Capítulo 26

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~ Jaden PV:

- Pues tú dirás, Alice. Somos todo oídos. - Respondí a la propuesta de la nueva Banshee.

- Veréis. - Dijo Alice setándose a nuestro lado. - Las Banshees somos las damas de la muerte. Somos las mensajeras, nos encargamos de predecir una muerte de alguien cercano y poder evitarla. Cuando desarrolles más tus poderes, Darlene, podrás saber cuando va a pasar y eso quieras o no es de mucha ayuda. Nuestro grito, a parte de ser un arma, es la forma de fijar lo paranormal. Cuando gritas, tus sentidos se agudizan, todos ellos. La respuesta siempre está en él. Tu poder como brujo, Jaden, te permite tantear todos los terrenos sobrenaturales. Incluido el nuestro. Con tu ayuda, Darlene puede encontrar a Mael en el mundo de los muertos. Llámalo El más allá o como te plazca. Para que él pueda salir de allí, simplemente debes encontrar su esencia, cuando una persona muere a temprana edad suele ser fácil devolverlo a la vida, pues su alma sigue necesitando vivir. Las Banshees somos como un puente entre ambos mundos, cuando adquirimos nuestro poder y morimos no volvemos a la vida. Simplemente seguimos en este mundo, pero estamos muertas. No sé si me he explicado bien.

- Creo que lo he captado. - Dije intentando quedarme con toda la información.

- Yo creo que no. Lo siento soy tonta. - Dijo Darlene riéndose. Esta chica...

- Resumiendo: Tú, como Banshee, puedes traer de nuevo a Mael. Ya que estás muerta. Eres la puerta que separa la vida de la muerte, contigo y con Jaden, Mael podría volver.

- ¿Cómo lo hacemos? No he visto ningún hechizo en el libro. - Dije, si no hay hechizos de eso no sé como voy a hacer todo lo que dice.

- Jaden. Tu poder no es leer un libro. Tu poder es conjurar y no tienes por qué seguir una receta. ¿O un cocinero solo cocina siguiendo las recetas de otros? ¿No crea las suyas propias también?

- ¿Puedo hacer eso? Tienes razón. - Dije. Tengo que hacerlo por Mael.

- Tendrás que inventar un conjuro que haga que Darlene pueda entrar en el otro plano. Una especie de viaje astral. Después entra en juego ella. Tú eres la llave que le abrirá la puerta a Darlene, Jaden.

- Entiendo. Me pondré a ello. - Dije y me marché de allí.

Volví a mi habitación. Comencé a ojear libros sobre hechicería que había comprado en la antigua biblioteca del pueblo antes de irnos, no serán la mejor fuente de información, dado que algunos son puras sandeces, pero necesito inspirarme con esto. He de ser capaz de conjurar a una persona para que pase al mundo de los muertos. No sé como lograr esto. Dejé los libros de lado y me tiré en la cama. Miré al techo, estaba igual de blanco que mi mente. No sé como voy a conseguir que se me venga un hechizo. Pensé detenidamente en el procedimiento. Tendré que llevar a Darlene a otro mundo. ¿Cambio de mundos? 

Estuve horas pensando. De repente oí un leve susurro en mi oreja. Me senté de golpe y vi que en la habitación había una corriente de aire, pero no había nada abierto, ni la puerta ni la ventana. Volví a oír un susurro y esta vez lo entendí. Acabo de caer en el hechizo. Ya sé lo que tengo que hacer. Salí de la habitación.

- ¡Tessa! Necesito las velas. Liss, ven conmigo. ¡Kyle, sal! - Dije en medio del salón.

- ¿Pasa algo? - Me preguntó Dante.

- Voy a traer a Mael de vuelta. - Me miró algo sorprendido y asintió.

- ¿Qué has dicho? - Dijo Kyle bajando las escaleras.

- Mael va a volver. - Dije y vi que Tessa venía con cinco velas.

- Vamos fuera. Dije y me siguieron los nombrados junto a Dante. - Liss, necesito que me hagas un círculo de piedra aquí. - Obedeció mi orden y proseguí. - Trahere stella.

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