Capítulo XXVII

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Ariana se sentía molesta de que su hermana la presionara para encontrar un noble con quien casarse.

-Iré a caminar un poco si no les molesta.
-No creo que se correcto Ariana (dijo su hermana).
-Esta bien, puedes ir (dijo Lord Bradford).
-Gracias (dijo Ariana haciendo una reverencia para poco después caminar por uno de los pasillos de la mansión).

-¿Porqué la dejaste irse? (Pregunto Danielle a su marido).
-Creo querida, que la estas presionando mucho para que contraiga matrimonio y no dejas que piense bien que noble le conviene.
-Esta bien John, tienes razón.
-Gracias querida (dice Lord Bradford mientras le da un beso en la mejilla a su esposa).

Ariana llego a la entrada de un jardín, el cual se veía hermoso, lleno de flores como rosas, gardenias y dalias, entre otras que no pudo distinguir por la oscuridad de la noche. Decidió adentrarse al jardín para tomar un poco de aire fresco.

-Buenas noches señorita, ¿Qué hace aquí tan sola (le pregunto a Ariana un caballero que por la forma de hablar sabía que había bebido de más)
-Buenas noches señor.
-Te molesta si te hago compañía, no deberías estar aquí tan sola.
-No gracias, creo que debo irme.

Ethan había llegado a la velada que ofrecían los tíos de su amigo Cedric para disfrutar de sus últimos días en Londres.

-Así que te marcharas pronto.
-Si, creo que ya he estado mucho tiempo en esta ciudad.
-No es por la chica, ¿o si?
-No, debo regresar a mi país, tengo asuntos que atender en las compañías de mi padre.
-Bueno, disfruta de la velada, baila con alguna joven (le dijo Cedric con una gran sonrisa).

Ethan prefirió salir a tomar aire fresco al jardín, ahí vislumbro a una joven dama siendo acosada por un caballero.

-Tan pronto decide irse señorita (le decía el caballero a Ariana mientras la agarraba de la mano).
-Si señor, me están buscando.
-Espera un momento.

-Me parece que la dama le ha dicho que debe irse señor.
-La señorita esta conversando conmigo, así que le pido que se retire y no nos moleste.
-Lo siento señor pero yo entendí lo contrario, así que le exijo que suelte a la señorita.
-Lo siento, no lo hare señor.

Ethan al escuchar la respuesta del caballero y notar que este se encontraba alcoholizado decidió soltarle un golpe para que soltara a la joven. Tomo a la joven de mano y la alejo de aquel hombre.

-¿Se encuentra bien señorita?
-Si señor, muchas gracias por salvarme.
-¿Lady Jones?
-¿Lord Dumont?
-¿Qué hace aquí afuera? Y ¿Por qué su esposo no la acompaña?
-¿Esposo?

Una Dama Como CenicientaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora