Cuando estaba por cumplir los 23 años, la vida de Lali y todos sus amigos da un giro de 180º. Lali es una joven estudiante de Historia en la universidad de Buenos Aires, pero su familia le ocultó un gran secreto que le revelaron el día antes de su v...
Me desperté sola en esa enorme cama, Alec se había dormido en uno de los sofás, imagino que no quiso despertarme, ni molestarme después de todo lo que pasó ayer. Me doy una vuelta por la habitación y pasado un rato, lo despierto. Él, se incorpora poco a poco y me hace un hueco para que me siente. Instintivamente lo abrazo, aunque él no parece ser de esos que se dejan dar afecto facilmente, pero aún así, no se aparta e incluso lo corresponde un poco. Al fin y al cabo, ninguno de los dos quiere estar acá y tampoco nos amamos, aunque nos llevemos bien, dudo que eso alcance para la convivencia. Nos quedamos buena parte de la mañana en silencio, hasta que decido hacer preguntas.
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Lali: ¿donde se llevaron a Magnus e Izzy?
Alec: a la prisión del Palacio del Consorcio. - Dice desganado. - Si lo que estás pensando es usar un portal para ir y sacarlos, debo decirte que acá adentro solo funcionan los poderes de Cazadora de Sombras, de verdad que lo siento.
Lali: ¿y no hay ninguna runa que crée portales?
Alec: si, pero se la quedó tu hermana... Jace y Clary no tardarán en sacarlos.
Lali: por suerte hechicé a Peter... Para que ni si quiera me recuerde.
Alec: Rochi y Gas no tardarán en deshacer lo que hiciste...
Lali: lo sé, pero solo quería ganar tiempo y no hacerle sufrir así.
Alec: ¡No es la manera Lali! No eres la única que ha dejado a alguien que ama ahí fuera. - Se levanta.
Lali: de verdad que sé que no es la manera ¿Pero que iba a hacer? ¿Exponerlo ante la loca de tu madre y que corra la misma suerte que Magnus e Izzy? Al menos ahora hay alguién a fuera que pueda ayudar a Jace y a Clary. - Digo triste.
Alec: no quiero que peleemos Lali de verdad que no... Tenemos que intentar llevarnos lo mejor posible.
De pronto la puerta se abre, entran dos mujeres que me sacan de la habitación, aunque yo trato de resistirme y dos hombres que sacan a Alec. Nos separan y me llevan a una habitación llena de ropa, donde hay joyas y coronas, además está Mercedes, mirando por el enorme ventanal de cristal hacía un bosque algo seco. Yo no entiendo nada, ni si quiera sé donde estamos. Ella se gira y me mira fijamente, después me hace gesto para que me acerque a donde ella. Sin más remedio me quedo parada a su lado.
Mercedes: ¿Desolador, no te parece?
Lali: un poco... ¿Qué es todo esto?
Mercedes: voy a ayudarte con el vestuario para tu boda, no pretenderás casarte con mi hijo con este camisón... ¿O si?
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