Una Dama Como Cenicienta

Capítulo XVII

Naomi estaba emocionada por el evento que se aproximaba, quienes asistieron el año pasado solían decir que la música era extravagante, nada antes escuchado en el país y los aperitivos eran manjares que procedían de la India.

-De verdad ¿Es así como lo describen?
-Por supuestos Lady Naomi, nosotras fuimos el año pasado y hemos esperado este baile desde principios de año.
-Y ¿Quiénes son los nobles que la ofrecen?
-Un noble que ha vivido en Estados Unidos los últimos años, dicen que ha viajado por todo el mundo y trae nuevas costumbres y cosas extravagantes que presume en sus bailes.
-Si, el año pasado trajo unas frutas que tenían una forma demasiado extraña, pero eran deliciosas.
-Eso suena muy interesante respetables damas.
-Claro que lo es señorita Anlwick, es el mejor baila al que podrá asistir.
-Si puede que ahí por fin consiga un esposo, no querrá quedarse sola.
-Esta bien, debo irme. Hasta luego, fue un gusto conversar con ustedes (Naomi se retiro de inmediato, no toleraba que le hablaran de matrimonio y que le preguntaran en que momento se casaría).

***

Lady Danielle disfrutaba de sus pequeños y no quería separarse de ellos ni por poco tiempo pero debía acompañar a su esposo a un baile, el cual era muy importante.

-Por favor cuida bien de ellos Ariana.
-Claro hermana, estaré siempre pendiente de Adam y Emily.
-Muchas gracias hermana.

Ariana decidió cenar en la habitación de sus sobrinos para no descuidarlos.
-Necesita otra cosa señorita (dijo Jessia).
-No, gracias pero me gustaría que te quedaras a hacerme compañía.
-Claro señorita.
-¿Desde cuando vives aquí Jessia?
-Toda mi vida, mi abuela fue cocinera de esta casa desde que tenía 25 años y aquí crío a sus hijos y me crío a mi.
-Y nunca ¿Has salido de esta casa?
-No señorita, solo el ama de llaves o la cocinera principal pueden hacerlo.
-Esta bien.

Danielle disfruto del baile, tenia meses que no asistía a uno por su estado.

-Danielle me alegro de verte esta noche (dijo Lady Sophia).
-También es un gusto verte Sophia.
-Y cuéntame, ¿Cómo están tus pequeños?
-Bien, son unos niños muy tranquilos.
-Felicidades por el nacimiento de tus hijos.
-Gracias Sophia.

Al llegar a casa, Lady Danielle subió de inmediato a la habitación de sus hijos y se encontró a su hermana con una de sus doncellas conversando.
-Buenas noches.
-Buenas noches hermana.
-Buenas noches Lady Bradford, disculpe mi atrevimiento y quedarme platicando con la señorita Ariana en la habitación de sus hijos.
-No te preocupes Jessia, pero no debes descuidar tus deberes.
-Si Lady Bradford, lo siento.