El hospital

261 29 88
                                    

Una casa hecha de
papel y yo derrumbado en su interior.



Aquel lugar era por decir lo menos «tenebroso», constaba de  una serie de edificios antiguos decorados en un estilo gótico colonial que le daba un aspecto bastante lugubre al entorno, estaba rodeado por viejas mazmorras,  mismas en donde en la época de las cruzadas se habían enterrado a muchas personas. Aquel sitio era pues mas una especie de campo santo o una fosa común en lugar de un hospital psiquiatrico.  "probablemente hasta espantan de noche aquí" pensó Borhan al entrar al vestibulo.

Desde que se cruzaba la puerta de aquel hospital cualquiera podía darse cuenta de que el ambiente allí era demasiado pesado, todo estaba cargado de un aura gris, era inevitable no sentirse perturbado entre aquellas paredes y hasta el lobo de Borhan se altero mostrando sus dientes y razguñando por salir a flote, pero había que conservar la calma asi que el Alfa sacudió la cabeza e inspiro fuertemente para calmarse y alejar los malos pensamientos y posteriormente se dirigió a la recepción en donde lo recibio una mujer mal encarada, ya entrada en años, vestida de enfermera, con un aliento putrido mal disimulado con una goma de mascar que machucaba con los dientes como caballo.

La mujer lo miro de arriba a abajo con expresión de hastio y Borhan tuvo que aguantar la respiración para evitar las arcadas que le producian el mal olor proveniente de la enfermera y su muy avanzado problema de alitosis.

—Buenas tardes, mi nombre es Borhan Malik y vengo a preguntar por un paciente —el Alfa hablo pausada y educadamente, sabia que debía ser inteligente y dar una buena primera impresión allí.

—¿Es usted un familiar? —la mujer presuntamente omega le respondió sin siquiera mirarlo, Borhan no estaba seguro si en realidad lo era puesto que el desagradable olor de su aliento opacaba cualquiera que fuese su aroma natural.

—Si, es mi hermano mayor

La enfermera suspiro con hastío, lo miro por un par de  segundos y después de rodar los ojos volvió su mirada a la revista que estaba leyendo con anterioridad.

—Tiene que traer un certificado donde conste su parentesco con el paciente firmado por un juez o notario o de lo contrario no puedo darle ninguna información.

En ese momento Borhan escucho un grito, se giro y vio como dos Alfas enfermeros llevaban a rastras a un hombre que llevaba puesta una camisa de fuerza, el mismo gritaba y pataleaba para que lo soltaran, estiro su cuello todo lo que pudo para poder ver bien la cara del sujeto por entre las rejas que antecedian a las habitaciones de los pacientes y entonces lo reconocio, era a Zayn a quien llevaban a la fuerza a quien sabe donde.

Pego su cara a la reja y lo llamó, el Alfa moreno le devolvió la mirada unos segundos y se volvió a girar para seguir luchando por sacarse de encima a esos hombres.

—Señorita es él, ¿a donde se lo llevan? —preguntó y la enfermera le respondió en tono molesto.

—Va a su primera sesión de terapia de electro  choques*

Borhan al escuchar esas palabras se quedo de pie petrificado en la recepción del hospital psiquiatrico.  Aquella escena que presenciaron sus ojos parecía sacada del mas bizarro de los cuentos de horror.

Su hermano mayor siendo llevado a empujones por dos enfermeros, que mas bien parecian dos gorilas sedientos de sangre; el cuerpo del que alguna vez fue el imponente lobo gris ahora solo parecía una sucia y desgastada marioneta que luchaba contra el viento impetuoso por no ser arrastrada a un lugar frió y oscuro.

Sus ojos, esos que antes tenían una mirada fiera que reflejaba poder e infundian temor, ahora solo eran un pozo vacío, inexpresivo e inerte.

El corazón  de Borhan  se estrujo en su pecho y su lobo aullo de dolor e impotencia, la estancia se inundo del desagradable e intenso olor a calabazas podridadas, provocado por la furia que empezó a sentir el Alfa, al no poder hacer nada para acallar los gritos de su hermano que martillaban en sus oídos destrozando sus tímpanos.

Sangre de  Lobos (Ziam Palik) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora