Por motivos no especificados, Dante y Vergil logran salir del inframundo para seguir con sus vidas. Nero sigue en su trabajo como cazador de demonios y ser una persona responsable de su familia. Su nueva aflicción es mucho peor que matar a engendros...
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Nero no pudo dormir en toda la noche.
-<< ¿Cómo se le ocurrió a Kyrie a invitar a la casa a su...padre?>> << ¿Tener al hombre que le arranco el brazo?>>.
Era una completa y total locura. Eso, aunado de que aún tiene deseo de concluir con la batalla que tuvieron, a pesar de que él había ganado limpiamente.
Se gira al otro extremo de la cama, cae bruscamente sofocándose.
- Nero ¿Te encuentras bien? –se asoma Kyrie al otro extremo.
- Si... -mientras recupera el aliento. -¡Estoy bien!
Adolorido se sube de nuevo. Kyrie se levanta y se acomoda junto a él. Este la rodea con su brazo y ella cálidamente se abraza a su cuerpo.
- ¿Qué tienes? Toda la noche te has estado moviendo mucho... ¡Más de lo normal!
- Bueno, dime Kyrie ¿Por qué se te ocurrió invitarlo a nuestra casa al hombre que me arranco el brazo?
- La verdad, es que sabía que tú no irías a buscarlo y que él haría lo mismo... –le dice con ternura. –además, quería conocerlo: al hombre que te dio la vida.
- ¿Pero no entiendes que él corto el brazo?
- Es tu padre al fin de cuentas... –asevera tristemente. –al menos tienes eso.
Nero siente eso último con dolor. Ellos habían quedado huérfanos y la única figura paterna que habían tenido había sido Credo. Aun le dolía su ausencia. Ahora entendía la intriga y la curiosidad que ella tenía hacia el hombre que lo había engendrado.
-De acuerdo nena... -responde con igual ternura. –si es tu deseo, lo aceptare.
Kyrie sonríe al escuchar su noticia, le da un tierno beso y nuevamente vuelve a dormir. En cambio, Nero aún se mantiene inquieto por toda esta situación.
Al amanecer, se levanta. Se calza las botas y se dirige hacia el garaje para ver a Audaz: su alcancía de confianza. Revisa sus finanzas con detenimiento. Para su decepción, los ahorros no son suficientes.
-<<Voy a traer un hijo al mundo y no tengo el dinero necesario para pagar el hospital de Kyrie>> -se dice para sus adentros con gran aflicción.
Con una terrible resaca de las desveladas, toma una enorme taza de café para soportar el día. Mientras se sirve, la maquina comienza a emitir chispas y hace un terrible corto circuito.
-Oh, maldita sea. –con una jerga trata de apagar el fuego que se inició. –Nico ¡Otra vez se quemó la cafetera!
Mientras limpia ve de reojo que algo se aproxima al refrigerador. Rápido voltea dispuesto a atacar lo que sea que este ahí y ve que es Dante que toma una caja de jugo y se sirve en un vaso.
