A Través Del Cristal

12

— Escalofrios —
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Tamara

Caí al suelo, deslizandome lenta y dolorosamente por la pared celeste pastel, que en este momento se sintió más helada que nunca.

No quiero llorar, no puedo llorar, es algo así como una regla personal que ya se que es tonta pero es mi forma de auto-defenderme.

Así que solo moví mi mirada de un lado a otro de la habitación, no es posible enamorarse cuando solo lo vi un par de veces, ¿No? Porque sinceramente no creo en el amor a primera vista y él no iba a ser la excepción, solo falta hacerle creer eso a mi corazón que se siente un poco destrozado.

No iba a llamar a Jess, ella debe sentirse mucho peor que yo, tiene a algo detrás de ella persiguiéndola y yo en vez de conseguir la ayuda que necesita, me beso a Ryan.

Soy un maldito desastre, pero ahora debería ir a ayudar a mi mejor amiga y en otro momento podría deprimirme porque otro chico que me "gusta" no me quiere, definitivamente esto ya es una rutina.

Luego de unos minutos que no me moleste en contar; quizas quince, veinte o una hora, me levanté y fui directo a lo de mi amiga, sin distracciones en el camino.

Golpeé la puerta impaciente, dejando salir con cada golpe un poco de frustración de mi ya pesado cuerpo, pero no esperé que una persona que no conocía con solo una toalla cubriéndolo abriera la puerta.

- Hola. -Me saludó educadamente el chico morocho con cabello negro mojado y ojos azules que me había abierto- ¿Cómo estás preciosa? -Y la educación se fue, mirándome atrevido al ver que yo miraba su cuerpo al descubierto.

- Perdón. -Dije en un estúpido tartamudeo, sintiendo mi rostro arder mientras miraba a otro lado, tratando de armarme de valor de nuevo- Sé que soy preciosa, no hacia falta que lo dijeras. -Traté de volver a la normalidad con algo de burla, pero la voz avergonzada prevalecía en mí, cosa que lo hizo reír.

- Sé que seguramente te lo dijeron muchos, sólo quería recordártelo para hacerte sentir mejor. -Ahora me sonrió reconfortante, ¿Tan obvia soy? Debía dejar de serlo para buscar algunas soluciones con Jessica y no hacerla preocupar mucho, la prioridad es ella.

-¡Thomas! ¡Deja a mi bebé en paz! -Jess apareció corriendo hacía mí para después darme un abrazo que obviamente correspondí cuando el supuesto Thomas me miró sin entender.

- Thomas ella es Tamara, Tam él es Thomas, mi primo -El levantó una ceja sonriendo, para después abrazarme 'Eh ¿Qué?' pensé mientras sentía una voz susurrar en mi oído.

- Vos te vas a enamorar de mí, te lo prometo. -Me sentí temblar al rodear su cuerpo mojado con mis manos tibias y a él hacer lo mismo con el mío, mojandome.

'¿Qué clase de fuckboy es este?' Me pregunté a mi misma.

- No te creas tanto mi amor. -Dije lo suficientemente confiada luego de unos minutos de mucho amor, alejándome de él. Jess nos miró con una sonrisa cómplice- ¿Vamos adentro? -Le sonreí a mi amiga sintiendo la mirada de una tercera persona sobre mí.

- Si querés te ayudo a que tengas calor. - Thomas, el pervertido, se encogió en su lugar al notar la mirada asesina que le regalaba su adorable prima desde mi lado, mientras caminábamos dentro de la casa- ¿Vamos a tu cuarto? -Preguntó intentando ignorar lo ocurrido.

- 'Vamos' me suena a manada primito -Su prima le sacó la lengua con gracia, tomandome de la mano y llevándome a rastras a su habitación. Él nos dirigió una mirada de cachorro abandonado mientras nos íbamos, a lo que le respondí con una sonrisa burlona.

