6. Everybody knows

236 22 2
                                    

-¡Elise-chan! Prometo que cuando llegue tú y yo podremos jugar todo lo que quieras~ -dije por teléfono con mi adorable y hermosa niña, que para mi desgracia tuve que dejar sola.

-Más te vale traerme un par de pasteles- exigió mi pequeña causándome ternura el sólo imaginármela.

-Claro que si mi cielo, nos vemos en un rato- dije con tono cariñoso y amable antes de colgar.

Con calma guardé mi teléfono en mi bolsillo para luego bajar de mi auto con rostro serio dirigiéndome al lujoso restaurante frente al que me había estacionado; al llegar a recepción el encargado me preguntó si había hecho alguna reservación, le dije mi nombre (o por lo menos bajo el cual hice la reservación) y amablemente me guío a la mesa en la que puntualmente me esperaba sentado Fukuzawa Yukichi bebiendo té.

-Aquilino está su asiento señor, ¿desea que le traiga algo?- me preguntó el chico con una sonrisa mientras yo me sentaba en la silla que me ofrecía frente a Fukuzawa-dono.

-Lo mismo que él está bien- le dije con una leve sonrisa y haciéndole una seña para que se fuera.

Fukuzawa tomó su taza y el dio un sorbo en completo silencio, yo mantenía mi sonrisa mientras cruzaba mis piernas y recargaba mis codos sobre la mesa.

-Tan puntual como siempre, Fukuzawa-dono -dije con un tono divertido en mi voz mientras ladeaba ligeramente la cabeza.

Él dejo la taza sobre la mesa para luego mirarme con seriedad, algo que de cierta forma me encantaba... esa dureza y firmeza tan viril, manteniendo una masculinidad intacta que era tan ex... interesante.

—Mori, preferiría que me dijeras para que me citaste aquí- dijo con su típico tono firme cerrando los ojos apenas unos segundos, momento en que llegó el mesero a dejar mi té.

Después de que el camarero hiciera una pequeña reverencia y luego se fuera, decidí que era el momento indicado para hablar sobre el tema que me tenía algo preocupado.

-¿Qué opinas sobre nuestra aliada... ALFA?- dije con interés sonriéndole divertido.

-¿Me has llamado sólo para esto? No tengo tiempo para hablar de chismes- dijo algo brusco cruzándose de brazos mientras me miraba con algo de molestia.

-Bueno, es que pensé que te gustaría saber qué tan fiable es, después de todo aceptaste tener una alianza con su organización y la mía- dije frunciendo ligeramente el ceño mientras usaba un tono algo infantil.

-Creo saber que puede ser alguien fiable- dijo suspirando levemente mientras bajaba la vista hacia su té.

-¿Aunque parezca que se metió en un problema muy gordo que puede afectarnos a ambas organizaciones? Tal vez incluso y nuestros subordinados terminarían siendo afectados- dije con Yam sonrisa calmada para luego beber un poco de mi taza.

-¿Qué quieres decir con eso?- me preguntó con seriedad frunciendo el ceño muy ligeramente.

-La están buscando, la Interpol para serte sincero, hace unos tres o cuatro días fue una agente a buscarme- dije dejando la taza sobre la mesa mientras dejaba a un lado mi diversión y me ponía serio- quería que le diera información sobre ella o que le ayudara a encontrarla, pro supuesto Céline sabe de eso... pero

-Hay algo que no le dijiste- El dijo mirándome con atención a lo que yo suspiré y asentí levemente.

-La agente me ofreció impunidad, ¿para qué o porqué? No lo dijo exactamente- dije cruzando mis brazos mientras me echaba hacia atrás en mi asiento.

Dioses y Demonios ||SOUKOKU||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora