Capitulo 1

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Tras unas mini vacaciones cortesía de los profesores en huelga tuve que volver a la escuela. Mi estado de ánimo no era el mejor pero eso era de esperar, después de una semana de despertar pasada la una del mediodía tener que retomar la rutina era algo estresante. 

Me monté en el Fiat modelo 2006 que mi padre me había regalado al cumplir los 16 años, prendí la radio y emprendí el viaje hacia el instituto EastHigh en la ciudad de New York. 

Estacioné en el parking de la Biblioteca el cual casi siempre estaba vacío ya que mis queridos compañeros preferían hacer una entrada triunfal en sus lindos descapotables. Coloqué el morral colgando de mi hombro derecho y me dirigí a la entrada. 

-¡Spark! –gritó mi mejor amigo Chaz desde el otro extremo del pasillo. Un par de ojos curiosos se posaron en mí provocando que me sonrojara. No era la chica más popular del instituto pero tampoco era invisible. Tenía muchos amigos y pretendientes pero no era de algo de lo que estaba orgullosa.

-¡Somers! –reí y le di un leve golpe en su brazo izquierdo.

-No a la agresividad –dijo levantando ambas manos en signo de paz. Me fue imposible aguantar la risa y solté una leve pero audible carcajada-. Te extrañe, no es lo mismo ir a fiestas sin mi mejor amiga.

-Vamos Chaz, ve al grano. ¿Qué quieres?

Rió y agregó: -Me conoces bien –sonreí-. Necesito que me ayudes con Física, despidieron a la profesora Bolcato y la remplazante me da miedo. 

-¿Chaz Somers tiene miedo de una profesora? –pregunté sarcástica.

-Lo sé, yo tampoco me la creo –dijo entre risas-. ¿Te enteraste? –preguntó mientras nos sentábamos en nuestros asientos en el salón de Historia.

-No –reí- eres peor que las mujeres Somers.

-Jaja muy graciosa –ironizó.

-Ya cuéntame –reí.

-La profesora Santucci tuvo un accidente y su remplazante es un recién graduado. Las muchachas dicen que es sexy, para mí es un patán.

-Eres increíble Chaz –reí.

El sonido del espeluznante timbre hizo eco en mi mente seguido de los gritos de mis compañeros anunciando la llegada del nuevo profesor. 

-Buen día alumnos –dijo el nuevo profesor. Su voz, su voz era realmente masculina pero tenía un tono de dulzura en ella. Elevé mi mirada y me encontré con un par de hermosos ojos color miel observándome detenidamente. Sonreí torpemente y él hizo lo mismo conmigo. 

-¿Tú también? –exclamó Chaz quitándome por completo de mis pensamientos.

-¿Qué? –dije avergonzada.

-También te gusta el profesor mírenme-soy-sexy-y-tengo-cabello-rubio –dijo entre dientes.

-Estás loco –reí intentando ocultar mi nerviosismo. 

En verdad, ese hombre era realmente atractivo, sus ojos de color miel, sus labios carnosos y rojos, su espalda ancha y musculosa, su piel blanca con un ligero bronceado adornada de cientos de lunares esparcidos estratégicamente, su rostro angelical y masculino y su voz tan dulce y grave.

-¿Señorita Spark, se encuentra bien? –dijo el profesor parado frente a mí.

¿En qué momento llegó? No lo sabía pero era cierto que me había agarrado totalmente desprevenida.

-Mmm… si –dije avergonzada escondiendo mi rostro bajo mi cabello. 

-Muy bien, sigamos con la clase –dijo dándome la espalda y dirigiéndose a su escritorio.

¡Oh Por Dios! Su trasero. Su trasero era perfecto y bien formado, unas extrañas ganas de tocarlo inundaron todo mi ser. No entendía que me sucedía pero quería follar con el profesor.

Deseo ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora