un won por beso !୭̥⸙͎۪۫.¡ jeongguk

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Me sorprende demasiado cómo pasa el tiempo con solo un parpadeo. Una semana y dos días exactamente han pasado desde que besé a Jimin en la playa, desde que empezamos a salir formalmente como una pareja, muchos se sorprendieron al enterarse de nuestra relación e incluso las amigas más cercanas de él nos crearon un shipp –Jitalia– que extrañamente se hizo viral en todo el instituto. Dónde sea que pisara, todos me conocían como la chica de Park Jimin, honestamente no me desagradaba la idea pero tener siempre la atención de todos me hacia sentir vulnerable.

Una semana y dos días exactamente en donde no sé nada sobre la vida de quién solía ser ni mejor amigo. Las miradas y los espacios compartidos se volvieron polvo durante ese tiempo, aunque admito siempre mirarlo en clases, sonriendo y compartiendo con las demás personas del salón y duele saber que no puedo hacer lo mismo. Misuk terminó transfiriéndose al instituto, para último año, compartiendo salón con Jimin y de alguna forma su presencia se volvió un tanto conocida entre las personas del instituto. A simple vista, no parecía ser una mala persona y quizás por esa razón terminé sentándome al frente de ella a la hora del almuerzo, su mirada se posó en mí acompañada de una pequeña sonrisa.

—Hola, Italia — Fue lo primero que dijo. Sonreí amablemente, un tanto dudosa de hacerle una pregunta pero aun así lo hice.

—¿Puedo almorzar aquí contigo?— ella pareció aceptar gustosamente. Así que coloqué el envase lleno de comida –preparada por mamá – sobre la mesa.

De un momento a otro, ambos estábamos hablando contentas de cualquier cosa. Quizás es un principio me pareció una persona odiosa pero luego de sentarme aquí y conversar un poco más con ella me di cuenta de lo amable que es y probablemente por eso se volvió conocida rápidamente, me llenó el corazón saber que Jungkook decidió mantener su amistad con ella, a pesar de no estar a mi lado, estaba al lado de una chica agradable. Y como si de una invocación se tratara, el antes mencionado a pareció detrás de la chica, primero la saludo con un beso en la mejilla y se sentó a su lado, pensé que quizás también me saludaría pero solo me miró por unos segundos y dedicó su atención a Misuk, quién tampoco dijo nada al respecto de la mala educación del castaño.

De pronto, el ratón comió mi lengua, porque mientras ellos hablaban animadamente, yo sólo me limité a mirarlos de vez en cuando comiendo de mi comida. No necesitabas ser inteligente para saber lo incomoda que me sentía en ese momento y probablemente por eso Jimin decidió sentarse a mi lado. Besó mi mejilla para luego saludar a los chicos delante de nosotros. Cuando las clases terminaron, el clima decidió tornarse gris y fuertes truenos se empezaron a escuchar. Lamenté no haberle hecho caso a mi madre en la mañana y tomar el paraguas.

—Puedes ir bajo mi sombrilla— Le sonreí a Jimin en cuanto empezó a mi caminar a mi lado. Pasó su brazo izquierdo por mis hombros continuando el camino a nuestras casas.

Las gotas de lluvia no tardaron en caer después de eso. Gotas grandes caían y caían desde el cielo gris, por lo que ambos decidimos quedarnos un tiempo bajo el techo de un pequeño local de verduras, Jimin compró para ambos dos manzanas en espera de que la lluvia cesara un poco y durante ese tiempo, lo abracé por el frío. Pude sentir como besó mi cabeza, provocando una sonrisa en mis labios. Sin dudas esto es lo que siempre quise con mi vecino y ahora que lo estoy cumpliendo ¿Por qué no me siento feliz del todo? ¿Por qué siento que me falta algo? Miré tristemente las gotas caer e impactar contra el suelo y con eso, la imagen de mi antiguo mejor amigo se reflejó en la tienda del otro lado de la calle, mirándonos con tristeza. Ninguno de los dos nos dejamos de ver, mantuvimos la mirada incluso cuando las personas y los carros iban y venían.

A lo mejor, él también estaba deseando ser abrazado por mis brazos, así como yo estaba deseando ser abrazada por los suyos pero sin embargo, fue él quién me pidió distancia, fue él quién dijo que ya no me necesitaba. Y por más que ambos desearamos lo que sea, no se podía cumplir porque ya estaba roto el laso que nos unía.

“Si nuestras tumbas fueran regadas por la lluvia, ¿Podrían la rosas florecer?”

La lluvia no parecía querer para, y aún nuestras miradas estaban conectadas. Sentí cómo Jimin empezó a buscar mis labios, siendo así la primera en cortar la conexión para corresponder el beso de mi ahora, novio y vecino. Escuchando como repentinamente la lluvia dejó de caer y rápidamente corrimos rumbo a nuestras casa. No obstante, la mirada de Jungkook quedó impresa en mi mente, llena de nostalgia y deseo.

—¿Te encuentras bien? —Asentí —Bien, te dejo aquí. Iré con unos amigo, te llamo cuando regrese —Fruncí mi ceño esquivando su beso.

—¿A dónde irás? Aun no deja de llover, te vas a enfermar —Proteste.

—No lo haré, lo prometo —Y sin más se fue.

No sé porqué no me sentí segura, pero aún así entré a casa, con la esperanza de tomar un baño. Necesito olvidar la manera en como los ojos de Jungkook me miraban.

©huntresscutie

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¿Tengo lectores hombres? De repente me entró curiosidad, si hay por favor diganme, sin pena.

¿Jitalia o Jutali?

Soy mala para crear shipps, sorry.

Dedicado a KimSeo-Yeon 💖 Gracias por tu cariño.