《Capítulo 37》

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Debemos decirles la verdad.

Lucas estaciona su auto al frente de Lemon, todo está como lo recuerdo. Estudiantes afuera hablando, algunos cogen el cuaderno de otros para copiarse de la tarea, estudiantes en sus celulares.

— ¿Crees que nos recuerden? — pregunta Lucas quitándose el cinturón.

— Te recordarán a ti, yo era invisible. — respondo quitándome el cinturón de seguridad.

— Te estás volviendo experta en mentir, no eras invisible. Fuiste la primera chica en retarnos.

Soy leyenda.

— Creo que algunos ya reconocieron tu auto. — digo señalando con la cabeza los estudiantes que se quedan viendo el auto donde estamos.

— Bueno, salgamos. — dice sonriendo.

Abro la puerta del auto al mismo tiempo que Lucas,  suelto un suspiro ya que Lemon no me trae muchos momentos lindos que digamos. Veo la mesa en el jardín dónde solía sentarme con Ariana, Ian y Joshua. Siempre a la hora de comer nos sentábamos ahí para conversar y compartir nuestra comida.

Camino hasta llegar a Lucas quien coge mi mano, yo no soy de muchas demostraciones en público pero me gusta que haga eso.

— Tengo náuseas. — digo tocando mi barriga ya que siento que todo aquí dentro da vueltas.

— Comiste mucho, es normal. — dice pasando un mechón de mi cabello detrás de mi oído.

Tomo un bocanado de aire y caminamos hasta entrar.

Me siento una de esas chicas malas y buenas de Wattpad, la mayoría suelen ser rubias. No amigos, yo soy castaña.

Las miradas se posan en nosotros pero no les presto atención aunque es incómodo. Lucas si parece disfrutarlo, pone una sonrisa en su rostro y recuerdo cuándo él pasaba por los pasillos con su chaqueta del equipo de fútbol y Mia en uno de sus brazos.

Que irónico es la vida.

Ahora Lucas es mi novio y me siento tan cliché por pasar así en los pasillos.

— Esto es ridículo. — digo caminando más rápido.

— ¿Qué te pasa? — pregunta Lucas frunciendo el ceño pero luego se calma.

¿Qué me pasa?

Me parece bien que él disfrute la atención de todos aquí como siempre a sido, pero yo no. Odio que solo me presten atención por ser la chica que toma su mano. Va en contra a mis normas de feminista.

Bueno, eso último fue broma pero en serio odio que solo me miren por ser la novia de Lucas. Puedo hacer que me miren sin Lucas y eso lo sé muy bien.

— Lucas. — se oye una voz femenina por detrás de mi y me giro a ver a la persona detrás de esa voz.

¡Mátenme ahora!

Lisa Thompson.

Ella estaba en penúltimo año y ahora supongo que está en último año. Es una de la chicas con las que Lucas tenía cosa de una noche.
Tiene el cabello negro por los lados, los ojos negros, cejas pobladas al igual que las pestañas y labios delgados pero rosados. Lleva puesto una falda negra hasta los muslos, una blusa blanca que deja ver algo de sus pechos y zapatos de tacón altos haciéndose ver más alta.

— Mikela, ¿verdad? — pregunta ella por fin notando mi presencia.

— Al parecer no te falla la memoria. — digo rodando los ojos.

Enamorándome de alguien más (Olvidarte para siempre)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora