Capítulo 40

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ROBERT

Estoy corriendo a casa de ese Matt, se dónde vive? No, ni idea, pero no importa, encontraré su casa de una manera o otra.

Después de llamar a cuarenta casas y recibiendo "no" y portazos en la cara, en una me abrió la persona que quería.

-Qué haces aquí rubito?- dijo el graciosillo apoyándose en marco de la puerta.

-Vengo a hablar contigo, si es que aceptas la petición.

-De qué?

-De Liria.

Portazo en los morros. Muchas gracias graciosillo.

Comencé a llamar de nuevo hasta que a la décima vez de llamar abrió con un notorio enfado.

-Sólo cuatro cosas, ella es algo reservada conmigo...

-Para que quieres saber nada de ella?- dijo casi escupiendo.

-Pueees, es algo obvio.

-No saldrás con ella- me estaba amenazando? Bah, no soporta que sea más guapo.

-Eso es una amenaza?

-No, ella tiene novio.

Crash, plic, plic, plic. Oh mira, mi corazón se ha hecho pedazos...

Mientras abría la boca y me contenía llorar con los ojos abiertos de par en par, Matt se rió y abrió la puerta más.

-Te invito a algo, hasta he escuchado como tu corazón se caía a pedazos- rió más y me empujó haciéndome pasar.

Mientras no me resistía a que me enpujase, me sentó en un sofá de los tres que habían y se fue por una puerta. Me llevé las manos a la cara y enredé mi pelo alborotándolo con una mano.

-Tu pelo no es el causante de esto, déjalo en paz- dijo mientras ponía un vaso de lo que probablemente era Coca-Cola con hielo enfrente de mí sobre la mesa.

Bufé me peiné con las manos y tomé la Coca-cola en las manos dándole un sorbo, en silencio, un silencio incómodo que Matt rompió.

-De verdad no lo sabias?- negué con la cabeza.

-Nunca lo he visto con otro...

-Ya bueno, su novio no es facil de ver... da igual, mejor olvídalo y ya.

-No puedo. Ella es lo que he estado buscando... lucharé por ella, ayúdame, por favor...

MATTHEW

Que lo ayude? Traicionaría a Liria de alguna manera... pero mírale, está desesperado. Podría competir contra Drake? No creo. Ése tío es especial y además de guapo... no me puedo creer que le haya dicho eso... no importa, lo es, hay que reconocerlo. Robert no era feo ni mucho menos, tenía su atractivo pero... no si al final mr haré marica y todo no te jode.

Mientras pensaba me frotaba la sien. Robert me miraba compasivo. Putas miradas tiernas de los huevos que no me resistooo!!!

Bufé.

-No puedes competir, lo veo imposible.

Señor adorable abrió los ojos más de lo normal y se dedicó a mirar al suelo.

Una lágrima cayó al suelo. Está llorando!? Está llorando... tanto le gusta?

-Hey- dije golpeando levemente su hombro-. No te pongas así. Sé que ella es especial, yo tambien he sentido cosas por ella pero bueno, yo tampoco podía ganar contra ese... pero lo he superado. Eh, no llores.

Él no decía nada. Miraba al suelo y lo llenaba de lágrimas, sin embargo, no salía ni un sollozo de él, ni un sonido. Me rasqué la nuca, no lo podía ver así, en serio, me ponía malo. Como mínimo podría llorar decentemente! Lo rodeé con un brazo los hombros y le froté la espalda.

-Oye di algo... como mínimo llora decentemente.

Levantó la cabeza y me miró.

-No estoy llorando.

-Ya, y esa catarata de lágrimas que salen que son?- dije señalando su cara.

-Sentimientos retenidos. Sin embargo no lloro por tristeza o algo, es solo que llevo aguantando mucho y los sentimientos deben salir de alguna forma.

Podría haber pensado que era una gran chorrada pero, no había titubeo en su voz ni ningun cambio. Los sentimientos salían por las lágrimas? Tenía ganas de descojonarme vivo, pero no lo haría con él en ese estado.

-Te traigo pañuelos?

-Por favor...

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Holaaaas!!! Vale vale, me he retrasado con lo de actualizar lo se pero esque tengo que ponerme con el Instituto y eso, sorry!
Bueno espero que os haya gustado!! <3

EL CHICO INVISIBLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora