Secret Love |Justin Bieber|

Capitulo 16

-¡¡Adentro!! -Me ordenó el guardia.

-¡Pero yo no hice nada! -Dije un poco alterada.

-Estuviste en una fiesta ilegal. -Dijo el gordo con su gran enojo.

-¿¡Desde cuando la fiesta es ilegal!? ¡Los culpables son la que la organizaron! -Grité pero este me empujo para que entrara.

-¡¡Déjenos salir!! -Grité, pero Caitlin me puso la mano encima del hombro.

-Verás que en unas horas todo se calmará y nos dejarán ir. -Dijo algo tranquila.

-Está bien... ¿Ahora que haremos?

-Solo queda esperar.

 Comenzamos a caminar por el pequeño lugar que teníamos. Esperamos unas cinco horas, miré la cara de Caitlin de preocupación, estábamos por entrar en pánico. ¡Genial! Eran vacaciones y en la cárcel, ¿Cómo soy yo la que se mete en este lío? Ya estaba, entré en pánico y comencé a gritar que nos dejen salir. El guardia enojado nos gritó que nos calláramos, y eso hicimos.

-Rosie, tienes que llamar a alguien.

-¡Llama a Chris! -Dije.

-Imposible, está fuera de la cuidad.

-¿A quién entonces?

-¡A Justin! -Dijo.

-No lo haré, ¿Recuerdas que estoy enojada con él?

-¿No lo haces por enojo? ¡Rosie estaremos acá por un largo tiempo! -Dijo entrando en pánico.

-¡No lo llamaré! -Dije deletrearlo.

 Me recosté en la cama y comencé a pensar en muchas cosas. Luego de un tiempo, escuché al guardia hablar con alguien. No tenía idea de quién era, pero su voz era muy familiar.

-Rosie, llama a Justin o a tu papá. -Dijo Caitlin.- No hay opción.

-Justin no hará nada, y papá me matará. -Me levanté y me apoyé en las rejas.- Papá no creo que se entere que estemos acá, si lo sabe estaré muerta. -Observé la cara de Caitlin de "Miedo" o de impresión, miré hacia atrás y allí estaba papá.

-¿Me podes explicar que carajo haces acá? -Dijo enojado.

  No pude decir nada, estaba en pánico. Mi cara era blanca, y Caitlin sabía lo que en verdad se estaba por venir. El guardia nos sacó del lugar, papá firmó unos papeles y nos fuimos al auto. En él camino él no dijo nada, tal vez sería porque está Caitlin conmigo. La dejamos en la casa y dejamos el auto en la casa del frente, ya que era nuestra casa. Bajamos del auto y entramos a la casa, mamá estaba durmiendo, él me miró serio y enojado a la vez.

-¿Ahora me explicarás que hacías allá?

-No lo se, yo solo estaba pasando por hay con Caitlin. Nos acercamos un poco a ver que había y los policías me agarraron y me hicieron entrar a la fuerza. -Mentí

-¿No me mientes?

-No, sabes que no te mentiría. 

-Está bien... Perdón si estuve algo enojado... Ahora vete a bañar y a dormir. -Dijo.

-¿Se lo dirás a mamá?

-No, quedará entre nosotros. -Dijo y se fue.

 Odio mentirle a papá, no me gusta, pero si le diría la verdad no me dejaría ir al viaje. Y yo quiero el viaje para alejarme de Bieber. A veces alejarme de las cosas me hace bien, pero todo siempre me persigue. Mañana es el último día de escuela, y solo espero que todo salga bien.

 Al día siguiente desperté por la alarma, me puse el uniforme del colegio, me lavé los dientes, me peiné el cabello, lo dejé suelto, y bajé.

 El desayuno ya estaba listo, comí los ricos cereales con leche y salí al colegio. Hoy iría caminando, el día no estaba muy lindo, las nubes estaban grises, me gustan los días así, no se porque, pero me gustan. 

 Al llegar al colegio, caminé a mi casillero, saqué algunos libros y los puse en mi mochila, en unos minutos me tocaría ir a música y luego a geografía, espero que no sea nada aburridas estas clases, porque en verdad me pondría muy inquieta.

 Me senté junto a Caitlin, por mi mala suerte, Megan estaba en las mismas clases que yo. ¿Molesta? ¡Mucho! Está haciéndose la linda, la rica, no se, no me gusta, hay algo en ella que no me gusta. Está me miró de reojo, bufó y me hecho una mala cara. Levanté mi dedo haciéndole Fuck You, y esta me sacó la mirada. 

 Las horas pasaron y ya era hora de irnos a casa, pero antes como siempre hacia con Caitlin, Madison y Taylor, era ir a una pizzería a celebrar. Al llegar miré que estaba Megan con Justin, ¿Desde cuando comen en el mismo lugar que yo? Bufé y cuando m estaba por ir Cailtin me tomó de la mano y me dijo que los ignore. Al entrar supe que Justin me estaba mirando, caminé hacia la silla y me senté. Todos pedimos pizza con mutsarella solo, ya que amo lo simple, junto una Coca Cola. 

 La verdad, fu muy divertido, hicimos los chistes de siempre, nos sacamos fotos entre todos, y fue muy divertido, espero volver a pasar este rato con ellos. Taylor estas vacaciones irá a Francia a la casa de su hermano por dos meses, Madison hará una carrera de modelo, y Caitlin, bueno ella irá al campo de su abuela por unas semanas, y luego nos iremos de vacaciones que organizó papá. Yo tenía pensado aceptar el concurso y bueno, tendría algo que hacer en las vacaciones. 

 Los chicos se fueron al baño, ya que se estaban haciendo y yo me quedé en la mesa sola mientras estaba en Twitter. Cuando de la nada siento que alguien me tira un vaso de 7 Up en el cabello, me di la vuelta enojada y allí estaba la idiota de Megan. Ya enojada la tomé del cuello algo amenazador, y le dije que no me vuelve a molestar o lo lamentará, esta me dijo...

-Una dama no le tiene miedo a una perra. -Dijo y me quitó la mano de su cuello.- Perro que ladra no muerde.

-¡Ah, no! ¡Yo te mato! -Dije y me lancé hacia ella.

 Justin comenzó a separarnos, no pude hacer nada, ya que me estaba sosteniendo los brazos para que no le pegue. ¿Qué clase de hombre sale con una "mujer" como ella?. Ella me miró y se fue, me di la vuelta y comencé a empujar a Justin, estaba muy enojada.

-Y vos, Justin... -Lo empujé.- Drew... -Lo empujé.- Mallette...-Lo volví a empujar.- Apareces y me separas de ella.. -Lo empujé.- ¿¡Dónde estabas cuando te necesitaba!? -Lo empujé, comencé a llorar, y él solo me abrazó. Tiene esa cosa espacial, que sin decir nada y con un abrazo me hace sentir mejor.

-Lo lamento... Te amo. -Dijo y me miró.

-¿Por qué me haces esto? -Dije mientras lloraba en su hombro.

-Lo lamento... -Me susurró.

 Él me abrazó, ambos caminamos hacia el parque. Justin llevaba mi mochila, ya que le pedí si la podría llevar. Pasamos por la fuente, él sacó una moneda de su bolsillo, la miró, le dio un beso y me miró. Él solo dijo "Dale un beso y pide un deseo" y lo hice. Ambos nos tomamos de la mano y arrojamos la moneda a la fuente, nos miramos y sonreímos. Parece que todo volvió a ser como antes, y eso me gustaba.