Michelle tuvo que aceptar que su hermana se quedara en su casa, no le agradaba estar cerca de ella y no entendía porque su madre la dejaría a su cuidado.
-Bueno Ariana, está será tu habitación el tiempo que estés aquí. (Dijo Michelle señalando un pequeño cuarto sin luz que se encontraba al final de la cocina).
Tendrás que ayudar en las mañanas a la limpieza y la preparación de la comida, también ayudaras en la pequeña huerta, y por las tardes se te dará un poco de verduras y agua, ¿Has entendido bien?.
-Si hermana.
-¡Ah! Y otra cosa, no quiero que me digas hermana o me llames por mi nombre, te dirigirás a mi por mi apellido y posición social.
-Si Lady Brown.
-Esta bien, ahora vete a la cocina a ayudar en algo.En cuanto Michelle se fue, Ariana entro a la cocina y le pregunto a la cocinera en que podía ayudar.
-Pero ¿Quién eres tú? (Dijo la cocinera).
-Me llamo Ariana y la Señora Brown me ha traído para ayudar.
-La Señora no me dijo nada, pero esta bien, puedes ayudar lavando las frutas y verduras.Ariana se paso toda la tarde ayudando en la cocina y en la huerta como le había indicado su hermana.
Y cuando creyó prudente se retiro al pequeño cuarto en donde se quedaría algún tiempo.Pasada una semana conoció bien a todos los que trabajaban en la casa de su hermana, no eran muchas personas, la cocinera de nombre Olivia era con la que mejor se llevaba y de la que se había hecho amiga.
-Olivia me agrado que me enseñaras a cocinar.
-Si, fue una buena idea, además tienes buen sazón.
-Gracias.
-Si, pero ahora ve a terminar con tus deberes que la Señora Brown se molestara de nuevo contigo y te castigará.
-¡Oh! Si, ya voy (dijo Ariana, saliendo apurada de la cocina).Ariana siempre estaba apurada con todos los deberes, su hermana Michelle solía dejarle las cosas más pesadas a ella sola, como limpiar todos los ventanales o lavar toda la ropa.
-¡Ariana! Otra vez estas de soñadora, más vale que termines rápido o te quedarás sin comer de nuevo.
-Si Señora Brown, estoy por terminar.
-Esta bien, al acabar de limpiar los pisos, te pones a lavar la ropa y ordenar mi habitación.
-Si Señora Brown.Mientras terminaba de lavar los pisos llego el esposo de su hermana, quien no le agradaba mucho.
-Buenas tardes Ariana (dijo Lord Brown al entrar a su casa).
-Buenas tardes Lord Brown (dijo Ariana algo incomoda).
-¿Cómo estas?.
-Bien Señor, gracias.-Interrumpo algo (dijo Michelle mientras bajaba las escaleras).
-No querida. ¿Cómo te fue hoy?.
-Bien, me alegro de que hayas llegado a la hora de comer.
-Bueno, entonces pasemos a la mesa.A Michelle no le agrado la forma en que le hablo su esposo a su hermana y haría lo posible para que ella se mantuviera alejada de él.
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Una Dama Como Cenicienta
Historical FictionUna joven dama a la cual su madre trata como sirvienta. Un duque francés que necesita una esposa.