Capítulo XXX

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Ariana no podía creer que pronto se casaría con la persona de la que estaba enamorada, se había fijado la fecha para dentro de ocho meses para ajustar detalles y tener un noviazgo como se debe.
Ethan decidió marcharse a Francia una semana después de fijar el compromiso para hablar con sus padres.

Ariana fue a visitar a su amiga Naomi para platicarle sobre su compromiso.

-Hola Ariana, ¿Cómo has estado?
-Hola Naomi, muy bien ¿Y tu?
-Bien pero no tan bien como tu, te ves más alegre.
-Gracias amiga (dijo Ariana sonriendo?
-Cuéntame que ha pasado para que hoy estés más alegre.
-Me voy a casar con un Duque.
-¡Oh! Amiga y puedo saber ¿Quién es ese Duque?
-Lord Dumont.
-¿Lord Dumont? ¿Te casaras con mi primo?
-Yo no sabía que Lord Dumont es tu primo, siento no haberlo mencionado antes.
-No es eso, estoy feliz de que seremos familia (dijo Naomi alegremente) solo que mi primo no menciono con quien se casaría.

***
Castillo de Menars- Francia
18 de Abril 1889

Los padres de Ethan estaban muy felices de ver a su hijo de regreso.

-Querido hijo, me alegro que hayas regresado pronto a Francia (dijo Lady Dumont).
-¿Como están los asuntos en Londres? (Dijo el padre de Ethan mientras fumaba su pipa sentando en su sillón favorito de cuero café).
-Bien padre, las empresas en las que invertimos están avanzado correctamente.
-Me alegro que así sea.
-Madre, Padre debo hablar con ustedes.
-¿Qué pasa hijo? (Dijo Lady Dumont angustiada ante la seriedad con la que habló su hijo).
-Hare lo que ustedes tanto han querido, he decidido casarme.
-¡Oh! Eso me llena de mucha alegría, por fin podre tener nietos y ayudare a tu esposa a cuidarlos, y ¿Cómo es ella hijo? ¿Es bonita? ¿De buena familia? ¿A venido contigo?
- Camile, querida deja que nuestro hijo hable, lo abrumas con tantas preguntas.
-Si querido, lo siento (dijo Lady Dumont un poco avergonzada).
-Y bien hijo, cuéntanos sobre ella.
-Esta bien, es una joven inglesa, de una gran belleza, muy amble y bondadosa, su padre es mercader.
-Así que su padre es mercader, supongo que tendrá un buen dote.
-No padre, ella no tiene ningún dote.
-Entonces no creo que sea bueno que te cases con ella, la joven no tiene nada que ofrecerte.
-Lo siento padre, pero ya he decidido casarme con ella.
-No esperes que esa joven se bienvenida aquí Ethan.
-Entonces yo tampoco lo seré padre.

Una Dama Como CenicientaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora