Pokémon, El inicio de una aventura (Completa)

9-Los pokemon legendarios.

-Oye Saya, aun queda un buen trozo para llegar a ciudad Carmín, ¿Contamos la leyenda que nos debemos?- Preguntó Aiko mirando a alta del grupo que se quedó pensativa.

- Es verdad aún no hemos contado nunca la leyenda de los pokemon legendarios.

-Yo quiero escuchar la completa, solo me sé la parte de Hoenn.- Dijo Ichi.

- A ver.- Dijo Saya masajeándose la sien.- Ya lo tengo.

La leyenda dice que cuando Groudon y Kyogre estaban intentando crear los continentes y los océanos fueron interrumpidos por tres aves que no les dejaban hacer su trabajo. Articuno era una ave del tipo hielo que peleaba constantemente contra Moltres, una ave del tipo fuego, los dos son aves muy nobles en que la tierra no puede vivir si una de ellas falta, pero como Articuno es amante del frío y Moltres del calor no podían convivir juntas y por eso se intentaban matarse entre ellas en más de una ocasión, mientras que, Zapdos, la tercera ave y la más orgullosa y controladora de los rayos, intentaba ganar el control de todo metiéndose en la pelea.

Groudon y Kyogre se veían incapacitados para poder hacer su trabajo, hasta que un día de luna llena, un remolinó se formó en las aguas de Kyogre y de allí salió Lugia que consiguió poner paz entre las tres aves legendarias y cada una se marchó a una parte distinta de la región de Kanto para así permanecer en su forma dormida y Lugia, tras cumplir con su cometido se marchó a la región de Jotho.

Cuando por fin Groudon y Kyogre pudieron seguir con su cometido nació una nueva complicación, Kyogre quería que la mayoría fuera agua y Groudon quería que la mayoría fuera tierra, por lo que empezaron a pelear por conseguir el territorio del otro. Ante la disputa, se cree que bajó un tercer pokemon del cielo llamado Rayquaza y que consiguió calmarlos a ambos. Tras eso Groudon se refugió en las entrañas de la tierra de la región de Hoenn y Kyogre se hundió en las profundidades del mar, mientras que Rayquaza se elevó en los cielos viviendo en la capa de la estratosfera y de vez en cuando baja al pilar Celeste, también dicen que es muy territorial y que fue él quien creó la capa de ozono.

Cuando por fin el cielo, la tierra y el agua estaban en paz, y las aves legendarias habían encontrado un sitio para empezar su vida independiente de la otra, se alzó una ave más que dejó detrás de ella un arco iris mostrando que la paz había llegado a la tierra. Ho-oh es un ave que significa paz y verlo significa que las cosas te irán bien. También es la única ave que se ha vuelto a dejar ver después de la creación, cuando en la región de Jotho, en la ciudad de Iris hubo un importante incendio que arrasó con la torre de Latón y dónde murieron tres pokemon, los cuales fueron resucitados por Ho-oh, recibiendo nuevas cualidad y una nueva apariencia y fueron bautizados como los tres perros legendarios y errantes, Suicune el cual tiene la habilidad de purificar las aguas contaminadas, Entei en que con su poder puede hacer entrar en erupción un volcán y Raikow, que puede crear tormentas eléctricas a su merced.

Y para acabar, se dice que cuando todos los legendarios estuvieron tranquilos, un meteorito cayó y aterrizó en la isla origen, una de las siete islas que se encuentran entre Kanto y Hoenn. Rayquaza, al ser el creador de los cielos sintió que ese meteorito contenía algo que no era del todo natural y se dirigió hacia la isla Origen y derrotar lo que fuera lo que había cruzado su territorio.

Deoxys, o así se ha nombrado ese extraño pokemon, no es nada más que un pokemon como el que hábita ahora mismo en nuestros tiempo pero que fue infectado por un virus que traía el meteorito y se convirtió en un pokemon del tipo psíquico con la habilidad de mutar a cuatro formas distintas, defensa, ataque, velocidad y normal.

-¿Ya está?- Dijo Aiko que quería escuchar más.

-¿Te parece poco?- Preguntó Saya alzando una ceja.- La historia no es precisamente corta.

- Ya, ya, pero es que me suena que había un pokemon llamado Celebi.-Dijo Aiko intentando excusarse de su comentario.

-¿Y qué pasa con los cuatro regis?- Preguntó Ichi.

-¿Y Jirachi?- Preguntó de nuevo Aiko.

-¡AH! Sabéis demasiados nombres.- Dijo Saya intentando quedarse con todo lo que preguntaban.- Vamos a ver, Celebi es un pokemon que habita en los bosques, por lo que me imagino que tiene que ver con la creación de los bosques después de que Groudon y Kyogre se retirasen a igual que Rayquaza, Jirachi es un pokemon que tiene la habilidad de cumplir los deseos y de fertilizar la tierra y que solo está despierto una semana después de mil años y los Regis, solo sé que son cuatro, Regirock que tiene la habilidad de recomponer sus miembros con roca, eso lo hace indestructible, Regice, hecho totalmente de hielo y con la habilidad de soportar temperatura de lo más alta, se dice que lo sumergirías en lava y no se derretiría, luego esta Registeel, todo acero puro y también indestructible, los humanos lo encerraron porqué le temían y su ubicación se ha perdido, luego esta Regigigas, que se supone que es el creador de los otros Regis y el cuál movió los continentes para dejarlos como están ahora.

-¿Y qué pasa con Latias y Latios?- Preguntó Ichi con más curiosidad.

- Por no tener ni idea de la leyenda sabéis muchos nombres, ¿No?

-Solo quedan colgados estos dos...

-Vamos a ver, Latias y Latios son pokemon legendarios protectores, se dice que hay más de uno, y en una ocasión protegieron una ciudad entera de un ataque provocado por Aerodactyl y un Kabutos, son de agua dulce, son muy listos y pueden entender el lenguaje de los humanos, tienen visión compartida, pueden adoptar otras formas, bucear, hacerse invisibles, pero no intervinieron en la creación ni nada de eso.

- Me han dicho que Latias y Latios se encuentran en Hoenn.- Comentó Aiko pensativa.

- Hay una ciudad en Hoenn que tiene la estatua de Latias y Latios que indica que fue esa ciudad la que salvaron del ataque de Kabutos y Aerodactyl.

-Pero entonces estos pokemon deben ser muy antiguos, Kabutos y Aerodactyl son pokemon prehistóricos.-Dijo Aiko.

-Bueno y por lo que hemos vivido actuales.-Añadió Saya.- Quizá hemos pensado toda la vida que se extinguieron y en realidad nunca dejaron de existir del todo.

-También podría ser... aix.. Me encantaría poder ver alguno de ellos.-Susurró Aiko en su mundo haciendo que las otras negasen.