A Lucía le sentó fatal como se había ido Erick, así que, motivada por la rabia, le gritó a Carlos.
- ¡¿Pero que coño se te ha pasado por la cabeza para decir eso?! - Se incorporó un poco en la cama.
- Lucía, yo pensé que no querías contarle que el bebé era de él. Te veía un poco nerviosa. - Intentó acercarse a ella pero le puso la mano en el pecho y lo alejó de ella.
- Eso no es asunto tuyo. Ahora mismo no quiero verte. Además si te quedas te voy a hablar mal. Preferiría que te fueras. - Le dijo señalándole la puerta.
- De verdad que estoy arrepentido, Lucía. Lo hice sin pensar. - Bajó la mirada y se fue. En su interior había un torbellino de emociones. A Carlos le gustaba Lucía, pero estaba Erick en medio. Una gran ira comenzaba a surgir en su interior contra Erick.
Lucía se quedó sola en la habitación del hospital. Se sentía mal por haberle hablado así a Carlos pero él se había pasado.
* * *
Erick salió de la habitación con un dolor en el pecho que le había provocado aquella noticia. Aún no había asimilado del todo la noticia de su embarazo cuando se enteró de que él no era el padre.
Iba demasiado rápido andando hacia la salida, donde le esperaban sus padres y Andrés, lo que provocó una punzada de dolor en el lugar de la herida. Tras ello, bajó el ritmo de su marcha y llegó junto a sus padres.
- ¿Qué pasa, Erick? Te noto un poco serio. ¿Es grave lo que le ocurre a Lucía? - Le preguntó su madre mirándolo.
- No, mamá. Ella está bien. Sólo estoy cansado. Vámonos a casa. - Pasó por al lado de sus padres y Andrés y fue directo a su coche. No tenía ganas de hablar con nadie.
Sus padres y Andrés se miraron extrañados. Se preguntaban que le habría pasado.
* * *
Lucía estaba en la habitación junto sus padres. En un par de horas podría irse pero tendría que estar en total reposo hasta que llegara la hora de que el bebé naciera.
De repente, se abrió la puerta sin que nadie llamara antes y apareció Carolina.
- ¡Amiga! ¿Cómo estás? - Se acercó corriendo hacia ella.- La empezó a examinar buscando algún defecto o algo que indicara que estaba mal.
Los padres de Lucía se rieron por su repentina entrada. Ya la conocían y sabían que era un torbellino.
- Estoy bien, tranquila. Hoy podré irme a casa. - Dijo Lucía sonriendo. Se alegraba de ver a Carolina. Llevaban un tiempo que no hablaban mucho.
- ¿Mi sobrinit@ también está bien, no? - Le tocó la barriguita a Lucía y está asintió riendo.
Más tarde apareció el médico para darle el alta. Carolina para ese entonces seguía allí y se fue con ellos a su casa. Quería pasar un rato con Lucía.
Ya en la habitación de Lucía comenzaron a hablar de lo que habían hecho estos días que estuvieron sin hablar. Lucía le contó todo. Desde lo de Carlos hasta el beso interrumpido con Erick por Sara.
- ¡Serás cerda! Esas cosas se cuentan antes. Y yo pensando que te iba a sorprender lo que le ha pasado a mi tía. -
Dijo Carol mientras se metía un Dorito en la boca.- Lo siento, amiga. Es que últimamente tengo la cabeza en las nubes. Prometo estar más atenta de tí. - Le sonrió a Carol.
Entonces comenzó a sonar el teléfono de Carol. Tras un rato hablando por teléfono, Carol se despidió de Lucía prometiéndole que mañana volverían a quedar. Carol era una persona increíble. Cuando peor lo había pasado Lucía, ahí estaba ella. Sin embargo otras amistades no dudaron en irse cuando más los necesitaba. Pero ya no le importaba, teniendo a Carol era feliz. Sabía que ella nunca la decepcionaría.
Lucía estaba tumbada en su cama, boca arriba. Pensaba en todo lo que le había sucedido estos últimos meses. Sin ninguna duda su vida había dado un giro inesperado.
Se asustó al escuchar un ruido procedente de la ventana. Tenía la ventana abierta y justo al lado de ella había un poste de la luz. Siempre había pensado que alguien podría subir por él y colarse en la habitación.
Se dirigió a cerrar la ventana. Ya comenzaba a asustarse. Estaba a punto de cerrarla cuando alguien efectivamente estaba subiendo por el poste y le tapó la boca. Cuando vio quien era su corazón dio un vuelco.
- Erick, ¿qué estás haciendo? - Lucía estaba con el corazón muy acelerado. No sabía si era por el susto o por tener justo en frente de ella a Erick.
* * *
¡Otro capítulo!
Esta vez no he tardado tanto. Intentaré que el siguiente sea pronto.
¡Os leo y os agradezco a todos de corazón que leáis mi historia!
Agradezco todos los comentarios y estrellitas. SOIS GENIALES.
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¡ A TRAVÉS DE TU VENTANA !
Teen FictionGracias a Lucía, Erick podrá ser rescatado del infierno en el que se encuentra. Pero... ¿Qué pasará después? No todos los finales son felices.