Todo Cambió [Prince Royce] [TC 1]

Capitulo 4: La Idea.

Entré a un salón muy amplio y elegante, con una gran mesa blanca en la que estaban sentadas tres personas, dos de ellas, mujeres, muy elegantes tambien, y que de lejos se notaba que sabían muchísimo de baile... Dios mío, sé que estarán pendientes del mínimo error que cometa... Pero, me tengo que concentrar. No ha pasado nada, este es mi momento, esto es lo que amo, esta soy yo.

(...)

Cerré las puertas del gran salón detrás de mi. La cara de los evaluadores eran inexpresivas, así que ni idea de qué piensan sobre mi presentación. Me concentré lo mejor que pude... ¿Y si no logro calificar?, Por lo menos sé que tengo talento, ¡Maldito Royce! ¡Maldito! ¡Por tu culpa me siento tan insegura! ¡Nunca me había pasado algo así! Aunque... ¿Para qué me engaño? Es más guapo de lo que pensé... Ashh, está buenísimo... ¡Estúpida! ¡Eso soy! ¿Cómo puedo pensar así de un tipo que solo se burló de mi? ¡Se cree gran cosa porque es famoso! Ash! Comprometido...y  yo soy la aventura ¿Verdad? Necesito ir a mi casa y no pensar tanto, o me volveré loca...

Bajé por las escaleras, luego de la hermosa experiencia que tuve en el ascensor la última vez, dudo reunir suficiente valor para volver a subirme a uno. Al llegar a la recepción, salí de la plaza y me fuí caminando hasta casa, para poder pensar.

(...)

Hogar dulce hogar. Es increíble como no he podido olvidar ese beso... ¡Oh mi Dios! ¡Fue tan fuerte lo que sentí! ¡Estúpida! ¡Sácate eso de la mente ya!... Esta maldita guerra interna entre dos yo.

-Hermana, ¿Estás hablando sola? –dijo Mary, mi hermana menor, interrumpiendo mis pensamientos, ¿O estaba hablando? Díos mío...

-¿En serio estaba hablando? OMG ya no controlo ni lo que hago, te juro que no me daba cuenta... -le dije.

-¿Qué te pasa Eimy? Te veo como preocupada... Sabes que puedes confiar en mi... Para eso somos las hermanas.

Vacilé un segundo, ¿Le cuento o no? Es roycenatica, o no me creerá o le dará un infarto. Opto por la primera opción.

-Júrame que me vas a creer y que lo tomarás con calma. -le dije.

-Lo juro. -se limitó a responder, con cierta curiosidad en su voz, mientras se sentaba a mi lado, en mi cama.

-No pienso contar la historia dos veces así que déjame llamar a Cristina para que sepa también. -le dije, mientras me paraba de la cama y buscaba mi teléfono, cuando lo encontré, marqué rápidamente el número de Cristi.

-¿Si? Cristi. ¿Puedes venir? Necesito contarte algo junto con Mary. Ahora. Si. Está bien. Nos vemos aquí. -colgué la llamada.

Mary me estaba mirando, note la ansiedad en sus ojos, pero me limité a ponerme mis audífonos en lo que llegaba Cristina, me los coloqué y puse el teléfono en aleatorio, y se puso a todo volumen  "Solo por un beso", de Aventura. Perfecto. -pensé. El universo está en mi contra.

Cuando sonaban las últimas notas de esa hermosa canción, entró Cristina a mi habitación, vivía no muy lejos de mi casa, y pues, por un chisme ella hasta fabrica un avión y viene volando.

Les conté todo mi día, de Geoffrey, de lo que pasó, de principio a fin, incluyendo a Emeraude, el ascensor, sin que se me pasara de alto ningún detalle. Al concluir, los rostros de Cristina y Mariela valían oro, Cristina se quedó muda por completo.

-¡NO PUEDE SER! ¡Las cosas siempre le pasan a quienes no deben! ¿Por qué no me pasó a mi, que sí me gusta Royce? ¡Mundo cruel! –dijo Mary, con una voz de niña malcriada.

-Como amiga tuya que soy, te aconsejo que te alejes de él, para que no sufras... –dijo Cristina, en un tono muy serio.

-Mary, si te lo conté no fue para que me envidiaras... no sabes lo mal que me siento... No soportaría que él y su novia rompieran su compromiso por mi culpa... Aunque... ¡Aunque ese beso significó mucho para mi!

-¡Saaaaaaaa! ¡Las roycenaticas te lo agradeceríamos! ¡No soportamos a Emeraude! Y, ¿Te imaginas yo siendo cuñada de Royce? Ay, me da algo, ¡Me daaaaaa! -dijo Mary sofocándose.

-¡MARYYY! ¡Hablo en serio! ¡Y no vas a ser cuñada de él porque no seremos nada!

Y así pasamos el resto de la tarde discutiendo sobre el tema, mientras Mary me acusaba de sentir algo fuerte por Geoffrey, pero lo peor, era que ella no se equivocaba.

Emeraude´s POV

Esa perra. No voy a permitir que se meta en mis planes. Yo me caso con Geoffrey porque me caso. Tengo que contarle lo que pasó a Scarlet, ella es la única que me entiende.

Me subí en mi coche y fuí directo a su casa, entré sin llamar, como de costumbre. Pero me encontre con que estaba con la imbécil de Camil, es una de nuestras amigas. pero siempre le ve el lado malo a las cosas, y lo incorrecto, ashh, exasperante. 

Me senté en uno de los sofás.

-Scarlet, Camil, ¿Cómo están? Ehh... Realmente no me interesa. Tengo que contarles algo.

Les conté todo lo que vi y lo que pasó hoy con Geoffrey.

-Ay amigas, pero tengo que hacer lo que sea con tal de mantener mi compromiso con Geoffrey. Lo amo mucho, y ya saben, ¡No me importa que sus fans no me acepten! Total, él me ama a mi, ¡Qué sufran! –les dije. Malditas royceputas.

-Emeraude, no debes hablar así, eso no está bien –dijo la maldita aguafiestas de Camil.

-¿Sabes..? Hay solo una forma de amarrar a un hombre.–dijo Scarlet, pensativa y con algo de malicia.

-Ajá, ¿Y cuál es? Yo hago lo que sea, LO QUE SEA –dije bastante interesada.

-Hazle creer que estas embarazada…