Imperium

Capítulo 40

~ Kyle PV:

- Kyle... - Oía una dulce voz llamarme. - Kyle, despierta.

- ¿Qué hora es? - Pregunté aún con los ojos cerrados.

- Tarde. ¿Quieres ir a dormir? Yo te relevo. - Me contestó.

- Da igual... Esperaré aquí. - Entreabrí un poco los ojos y conseguí ver quién me hablaba. Era Tessa. - ¿Ya han despertado todos? ¿Cómo estás?

- Todos no, la mayoría. - Me dijo y fue a cerrar la puerta. - Yo bien. Me han contado todo lo que ha pasado... ¿Cómo estás tú?

- Raro... - Dije y me hizo un puchero.

- Es normal, pero espero que más tranquilo. Ahora todo ha pasado.

- ¿No se han despertado estos dos? - Pregunté saliendo de mi cabeza.

- Ninguno de ellos. - Dijo Tessa negando con la cabeza. - Si no te importa, me quedaré aquí también. Quiero estar para cuando Jaden se despierte.

- Que va mujer, siéntate a mi lado anda. Siempre es mejor estar en compañía. - Dije mientras le hacía un hueco en el sillón.

Tessa comenzó a contarme los planes que tuvieron para sacarnos a Jaden y a mí de allí, pero que fueron completos fracasos. Aunque Amara tuvo buenas ideas, tal vez la forma de ejecutarlas no fue la más sensata. Aún así fue increíble lo que hicieron y, sin quererlo, empezaron la destrucción de aquel lugar. Fue divertido escuchar como Tessa lo contaba, pues es una chica que se acelera cuando se emociona y comienza a poner una voz muy aguda. Es encantadora.

- ¿Qué ha pasado? - Escuchamos de golpe, ambos dimos un pequeño brinco del susto que nos causó oír de repente otra voz. Era Mael, acababa de despertar.

- Mael... Tranquilo, Jaden te durmió y te trajimos a casa de Liss, donde están todos. - Le dije con calma, como para que no se colapsase con la información.

- Ah... ¿Cuanto tiempo ha pasado? ¿Y por qué Jaden ha hecho eso? - Dijo desperezándose.

- Pues ni un día. - Dije y me acerqué a él. - Y pues creo que a Jaden le ha afectado la oscuridad. Lo vi con esos ojos oscuros, como dos agujeros negros sin alma. Daba miedo.

- Entiendo. - Dijo y me cogió de la camiseta para acercarme a él y darme un beso. Sonreí.

- ¿Cómo estás? - Le pregunté después de separarme unos centímetros de él.

- Bien... Como si hubiese dormido tres años. - Dijo y reímos.

- ¡No! - Oímos de repente al lado nuestra. Por instinto o por el susto, no sabría decir qué lo causó, cogí a Mael y nos metí en una burbuja de hielo. - Opka erza nie bgujrm.

- ¡Jaden! - Gritó Tessa. En ese momento Mael y yo salimos de la burbuja y nos separamos un poco. - ¡Despierta!

- Estoy más despierto que nunca. - Dijo este, no parecía él, ni siquiera su voz. Sonaba más ronca, más grave. - Opka erza nie bgujrm. ¡Que las sombras vengan a mí y se apoderen de estos cuerpos! - Gritó y todas las bombillas reventaron. Corrí hacia Tessa y Mael hizo lo mismo. Oímos unos gritos muy agudos, casi imperceptibles, parecían traídos desde el más allá. - Matadlos a todos. - Eso sonó a la voz más grave que he oído en toda mi vida. Un escalofrío me recorrió entero.

- ¡¿Qué está pasando?! - Oímos gritos venir de abajo, eran los demás. Según dijo Tessa, no todos están despiertos, por lo que están indefensos.

- ¡Hay que ir con el resto! Los que no hayan despertado están en peligro. - Grité y ambos me siguieron. Jaden ya no estaba ahí.

Al bajar vimos como unos espectros muy raros y tenebrosos salían de todas partes, Kris los enredaba en enredaderas tan apretadas que los hacía encoger hasta desaparecer. Amara los empujaba hasta la pared dejándolos inmóviles y Liss los separaba en dos como si de un palillo se tratase. Yannick y Ariane usaban el mismo poder, haciendo huir a todo espectro que las mirase y defendiendo así a los aún dormidos. Keiko se defendía como podían con cuchillos de carnicería que intuyo han sacado de la cocina de Liss. Dante y Lance seguían dormidos. Un espectro se cruzó en nuestro camino y conseguí helarlo, no eran algo físico, pero seguía estando compuesto por materia y eso lo podía congelar fácilmente. Mael le lanzó una fuerte descarga a uno el cual cayó al suelo de golpe. No paraban de salir.