- Perdona, Sara. Pero Erick y yo solo somos amigos. - Dijo Lucía como pudo. - No entiendo porque me llama tanto. - Y eso era cierto. Lucía no tenía ni idea de por qué la llamaba tanto.
- ¿Sabes qué? Que no te creo nada. ¿Te crees que soy tonta? Algo ha pasado entre ustedes dos y ten por seguro que lo descubriré. - Tras decir esto, Sara colgó.
Que dramática se ha vuelto mi vida, pensó Lucía.
Y es que toda su vida había dado un giro de 180 grados. Hace solo unos meses su única preocupación era estudiar y aprobar todo. Sin embargo, ahora, estaba embarazada del chico del que está enamorada y su novia sospecha algo de ella y él.
Dio un suspiro y se tiró boca abajo a la cama. Su vida era un completo desastre pero no se rendiría, no se rendiría por su bebé.
Pensando en el bebé, a Lucía se le estaba quedando toda la ropa pequeña ya que su barriga estaba bastante abultada. Decidió que mañana iría a comprarse ropa nueva que fuera ancha y que ocultara su barriguita. No quería que mucha gente se enterara.
* * *
Lucía llevaba un rato dando vueltas en la cama y no conseguía dormir. Tras estar un rato quieta mirando el techo, la llegada de un nuevo mensaje la asustó.Carlos: Siento hablarte a estas horas. Seguramente estés dormida.
Te quería preguntar si hoy tenías algo que hacer... Para quedar y dar un paseo o algo.
4:16✓✓Lucía: Sí, claro. Me encantaría. Hoy tengo que ir a comprar y me vendría genial un poco de compañía. Claro, si es que te apetece.
4:18✓✓Carlos: Por mí bien. ¿Qué tal te viene a las seis y media? Podría recogerte de tu casa si me mandas la dirección.
4:19✓✓Lucía: Me viene perfecto a esa hora. Ahora mismo te mando la dirección.
4:19✓✓Lucía pensaba contarle que estaba embarazada a Carlos mañana. No quería que empezarán una amistad sin que él no lo supiera.
Tras darse las buenas noches, se fueron a dormir.
* * *
A la mañana siguiente se despertó bastante cansada. No había dormido bien esa noche y no tenía ni pizca de ganas de levantarse de la cama. Sin embargo, empezó a sentir ganas de vomitar al oler huevos fritos que seguramente estaba haciendo su madre para desayunar.
Cómo pudo, corrió al baño e intento vomitar pero en su estómago no había nada que expulsar. Decidió bajar con la mano en la nariz para no oler ese asqueroso olor y comer algo.
Su madre, al ver su aspecto, se preocupó pero más tarde entendió que era por el embarazo.
Lucía desayunó algo de fruta y se fue de nuevo a su cuarto. Se encontraba muy cansada y quería solo dormir. Así que eso hizo hasta que su madre la llamó para almorzar.
Comió y miró la hora. Eran las cuatro y media pasadas. Se acordó de su cita con Carlos y comenzó a ducharse. Después eligió un vestido que se ceñía
A su pecho y quedaba holgado de ahí hasta la rodilla. Se puso unas converse y se pintó ligeramente.Cuando acabó eran solo las cinco y cuarto y decidió preguntar a Andrés por Erick. Andrés le contestó de inmediato y le dijo que se encontraba mucho mejor. También le dijo que preguntaba mucho por ella que si podía ir hoy. Lucía dijo que hoy no podía que mañana tal vez iría.
* * *
Llegaron las seis y Carlos fue bastante puntual. Carlos le mandó un mensaje a Lucía avisándola de que ya estaba en la puerta.
Lucía bajó rápidamente las escaleras, se despidió de sus padres con un beso y se fue con Carlos.
- Estás muy guapa con ese vestido. - Dijo Carlos mirando a Lucía mientras entraba en el coche.
Lucía se sonrojó y respondió un gracias.
Tras llegar al centro comercial, decidieron tomarse un batido y luego ir a comprar. Mientras se tomaban el batido hablaban de sus vidas, de que harían en el futuro... Hasta que Carlos se acercó a Lucía para quitarle un poco de chocolate que tenía en su labio inferior. A Lucía le pareció un gesto muy íntimo y se sonrojó. Tras esto, Carlos se levantó de la mesa, la rodeó e intentó besar a Lucía. Lucía en shock, se apartó y dijo lo primero que se le vino a la cabeza.
- No puedo... ¡Estoy embarazada! -Avergonzada se levantó y fue corriendo hacia el baño.
Carlos se quedó parado mirando como se iba corriendo hacia al baño y cuando reaccionó, cogió uno de los batidos y lo estrelló contra el suelo gritando joder.
Lucía, en el baño, se miró al espejo y dejó escapar un suspiro.
Empezó a sonar su móvil y lo contestó sin mirar quien era.
- Lucía, porfavor. Ven. Te necesito. - Era la voz de Erick.
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¡ A TRAVÉS DE TU VENTANA !
Novela JuvenilGracias a Lucía, Erick podrá ser rescatado del infierno en el que se encuentra. Pero... ¿Qué pasará después? No todos los finales son felices.