
Pregunto Pau, la verdad quería contarles la verdad sobre el pactó con Daniel, pero no quería involucrarlas, así que decidí mentirles a ellas también.
-Pues sí, creo
-¿Y qué es lo que está pasando?
"Que hice un estúpido pactó con el estúpido de su ex para que no le quitará a Sarah, pero ahora tengo que terminar con ella para que el cumpla la parte del pactó" pensé pero no lo dije.
-Pues la verdad extraño mi vida de soltera, es muy cansado tener una bebé.
Mentí
-¿De verdad extrañas la rumba?
Preguntó Juana.
-Sí, extraño mi espacio, mi vida de antes.
-Deberías hablar con Poché ¿no crees?
Dijo Pau
-Sí, pero la verdad tampoco quiero separarme de ella, es confuso.
-Lo que necesitas entonces es despejarte, ¿Por qué no nos vamos de rumba hoy?
Dijo Pau
-Si Calle, salgamos, antes que tomes una decisión precipitada con Poché. Además es viernes, y ya mañana no tenemos nada que hacer aquí en la oficina.
Dijo Juana
-Suena tentador.
Dije
-Pues entonces no lo pienses más, nos vemos a las 8:30 en mi casa, de ahí nos vamos juntas a rumbear.
Dijo Juana
-De acuerdo
-Bueno, entonces vayamos a arreglarnos y a descansar un poco.
Dijo Pau
-Bien, nos vemos al rato.
Dije saliendo de la oficina de Pau, para después dirigirme a mi auto y conducir hasta la casa de Poché.

Narra Poché

Después de haber culminado mi primer día de regreso al trabajo, Daniel pasó por mí, así que cuando llegamos a mi casa lo invité a comer. La verdad la estaba pasando bien con él, la estaba pasando bien acompañada.

Cuando terminamos de comer, fuimos a la sala a charlar un rato, pero para mi sorpresa Calle llegó temprano ese día.

-Hola Daniela.
Dije
-Hola
Dijo y subió a la habitación.
-Daniel, ¿puedes llevar a la bebé a dar una vuelta al parque en lo que yo hablo con Calle?
-Sí, claro, pero ¿está todo bien?
-No lo sé, pero quiero averiguarlo.
-Bueno, iré por la bebé
-Yo subiré con Calle

Subimos juntos, el tomo a la bebé, la carriola y salió de la casa.

Yo entré a la habitación y vi a Daniela salir de la ducha.

-Creo que tenemos que hablar.
Dije contundente
-ah ¿sí? ¿Y de qué quieres hablar?
Dijo algo cínica
-¿Enserio Daniela? Toda la semana estuviste distante, no contestas mis mensajes ni llamadas, llegas tarde, te vas temprano, es como si no quisieras estar aquí.
-Pues al parecer no te ha molestado tanto, tienes buena compañía ¿no?
-No me vengas con pendejadas y mejor dime ¿Qué demonios te pasa?
-Sabía que debía ir a arreglarme a mi apartamento.
-PUES LARGATE A TU APARTAMENTO SI TANTO TE MOLESTA ESTAR AQUÍ.
-No sigas Poché, que no quiero decir nada.
-Dilo, yo quiero saber.
-Ah ¿quieres saber? ¿De verdad quieres saber que mierdas me pasa?
-Sí, obvio.
-Estoy cansada, eso pasa.
- ¿De mí? PORQUE YO ESTOY CANSADA DE TU ACTITUD DE ESTA SEMAMA
-SABÉS QUE ME VOY A ARREGLAR A OTRO CUARTO QUE YA ME CANSE DE TUS PINCHES RECLAMOS.
-¿Vas a salir?
-Sí, ¿hay algún problema con eso?
-Sabes que has lo que quieras.
-Perfecto, eso haré.
Dijo y salió de la habitación, estaba triste, habíamos pasado por muchas cosas juntas, la amaba, y me dolía lo que estaba pasando entre nosotras.

Narra Calle

Cuando llegué a la casa para mi sorpresa estaba Daniel ahí, así que solo dije hola y subí a darme una ducha para arreglarme para salir con Juana y Pau.

Cuando estaba saliendo de la ducha, Poché entró.

-Creo que tenemos que hablar.
Dijo y era obvio que quería hablar de mi comportamiento de la semana pero tenía que seguir en mi postura odiosa aunque me doliera ser así con ella.
-ah ¿sí? ¿Y de qué quieres hablar?
Dije algo cínica
-¿Enserio Daniela? Toda la semana estuviste distante, no contestas mis mensajes ni llamadas, llegas tarde, te vas temprano, es como si no quisieras estar aquí.
-Pues al parecer no te ha molestado tanto, tienes buena compañía ¿no?
En parte si me daba coraje ver a Daniel aquí y después de lo que tenía que hacer para que el idiota no le intente quitar a Sarah a Poché, pero no era algo por lo que pelearía con Poché.
-No me vengas con pendejadas y mejor dime ¿Qué demonios te pasa?
-Sabía que debía ir a arreglarme a mi apartamento.
Dije tomando mi ropa de los cajones.
-PUES LARGATE A TU APARTAMENTO SI TANTO TE MOLESTA ESTAR AQUÍ.
Comenzó a gritar Poché.
-No sigas Poché, que no quiero decir nada.
-Dilo, yo quiero saber.
-Ah ¿quieres saber? ¿De verdad quieres saber que mierdas me pasa?
-Sí, obvio.
-Estoy cansada, eso pasa.
- ¿De mí? PORQUE YO ESTOY CANSADA DE TU ACTITUD DE ESTA SEMANA
-SABÉS QUE ME VOY A ARREGLAR A OTRO CUARTO QUE YA ME CANSE DE TUS PINCHES RECLAMOS.
Grite, y de verdad que me lastimaba tener que actuar así, pero era por el bien de mis bellas princesas.
-¿Vas a salir?
-Sí, ¿hay algún problema con eso?
-Sabes que has lo que quieras.
-Perfecto, eso haré.
Dije y Salí de la habitación para entrar a la de invitados, dentro ya de la habitación no pude evitar dejar salir unas lágrimas, odiaba tener que ser así con Poché, pero quería protegerlas.

Terminé de arreglarme y salí de la casa para dirigirme a casa de Juana.

Narra Poché

Después de esa pelea, me quede en mi habitación unos minutos, y comencé a llorar, extrañaba a Calle, mi novia y mejor amiga.

Cuando salí de mi habitación, Daniel ya había regresado con Sarah del parque, me ayudó a cambiarle el pañal y a entretenerla un rato. Después de un rato, salió Calle de la habitación de invitados ya arreglada, eventualmente salió de la casa sin despedirse y arrancó su auto.

Después de eso pasaron unas horas, Daniel llevo a dormir a Sarah a su habitación y él se retiró a su casa, no sin antes decirme que si necesitaba algo sin dudarlo lo llamara. Yo fui a mi cuarto e intente dormir.