#13

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Todas las noticias del día anterior le habían tomado por sorpresa, el saber que se iban a mudar a un departamento no era ni remotamente algo que hubiese pasado por su cabeza.

Eran las diez de la mañana del sábado y ambos ya estaban listos para salir, John llevaba una vaga maleta en su mano, probablemente con lo propio nada más, mientras Chittaphon llevaba su mochila de la escuela, misma con la que John lo había secuestrado, dentro estaban algunos de sus libros intactos.

—¿Sabes qué esto- —

—¿Es un riesgo?— Le cortó John con una sonrisa en lo que acomodaba la gorra que le había puesto al chico, ocultando lo mejor posible su rostro. —Lo es, pero...

—Pero no te dejaré. —

La sonrisa estúpidos en los labios de ambos era la alerta de que debían dejar de mirarse como un par de idiotas, ambos estaban abusando demasiado de esas palabras.

Pero no les importaba.

Chittaphon se estremeció cuando la luz del sol le golpeó directamente en el rostro después de algunos días.

Estaba nuevamente en la calle, podía correr ahora, unos metros más adelante quizá alguien podría ayudarlo a huir de aquella situación, lo sabía y estaba seguro que John también, por ello probablemente le daba pequeñas miradas de tanto en tanto... Sin embargo era solo un pensamiento bizarro en su cabeza, no eran ni remotamente sus planes, mucho menos una opción.

Así que con una sonrisa comenzó a caminar al lado de Johnny, le pareció extraño algunos movimientos que este realizaba pero no sé detuvo a preguntar hasta que ambos estuvieron en la avenida principal y tomaron un taxi.

No iban demasiado lejos, pero debían reducir posibles miradas.

—Desde el lunes vas a volver a la escuela conmigo, ¿Te parece?—Chittaphon asintió cabizbajo, John entendió el gesto. — ¿Qué sucede?

—No estoy listo para volver a ser agredido.— Hasta a él mismo le sorprendieron sus palabras, después de haber sido golpeado diariamente durante años ese sufrimiento se había reducido por unos días, quería disfrutarlo un poco más.

John notó el temblor en sus manos y se tomó el atrevimiento de tomar una de ellas con la propia, Chittaphon pegó un salto en respuesta.

—Te prometo que no será por mucho tiempo, tampoco dejaré que se sobrepasen contigo, estaré ahí.—

Nuevamente se miraron en silencio, Chittaphon tenía miedo, pero asintió, tomando de mejor manera la mano de John mientras luchaba internamente por las sensaciones que esto les causaba.

El resto del viaje siguieron igual, aferrados el uno al otro, pero cuando taxi se detuvo soltaron sus manos por la mirada extraña que el chófer les dio, John pagó la tarifa y ambos salieron del vehículo más que rápido.

John tenía especial cuidado en mantener a Chittaphon cerca de su cuerpo, un metro de distancia era demasiado para él, pero sujetar nuevamente su mano podría ser algo invasivo por lo que se limitó a estar relativamente pegado.

Vio a su alrededor entonces, estaba fuera de su nuevo edificio, ahora debía encontrar a la persona que le entregaría la llave, su padre le había dicho que era un colega iría, alguien de completa confianza,  pero no especificó si era hombre o mujer, solo dijo que esta persona lo reconocería.

Entró totalmente en guardia cuando una mano tocó su hombro, se apresuró a girar y esconder a Chittaphon en su espalda, sin embargo no bajó sus  defensas ni siqueira cuando esta persona silbó con aparente admiración.

Cry baby.  JOHNTENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora