Capítulo 34

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~ Mael PV:

- ¡Kyle! ¡Lance! - Grité escarbando entre las piedras.

- ¡Mael! - Escuché gritar a Kristen. - ¡Sal de ahí!

Después de eso sentí como unas ramas me cogían de los brazos y me sacaban de aquel sitio. Tras salir de las ruinas vi como la casa terminaba de desplomarse. Me quedé allí tirado, en medio del jardín, mirando como caían las piedras. Kristen y Alice estaban a mi lado y Ariane cerca de nosotros.

- ¡¿Qué quieres, morir otra vez?! - Me gritó Kristen, fue tal el grito que me hizo ponerme de pie.

- Yo-yo no sé que ha pasado, escuchamos una explosión y acto seguido estábamos cayendo del segundo piso. Kyle... Kyle se dio un golpe muy fuerte y no pude cogerlo, cuando conseguí estar consciente de lo que pasaba ya no lo veía. Tenemos que ir por él Kristen... ¿Y Amara?

- ¿Amara? - Dijo ella y abrió los ojos de tal forma que pensé que se le iban a salir. - ¡Ariane! ¿Y mi hermana? - Le gritó y ella pareció recobrar la consciencia.

- A-Amara... Amara me empujó con una ráfaga fuera de la casa en el momento exacto que vimos aquello explotar.

- Lance también estaba dentro... - Dije y acto seguido oí un rayo caer cerca nuestro.

- Tengo mucho que enseñarte, hermano. - Dijo Lance apareciendo de la nada.

- ¿C-cómo has hecho eso? En fin, da igual. ¿Estás bien? - Dije yendo a darle un abrazo.

- Sí, por suerte al oír la explosión me transporté con un rayo.

- ¿Podemos hacer eso? - Pregunté asombrado.

- Sí, aunque no lo recomiendo, después de eso estás débil. - Dijo y asentí.

- Busquemos a Kyle y a Amara. - Dije y Kristen metió sus puños bajo tierra, ramas y raíces comenzaron a brotar por las piedras, separándolas y quitándolas, sus ojos brillaban de un verde esmeralda.

Después de unos cuantos minutos buscando en las ruinas algún rastro de ambos, no dimos con nada, ni con sus cuerpos. No sabíamos que hacer, era técnicamente imposible que no estuviesen ahí.

~ Kyle PV:

- Bueno, bueno... Parece que tengo dos Cowen por el precio de uno. - Escuché mientras despertaba. Dios... Como me dolía la cabeza.

- ¡Suéltanos! - Escuché decir a Amara, en ese instante abrí los ojos.

Nos encontrábamos en una especie de cuarto con luces tenues, se veía poco y parecía no tener ventanas. Tal vez era un sótano. Amara estaba atada de brazos y piernas en una cama, llevaba puestos unos guantes de acero que no le permitían mover las manos y un bozal de rejas que no le dejaba mover mucho la boca. Yo también llevaba esos guantes y estaba atado igual.

- ¿Quién eres? - Le pregunté.

- Me llaman Dos Caras. - Dijo, parecía estar disfrutando de este momento.

- ¿Qué quieres de nosotros? - Pregunté.

- ¿De vosotros? Solo vuestra cara... - En ese momento cambió su aspecto, como hacía Ryan, convirtiéndose en mí. Esto no podrá ser nada bueno... - Ahora, simplemente dormid. - Dijo y se fue hacia la salida, al rato volvió y dejó una bombona blanca, la cual abrió y dejó ahí para después volver a salir. Poco a poco Amara y yo entramos en un trance, ya no podía mantener los ojos abiertos...

~ Mael PV:

- ¿Habéis dado con algo? - Nos preguntó Jaden, negué con la cabeza.

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