Solté una carcajada ante el abandono de Jess a Thomas, pero al darme la vuelta para seguir correctamente a Jess, alguien me sujeto de la cintura, apretando y tirando de esta con fuerza para que yo no pueda llagar a la hermosa habitación de mi querida mejor amiga.

Diosito dame un descanso.

Unos fuertes escalofríos comenzaron a recorrer cada rincón de mi cuerpo a la par que los pelos de mi brazo se erizaban.

Me quede totalmente petrificada mientras era arrastrada, pero mi mente seguía perfectamente consciente, creando múltiples escenas con múltiples personas o mostruos detrás. Quise ponerme a la defensiva, pero mi cuerpo de igual forma no reaccionó.

- ¿Tan rápido me abandonas? Ni tiempo a conocernos tuvimos. -Relajé mis hombros al escuchar la voz de Thomas, por alguna extraña razón llegué a pensar que podia ser Ryan, y no voy a negar que me decepcione un poco después de ver que no se trataba de este, pero tengo que comenzar a hacerme a la idea de que para Ryan no soy más que una estupida humana.

Y Ryan tampoco es tan estúpido como para mostrarse así en frente de Thomas.

- Déjame pensar. -Puse una mueca de curiosidad a la par que colocaba mi dedo índice sobre mi mejilla, fingiendo pensar- No. -Esperé unos segundos para responder y romper el agarre sobre mi cintura.

Al finalmente terminar de liberarme, aproveche para correr como loca a la habitación de Jess, la cual ya se encontraba apoyada sobre el marco de la puerta, mirando la situación completamente extrañada.

- ¿Qué mierda? Thomas te dije que la dejes en paz, ella es mía -Dijo Jess al tenerme junto a ella, abrazándome al mismo tiempo que le sacaba la lengua a su primo.

Ella y su obsesión de sacar la lengua..

- Ya, ya. No soy de nadie, así que no peleen por mi perras. -Comencé a bromear, alzando las manos en señal de paz luego de romper el abrazo de Jess, a lo que está y su primo me miraron para seguidamente ignorarme.

- No, ¿Sabes mejor qué? Thomas te la regalo. -Dijo la muy bipolar empujandome fuera del cuarto antes de cerrar la puerta en mi cara.

Con amigas como estás para que tener enemigos.

Iba a quejarme pero nuevamente me abrazaron de la cintura- Yo no tengo problema con que seas mi regalo. -Sentí mi cuerpo temblar al sentir su cálida respiración chocar contra mi cuello, recordando que aún seguía técnicamente desnudo.

- ¿Qué? -Murmuré estupefacta, intentando unir cables en mi mente a la par que lo intentaba empujar, mientras me movía en mi lugar bruscamente, solo logrando darme la vuelta, y quedando aún más pegada a él.

Mierda, salgo de los brazos de uno para entrar en los brazos de otro, que para colmo solo habré ma boca para coquetear, ya que obviamente yo no valgo nada para su mente de; 'Me encanta cualquier cosa que se mueva y tenga vida'. Además de que todavía tengo que resolver los misterios de la otra dimensión, junto con las estúpidas criaturas que persiguen a Jess y para eso necesito volver a ver a la criatura que extrañamente logró "Enamorarme" con tan sólo haberlo visto unas cuatro veces contando los sueños, obvio.

'Seh, definitivamente estoy pérdida, escupida y despreciada por la vida' Pensé saliendo del mundo de mis pensamientos, para volver a la desgraciada realidad en la que tengo que lidiar con la garrapata de Thomas, quien todavía tengo pegado a mi pobre e inocente cuerpo. Ayuda.

•♢•

Aaaah, que corto este capítulo, Sorry. ¿cómo están?

Probablemente nos estén odiando por lo cortos que están siendo los capítulos, ya se, pero bueno. Espero que les gusten de igual forma.

Sin mucho más que decir nos vemos en la próxima parte.

Byee bebesitos/bebesitas. ♡