11-Pueblo Lavanda

37 3 2
                                    

Sobre las seis de la tarde volvieron a ver la luz del sol, la cual las recibió con fuerza y un fuerte escozor en los ojos por tantas horas de oscuridad.

-Arg...- Resopló Aiko viendo como Charmeleon se sentaba a un lado de la entrada de la cueva y se rascaba los ojos.

-¿Gengar?- Preguntó Gengar despertando de su siesta a igual que Mew que abrió los ojos y se salió de la espalda de Ichi.

-Tendríamos que buscarle ropa a Mew, llama demasiado la atención un niño vestido completamente de rosa.- Dijo Saya mirando el niño que se iba con Charmeleon molestándolo para que jugase con él de nuevo.

- A mí me preocupa más el hecho que le impulsa a estar con nosotras.- Dijo Aiko pensativa.

-¿Es malo que Mew quiera acompañar a la gente?- Preguntó Ichi.

-No es que sea malo, es solo que es exageradamente raro.- Dijo Aiko.- Mew no se deja ver por cualquiera, si ya es extremadamente difícil verlo imagínate que sea tu compañero de aventuras.

-En eso Aiko tiene razón, Mew debe tener alguna razón para estar con nosotras y de seguro que no es porque se siente solo.- Dijo Saya mirando como al final Charmeleon se había levantado y tiraba al niño por los aires con su cola.

- Pero tampoco nos dice nada.- Dijo Ichi al lado de las demás mirando la misma escena.

- Supongo que hasta que no nos diga nada no nos debemos preocupar.- Dijo Saya al final suspirando.- Venga, tengo ganas de ir a la mansión que me dijo Aiko para poder capturar un par de pokemons tipo fantasma.

-Pensaba que solo querías capturar un Misdrearvus.

-Bueno, siempre puedo ver a otro pokemon que me llame la atención.- Dijo Saya encogiéndose de hombros. – Igualmente tengo que entrenar a mis pokemon.

Anduvieron un rato hasta ver la entrada del pueblo fantasma, que estaba formado por un centro pokemon, una tienda y un par de casas más, el sitio era un sitio turístico para los fans de los pokemon siniestro, pero la mayoría de la gente lo evitaba a causa del cementerio pokemon que había a unos metros del pueblo y por la mansión ocupada que había a las afueras.

A las chicas no les importa pasar la noche en ese pueblo, a pesar de que mucha gente lo evitaba y prefería irse a ciudad Azafrán o ciudad Azulona que solo estaban a un par de horas andando según la ruta que cogieras.

-Bueno, ya estamos aquí, ¿Nos tomamos un respiro y nos llegamos mañana a la mansión oh os queréis llegar hoy?- Preguntó Aiko delante la puerta del centro pokemon, en que Charmeleon estaba abriendo la puerta dejando claro lo que él quería.

- A veces pienso que Charmeleon por ser un pokemon tiene mucha iniciativa humana.- Dijo Saya mientras Aiko le cogía de la cola para que no entrase.

- Y tanta iniciativa, solo lo has tenido que ver hoy contra ese Raichu.- Dijo Ichi divertida viendo como Charmeleon andaba sin poder avanzar.

- Yo creo que los pokemon deberían descansar, incluso Gengar se ha quedado quieto en lugar de andar al lado de Charmeleon.- Dijo Aiko cayendo al suelo por el golpe de cola que recibió por parte de Charmeleon.- CHARMELEON.

-Sh...-Susurró una mujer que pasaba por su lado.- Un poco de respeto por los muertos.

-Lo siento.- Dijo Aiko en que todas hicieron una leve reverencia por inercia y luego se miraron entre ellas.- Jolín...

-Mejor entremos.- Dijo Ichi abriendo la puerta y entrando con Mew siguiéndola y luego entraron Saya con Gengar y por último Aiko.

-Char, char.- Dijo Charmeleon con aire exigente delante de la enfermera Choi pidiendo una llave en que en seguida Aiko se la tiró encima.- Charmeleon, no puedes ir pidiendo la llave tú, estate quieto y deja de exigir.

Pokémon, El inicio de una aventura (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora