36

3.1K 157 80
                                    


POV Camila

-¿él vendrá?

-si, cariño - dijo acariciando mi brazo pero me salí de su agarre

-no quiero, mamá. No quiero verlo

-es tu padre, Camila

-él solo quiere venir a restregarme en la cara que me lo dijo

-claro que no. Él en verdad está arrepentido.

-pero sabe que tenía razón.

-pero esa muchacha...

-no, no la nombres. No digas nada por favor

-de acuerdo, lo siento - me senté en el sofá con ella a mi lado - también vendrá Shawn - dijo con precaución.

-¿qué? ¿Para qué? ¿Para unirse a mi padre? - me quejé

-cariño, entiende que nadie está en tu contra. Entendemos que esto resulta difícil para ti, te pensaste enamorada de esa mujer, pero...

-te pedí que no la nombraras - dije molesta y me puse de pie. Estaba luchando fuertemente por sacarla de mí, pero todo giraba alrededor de ella. Todos me hablaban explícita o implícitamente de ella y ya comenzaba a aborrecerla.

Habían pasado dos semanas. Dos malditas semanas y el sentimiento no se iba.

Claro, no se lo había dicho a nadie, pero una parte de mi aún esperaba despertar de esta pesadilla. Sin embargo, me regañaba a mi misma recordándome constantemente lo que me hizo.

Unos quince minutos después mi padre y shawn entaban en mi departamento.

Mi papá, como ya suponía que pasaría, llegó recalcandome mi error, diciéndome que seguir sus consejos sería lo mejor y para colmo, diciendo que me perdonaba por nuestra última discusión.

Insolito ¿no?

Shawn se mantuvo callado en todo momento, pero me miraba insistentemente.

No fue hasta que mis padres anunciaron que se iban que él se me acercó.

-hey... - dijo tranquilamente - ¿cómo estás? - no dije nada, solo lo miré. Él parecía intimidado, eso era raro en él - pregunta estupida, lo siento

-no pasa nada ¿ya te vas? - lo eché sutilmente

-eh... si - metió sus manos en los bolsillos de su pantalón - pero quería decirte que cuentas conmigo para lo que sea, camila, si quieres hablar o... no sé, salir, ir por un trago... aquí estoy ¿ok?

-shawn...

-es sólo una propuesta, no tienes que decir nada - estaba nervioso ¿donde quedó el empresario todopoderoso seguro de si mismo? - pero a mi me encantaría volver a estar en tu vida - Le sonreí. No sabía que decir así que solo asentí - bien... ahora me voy. Que pases buena noche

-adiós

Me quedé viendo como salía hasta que quedé completamente sola.


Los siguientes días fueron más de lo mismo.

Estaba retomando y recibiendo todo el trabajo que se presentara. Me levantaba tempranisimo para llegar a la oficina y me llevaba carpetas cargadas de distractores a casa. Estaba funcionando...  en parte.

Dinah insistía en salir, en conocer gente nueva, pero nunca fui buena para socializar. Y aunque me la saqué un par de veces de encima, ella nunca me dejó sola.

Shawn, por su parte, me enviaba constantemente mensajes para saber como estaba y entre ellos algunas invitaciones a cenar que fueron rechazadas cortésmente  por mi parte. Me sorprendía la insistencia y la paciencia que tenía conmigo.

DIABLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora