Sobre el callejón aún caía una lluvia torrencial.
Mr. Galath apuntaba su espada hacia la garganta de Jon, quien se encontraba sentado dificultosamente sobre unas bolsas de basura, mientras se tomaba la pierna donde tenía una flecha incrustada.
Jon se encontraba en un estado de agonía y desesperación, derramando lágrimas por la muerte de sus camaradas y por el miedo de que ahora sería su turno. No había nada que hacer para escapar, era muy consciente de eso. Jon, desde pequeño, fue entrenado por su tío para que pudiera comprender la fuerza de su oponente con tan sólo mirarlo. Al ver a Galath, y a los otros hombres, inmediatamente había comprendido que no tenía ni la más mínima oportunidad de enfrentarse a tales individuos. Sólo podía esperar un milagro.
—Ni siquiera el hombre que puede derrotar a mis subordinados es invulnerable ante el temor de la muerte —decía Galath—. Bueno, al fin y al cabo, es imposible para cualquier ser vivo no temer la muerte. Es algo natural el querer vivir. El querer obtener poder, cumplir objetivos y sueños. Dime, ¿Cuál es tu motivación para trabajar con esta gente?
Jon se encontraba sumamente agitado y no pudo contestar de primeras. La herida le mataba del dolor y continuaba quebrado por el miedo y la muerte de sus camaradas.
—Mi familia —contestó Jon.
—¿Familia? ¿Estás en esta organización para protegerlos?
—Sí... —decía Jon con dificultad— me obligaron a trabajar para ellos, yo tuve que aceptar... para proteger a mi familia.
—Entiendo. Bueno, sólo quería escucharlo de ti. En realidad, ya se todo sobre ti y también sobre la Cosa Nostra. Sé sobre sus planes para aniquilarte, a ti y a tu familia.
—¿Aniquilarme? ¿Qué es lo que sabes?...
—Veamos... tú eres el nieto de una leyenda, un gangster que provocó una guerra entre las Cinco Grandes Familias hace veinticinco años, y con ella el colapso de toda la Cosa Nostra. Desde ese momento le han guardado un gran rencor a su familia, y tú eres una víctima más de ese rencor. Desde antes de reclutarte, su objetivo fue simplemente matarte, pero utilizando a nuestra organización para que tu tío no pudiera atacarles directamente.
—¿Todo... para matarme?
—Sí. Ellos querían evitar, en lo posible, que tu tío se volviera loco de ira y les causara problemas. Supongo que es por esa razón que quisieron utilizarnos a nosotros para matarte. Y aquí estamos.
—¿Por qué... ustedes? ¿Quiénes... son?
—Somos la gang de la Alianza de Naciones Centrales. No hace falta explicar que venimos del Mundo Exterior. Desde que nosotros estamos aquí, la Cosa Nostra trabaja para nosotros y es gracias a nosotros que han podido revivir como organización. Sí... si no fuera por mí, ellos no serían nada. Por eso, deberán pagar su traición. Pobres tontos... creyeron que podrían utilizarme a mí, para acabar contigo.
—¿Entonces... ellos hicieron que atacáramos a Bastáis...?
—Exactamente. No tengo idea de cómo, pero mi hipótesis es que tus amigos también estuvieron involucrados. No sabían de esta trampa, pero posiblemente fueron ordenados a asesinar a nuestro subordinado.
Jon se mantuvo en silencio un momento. «¿Dice que fui engañado por mis camaradas? ¿Qué ellos mataron a Bastáis por órdenes y me involucraron a propósito? No... no lo creo. Ellos no me engañarían», pensó Jon.
—¿Acaso no quieren matarme... por haber sido cómplice? —dijo en voz alta.
—Eso es lo que Gentile y todos ellos quieren. Además, ahora tenemos algo en común: tanto tú como yo queremos acabar con estos tipos. Pero sería muy fácil y aburrido para mí, creo que será más interesante que te encargues tú mismo.
ESTÁS LEYENDO
Odisea de Clanes | Volumen 1 - Primera Odisea en Ineria
AcciónPrimer volumen de la serie Odisea de Clanes. Ineria es una nación moderna y aislada en el centro de un vasto mundo fantástico e inexplorado. En el pasado, este país fue la esperanza y el sueño de aquellos que provenían del Mundo Exterior y escapaba...