TINIEBLAS (MALEC)

Belleza Ligthwood

Pasado

Después de su penoso accidente en el patio, Alec y Magnus se quedaron conversando por horas. No supieron cuánto tiempo se quedaron hablando, pero imaginaron que mucho cuando vieron que el cielo comenzaba a oscurecerse.

-creo que lo mejor será que entre – Alec se levantó del suelo – mis hermanos deben estar buscándome

- quisiera decir que mi amiga también, pero no creo que sea así – dice levantándose el también – debo decir que el que mi gato se escapara fue lo mejor que pudo pasarme

Un sonrojo se hizo visible en la pálida piel de Alec – fue bueno conocerte – asintió aun sonrojado

¡Dios! ¿Este chico no lo iba a besar nunca? Sin saber muy bien porque cuando se acercó para besarlo se quedó estático, tenía miedo de asustarlo así que solo lo beso en la mejilla.

-¿podemos salir algún día? – pregunto Magnus tratando de sonar seguro pero sentía como si estuviera a punto de desmayarse ¿Qué clase de embrujo le habían hecho esos ojos azules?

Alec abrió la boca listo para decir algo pero antes de que una dijera algo una chica de cabello negro abrió la puerta del patio y entro, debía admitir que tenía estilo, un vestido plateado brillante se le pegaba al cuerpo de tal manera que parecía que los mismos ángeles lo habían confeccionado a su medida, los altos tacones (de 15 cm, dedujo Magnus) resonaron en el suelo. Sus ojos negros fueron de el a Alec, para después mostrar una sonrisa... ahí lo noto, esa chica tenía la misma sonrisa que Alec.

-te estaba buscando, ahora veo porque no regresaste – dice con una sonrisa mientras mira a Magnus

- Isabelle – le regaño – Magnus, ella es mi hermana Izzy – dice – Izzy, él es Magnus

- un placer - dice Magnus con una sonrisa

- el placer es todo mío – sonríe – Alec lamento decirte que tenemos que irnos, Jace tomo algo que le hizo mal

- de acuerdo – suspiro Alec para comenzar a caminar. Izzy se adelantó, pero antes de entrar a la sala se giró hacia Magnus

- espero vernos de nuevo – sonrió para después entrar a la sala

Alec se giró hacia el atragantándose con sus palabras. En cualquier otro momento Magnus se hubiera reído pero sorprendentemente eso le pareció sumamente tierno.

-¡Alec bésalo de una vez y vámonos! – la voz de Izzy se escuchó dentro de la sala, Magnus soltó una risa y Alec se sonrojo aún mas

- nos veremos de nuevo – dice para después salir

¿Se verían de nuevo? Seguramente Alec pensaba que él era brujo, porque no veía otra explicación para que afirmara que se verían de nuevo si ni siquiera tenía su número ni nada con que pudiera buscarlo. Tenía que dejárselo al universo, y eso no lo tranquilizaba en absoluto, el universo era un hijo de perra cuando se lo proponía.