Una semana después de su primer besó, Soobin enfermó.
👉🏽👈🏽
-¡Me siento horrible, Bebé!.-Exclamó Soobin con su voz grave y raspada, se oía ronco a causa de su garganta.
-En verdad estás resfriado, Hyung.-Comentó Huening Kai tomando asiento en la silla de madera del escritorio que tomó una vez que entró a su habitación, desde que abrió la puerta podía oír el estruendoso estornudo.
Lo observó y su aspecto dejaba mucho que decir, en primer lugar que es un descuido porque él mismo le había advertido acerca de dormir vistiendo sólo una camiseta y dejando la ventana abierta pero no le hacía caso y en segundo lugar porque aún en estos últimos días de lluvia no hacía más que salir a la calle a jugar con el agua que se estancaba en el cordón. Su expresión facial se veía cansada y destruida como si un huracán pasó por ahí arrastrando su encantadora y preciosa sonrisa, sus ojos oscuros antes redondos y grandes ahora se veían decaídos y pequeños, su nariz que exponía un color rojo fuerte y la presencia de mocos.
-Le dije a mamá que no te dejé entrar bajo ninguna circunstancia.-Dijo Soobin apenas audible para los oídos de Huening Kai mientras limpiaba su nariz con un pañuelo que había tenido aferrado a su mano derecha.-No soportaría saber que sufrirías...
-No lo haría.-Susurró Huening Kai dulcemente.-Porque tú estarías ahí para hacerme sonreír.-Sus mejillas se tiñeron de un color carmesí.-Ademas...bueno creó que mejoraría con sólo una cosa...
Soobin lo miró sin comprender. Se enderezó en su lugar tomando asiento en una posición más cómoda, su espalda chocaba contra el respaldó de la cama y su cabeza se quedó quieta en el hueco entre la madre y la pared.
Sus ojos oscuros lo observaban curiosos.
-¿De que hablas?.-Preguntó confundido.
La pregunta lo tomó desprevenido porque su cabeza se encargaba de recordarle lo único que lo hizo sonreír sin esfuerzo de su parte y éso fue el besó que Soobin le dio hace unos días, que para sus labios hubiera sido un acontecimiento del día de ayer aunque ya pasaron algunos días desde entonces.
-N-naa-da.-Contestó Huening Kai tímido y desvió su mirada hacia la mesa de luz.-¡Mira que no tomaste el medicamento!.
Éste miró en su dirección.
Su mente no se concentró en el regaño que estaba recibiendo de él si no más bien en el color rosado de sus labios. Se sentía desfallecer y curioso de hacer contacto de nuevo contra ellos, quería satisfacer aquellas cosquillas en su interior.
-Eres un Beb- Achu.-Estornudo.
Soltó y sintió sus fosas nasales invadidas de mucosidad que llevó su mano derecha junto a su pañuelo a la punta de su nariz para limpiar esa zona. Sus ojos oscuros buscaron a Huening Kai que había desaparecido de su vista por un momento pensó que lo había soñado y que su Ángel nunca llegó a visitarlo pero no fue así, lo divisó enfrente de su guardarropa.
-¡Tenia una sorpresa para ti aquí!.-Gritó Huening Kai, sus manos se encargaron de buscar entre medio de los pantalones de algodón una bolsa transparente que contenía un pijama, ya que el de él lo tenía debajo de su suéter celeste y sus pantalones.
-¿Porque no me la diste a mí?.-Preguntó Soobin haciendo un mohín de labios, un gesto que a los ojos avellanas de Huening Kai hubiera derretido su corazón.
Pero no le estaba prestando atención.
-Suponia que en algún momento ¡Tendriamos nuestra pijama!.-Dijo. Extendió la bolsa transparente enfrente de los ojos oscuros y vidriosos de Soobin que a causa de la comezón que le hacía las alergias no podía mirar bien, su visión era borroso.
-La última fue hace...-Huening Kai bajó la mirada avergonzado al oír la mención de su última pijamada de los labios de Soobin que jugó con sus dedos.
-Queria que tuviéramos una de amigos.-Cambio el tema.-Pero no conseguí dos de conejos...-Dijo apenado. No le gustaba no salirse con la suya y menos que sus planes fueron acabados por culpa de alguien más ya que culpaba a la vendedora por no tener más de uno.-Aunque si lo pienso...sólo tú eres como un conejito.
-Soy una persona, Kai.-Comentó resignado.
Fingiendo enojo.
-Lo sé...
-¿Acaso te gustan más los conejos que yo?.-Lo retó con la mirada.
-¡Eso jamás!.
Su corazón comenzó a latir con fuerza. Preocupado de que Soobin se moleste con él se acercó hasta su cama, sintiendo bajó sus pies el tacto frío del pisó haciéndole cosquillas, dejó la bolsa transparente en un costado y sin importarle se subió.
Sus rodillas se acomodaron a cada costado de sus piernas.
-Extrañaba sentirte cerca, Kai.-Susurró Soobin dejándole apreciar una sonrisa de medio lado que extendía sus redondas y gordas mejillas dándole un aire inocente, lo había engañado.
-Por eso empezaste a fingir enojo.-Comentó Huening Kai divertido.
En aquel entonces por sus cabezas no había una idea del futuro ni siquiera una cercanía de lo que sería de ellos y de cómo crecería su lazo.
Porque vivían cada momento en el ahora.
-¿Puedo besarte?.-Preguntó Soobin amablemente, sus manos se extendieron hasta cada costado de su cintura y descansaron ahí.
No quería quitar sus ojos del rostro de Huening Kai.
-Puedes hacerlo cuantas veces quieras...
-Entonces ven aqu-ACHU
La risa de Huening Kai inundó la habitación cuando Soobin en un intentó de unir sus labios estornudo manchando los labios de éste con saliva.
Ambos reían.
Porque se sentían felices como si se tratara de una isla mágica donde ninguno quería abandonar la arena y subirse al barco, no querían volver a casa a menos que sea de la compañía del otro.
[💟]
Ya extrañaba escribir sus manías de niños, aunque fue muy corto 😅 quería recordarles de sus juegos.
¿Están listas para el sufrimiento?
Dentro de unas horas subiré las aclaraciones para la continuación que como saben será con Adolescentes así que estén listas para la dramatización 👀.
Estoy participando en los watty2019 y no tengo la menor idea de cómo es😂.
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𝒥𝓊𝑒𝑔𝑜𝓈 𝚃𝚘𝚛𝚙𝚎𝚜 愛: ˢᵒᵒᵏᵃᶤ
Fanfiction❝𝘓𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘪𝘦𝘯𝘻𝘢 𝘤𝘰𝘯 𝘶𝘯 𝘫𝘶𝘦𝘨𝘰 𝘥𝘦 𝘯𝘪𝘯̃𝘰𝘴, 𝘵𝘦𝘳𝘮𝘪𝘯𝘢 𝘦𝘯 𝘶𝘯 𝘢𝘮𝘰𝘳 𝘷𝘦𝘳𝘥𝘢𝘥𝘦𝘳𝘰 .❞ Soobin tiene un sentimiento de curiosidad por su vecino Huning Kai, y sus llamativos labios de color rosa. ➸Capítulos cort...