Todo Cambió [Prince Royce] [TC 1]

Capitulo 17: Confesiones.

Desperté. Sobresaltada. ¿Dónde estaba? No lo sé. Solo sé que estaba en los brazos de Javier, pero, ¿Saben qué? Sin sacarme a Geoffrey de la cabeza.

Es increíble como con todo lo que ha pasado sigo sin sacármelo de la cabeza... Dentro de mi está la más viva prueba de nuestro amor... O por lo menos del que yo sentía... Bueno... Siento por él... El problema es que solo jugó conmigo... con mis sentimientos... ¿Y si se puso de acuerdo con Emeraude? ¿Y si nunca me quiso en realidad? ¡No lo voy a buscar! ¡No se lo merece! Yo me merezco a alguien que me quiera realmente… no que juegue de esa manera con mis sentimientos...

A penas pude percatarme de las lágrimas que corrían por mis mejillas. Javier se movió. Lo había despertado.

Me miró con ojos realmente tiernos y llenos de preocupación.

-Eimy... ¿Qué te pasa? ¿Por qué lloras? -me preguntó mientras con su mano derecha secaba mis lágrimas.

-No... No es nada... Es solo que... Es que... Jugó con mis sentimientos... ¡No es justooo! -dije sin poder contener el llanto.

Se acomodó para mirarme directamente a los ojos.

-No te pongas así hermosa... tú... vales mucho. Mereces a alguien que te quiera y te valore por quien eres en verdad... sea quien sea ese imbécil que te rompió el corazón... No sabe de lo que se perdió. No merece ni una sola de tus lágrimas... por si te interesa saber... Yo estaré aquí para secar todas las lágrimas que sean necesarias… Te lo prometo. –dijo dándome una cálida sonrisa.

-Gracias... Gracias... de verdad... me haces sentir mucho mejor –dije tratando de sonreir.

-Creo que debemos irnos para donde Jack... así nos vamos a donde tu hermana. Creo que es hora.

Jack. Mi hermana. Libertad. Lo había olvidado.

-Tienes razón… Vamos. 

¿Qué me quiso decir Javier con todo eso? ¿Será que le gusto? No puede ser... Yo, aunque me cueste aceptarlo, aún amo a Geoffrey, pero nadie sabe... tengo que olvidarlo de todas formas... y quien mejor que él para ayudarme que se ve que me quiere de verdad.

Xavi me ayudó a pararme. Salimos juntos a la calle. Jack estaba sentado, jugando dominó y comiéndose un Sandwich.

Sonrió inmediatamente nos vió.

-Qué bueno que ya están despiertos... vayan a comer algo e inmediatamente nos vamos... estamos a 22 horas sin pararnos, así que serían como 23... Mientras más rápido salgamos, mejor. –dijo aún con la boca llena.

No había notado lo hambrienta que estaba hasta que mencionó el verbo "comer". Al instante me rugió el estómago más que un león.

Fuimos y nos comimos un par de sándwiches... No pude evitar fijarme en la mirada que me hacía Xavi... Era como si estuviese tan preocupado por mi... Es algo raro… Lástima que no pueda corresponderle... es tan buena persona.

-Ven... vámonos... –dijo.

-Está bien. –le contesté.

Nos montamos en el camión... en la parte trasera, para así poder seguir descansando. Jack nos había acomodado unos trapos para que pudiésemos dormir ahí... Nuevamente un espacio para una persona... Así que nos tocó volver a recostarnos en la misma forma que anoche... No sé por que... Pero me siento tan protegida en los brazos de Javier. Cuando me mira con esos ojos color cafés... de esa manera tan... amorosa... es... ¡Ayy no sé! El mundo es tan cruel... Se merece a alguien que si pueda corresponderle... Pero Eimy, ¿Por qué piensas tanto en Javier? ¡Reacciona!... Cierto… Es raro... Bastante raro... Me siento incómoda... Me quiero sentar.

-¿Qué te pasa? –me preguntó.

-Nada... Solo quería cambiar de posición... –le contesté.

-Mmm.. ¿Puedes acercarte? Quiero decirte un secreto. –me confesó.

Me le acerqué. Cuando estoy a un par de centímetros de su cara... Me besa.

Javier me estaba besando.

Yo le estaba siguiendo el beso.

¿Por qué? Ni la menor idea. Nos separamos lentamente…

Me tomó unos segundos darme cuenta de lo que había pasado.

-¡¿Por qué hiciste eso?! –le pregunté sobresaltada.

-Lo siento... no pude resistirme... me vuelves loco Eimy… Te quiero demasiado... –me contestó.ç

¿Esto era qué? ¿Una declaración de amor?

-Javier... No te hagas ilusiones conmigo, voy a ser madre... madre de un hijo que no crecerá junto a  su padre... tienes que entenderlo... No puedo… Además, aún amo al papa de mi hijo. Aunque suene estúpido. Sí, aún lo amo, aunque jamás vuelva a estar con él. Me dió lo más lindo que podré tener en mi vida jamás, que me recordara a él todos los días… Un hijo. ¡Entiende eso! Entiéndelo. –le explique.

Me miraba dolido.

-Pero mi amor sí es real, no como el de ese canalla que no hizo más que burlarse de ti... ¡Yo no! Soy diferente. Te pido que me dejes demostrártelo... Dame una única oportunidad... Por favor... Permíteme... Permíteme cuidarte... A ti y a tu hijo... Por favor…

¿A mi y a mi hijo...? ¿Eso fue lo que dijo? ¿Eso fue lo que escuché? Eimy no seas egoísta... ningún hombre así de la nada te va a pedir hacerse cargo de tu hijo... Jamás… aprovecha esta oportunidad... Nadie sabe si puedes aprender a quererlo... Nadie sabe... la vida da muchas vueltas..

-¿Lo dices en serio? ¿Lo dices sin que te importe quien es el padre de mi hijo? ¿Lo dices sabiendo que no te amo a ti, en cambio sigo pensando en él? ¿Me hablas en serio? –le dije.

Ahora que lo pienso eso que dije fue algo fuerte. No pareció haberlo notado.

-Pues claro que sí. Quiero demostrarte que mi amor es puro y sincero… ¿Sabes? Cuando estábamos dentro del sanatorio no paraba de mirarte... eres... eres como una escultura a la que no me canso de observar...Todos esos meses que duraste allí solo te observaba... te observaba detenidamente... con miedo al rechazo si me acercaba... hasta que un día reuní la valentía suficiente para acercarme a ti y hablarte. Créeme, no fue fácil, pero de verdad te amo Eimy... quiero que lo entiendas.

Mi expresión debía ser indescifrable. Duré unos minutos en silencio. Pensando.

-Yo... está bien... Acepto estar contigo... Solo te pido paciencia... Por favor... sé que con el tiempo realmente podré aprender a quererte... Pero... pero no me presiones, ¿sí? –le dije.

Sus ojos se iluminaron súbitamente.

-Todo sea como tú quieras mi amor –respondió Javier.

Y nos quedamos nuevamente dormidos... Yo mas confundida de lo que antes estaba. Este era el primer paso para olvidar de forma definitiva a Geoffrey. Lo haré cueste lo que me cueste... Nunca le perdonaré todo lo que me hizo. Sé que al lado de Javier seré feliz... Lo sé.