Capitulo 9

993 37 1
                                    

Me miró sorprendido, buscando una respuesta que no estaba dispuesta a darle.

-¿Y tu padre? –preguntó Jeremy dirigiéndose al living.

-En la cocina –le contesté cerrando la puerta.

-Necesitamos hablar –dijo Justin en un susurro.

-Más tarde –dije caminando hacia el living.

-Jeremy, ¿cómo estas? –preguntó mi padre con una sonrisa entrando a la habitación.

-Muy bien –dijo sonriendo y ambos se dieron un apretón de mano.

-La comida ya esta lista, los invito a pasar al comedor –dijo mi padre orgulloso de su trabajo.

Todos nos dirigimos al comedor, mi padre se sentó en la punta de la mesa y Jeremy en la otra punta, en cuanto a Justin y a mí nos sentamos enfrentados.

-Tú debes ser Justin, ¿no es así?

-Sí, señor –asintió Justin, se veía nervioso.

-Llámame Jonh –dijo mi padre sirviendo la comida.

La cena paso muy lenta, no había nada más aburrido que escuchar a mi padre y al de mi profesor de historia discutiendo sobre negocios.

-¿Es cierto que tiene una gran biblioteca? –preguntó Justin cambiando de tema.

-Sí, es cierto. Al parecer tu padre tuvo tiempo para contarte sobre ello.

-Ya sabes, Jonh. Los libros llaman mi atención.

-¿Hija, serías tan amable de mostrarle a Justin mi oficina?

-Claro –sonreí poniéndome en pie-. Sígueme Justin.

Justin se puso de pie y ambos nos dirigimos hacia el segundo piso. Estaba completamente segura de que él estaba enojado conmigo y la verdad tenía derecho.

-Bueno, esta es la oficina de mi padre –dije abriendo la puerta.

-¿Por qué? –preguntó entrando a la oficina. Cerró la puerta con traba e inmediatamente me arrepentí de haberlo llevado allí.

-Necesitaba un lugar para trabajar en casa, supongo –me encogí de hombros.

-No me refiero a eso, ¿por qué no me contaste sobre esta cena?

-Creí que sabías –contesté evitando su mirada.

-_____ (tn), no soy tonto y lo sabes. Dime la verdad –caminó hacia mí y una extraña sensación llegó a mi cuerpo.

-Te estoy diciendo la verdad –retrocedí un paso, chocándome con el escritorio.

Lo miré acercarse a mí, sus ojos tenían un extraño brillo que jamás había visto. Vestía un pantalón color caqui que se ajustaba perfectamente a su miembro, Dios santo se veía tan sexy.

-----

Deseo ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora