Capítulo 7
Cuando me estaba acercando pude ver como pasado ese arco había gente, poca, pero la suficiente para que me pudiese ayudar a salir de este problema que me estaba persiguiendo, pero no todo podía ser tan fácil, claro que no, si soy yo, Elara. Cuando creía que había llegado, uno de esos monstruos me golpeo y se tiró encima, hice todo lo posible para quitármela de encima, pero al final solo me quedó gritar, esperando y rogando que alguien me escuchase y ayudase.
Y por una vez en mi vida parece que tuve un poco de suerte, porque apareció un chico, el cual con una espada mato a uno de los monstruos, pero el otro logro escapar.
- ¿Estas bien? - fue lo primero que me dijo después de ayudarme a levantarme.
- Si, gracias solo me empujó, pero-en ese momento empecé a ver borroso y sentí como tenia la pierna mojada, pero cuando miré hacia abajo, solo vi como mi pierna estaba llena de sangre y justo en ese momento todo se puso negro para mí.
Cuando abrí los ojos vi que estaba tumbada en una camilla, similar a la que había en consultorio del médico. Cuando me iba a levanta se acercó rápidamente un joven alto, de cuerpo atlético, cabello rubio greñudo y ojos azules. - Hey, tienes que estar tumbada unas horas más.
- ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? ¿Dónde está Quiron? Necesito verlo el puede- antes de que pudiese seguir me interrumpió- Tranquila, ya estas a salvo, estas en el Campamento Mestizo pronto podrás ver a Quiron. Te has dado un gran golpe, toma bébete esto y te sentirás mucho mejor incluso puede que en unos minutos ya puedas ir a buscar a Quiron y hablar con él.
Me bebí la medicina que me dio y cuando la provee, me sorprendí, sabia como la tarta que hacía mi abuela, esto solo me hacia recordar lo pasado hace unas horas, me terminé rápidamente la bebida y por alguna razón ya no tenía ninguna herida . Cuando vi que estaba distraído me levanté y salí por la primera puerta que vi.
Todo estaba muy oscuro, tenia que ser ya muy tarde. Me fijé que todo estaba lleno de cabañas, muchas de ellas oscuras y otras con las luces aun encendidas, a lo lejos vi una cabaña, bueno, mejor dicho, una casa destacaba entre la multitud, mi instinto me decía que allí estaba Quiron. Cuando me estaba acercando choqué con un chico. - Mira por donde andas. - Y eso fue lo único que dijo antes de desaparecer en la oscuridad de la noche. Que persona más desagradable, me levanté y me dirigí hacia la casa. Allí en la puerta me estaba esperando, un hombre de rostro afable de edad avanzada, pero solo hasta la cintura porque de allí hacia abajo tenia cuerpo de caballo, al parecer el día de locos que llevaba solo estaba comenzando.
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La hija de Eros- Nico Di Angelo
RomanceSi estas leyendo esto solo hay dos posibilidades o eres un semidiós y alguno de los dioses ha bajado a la tierra a divertirse, y recemos para que no sea Zeus y no tener una guerra con Hera, pero si no es esa solo puede ser que alguno de los Stoll lo...