Capitulo XIV

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23/11/1967 Océano Pacifico.

PDV ERIK

Los entrenamientos eran cada vez más duros, cada día le aumentaban cinco repeticiones a los ejercicios, pero no importaba, tenía que mantenerse muy juicioso y firme para no volver a las celdas y partir de ellas cuando desembarquen. Decían que él era el más suertudo, porque si esa bruja no se colaba a su vida no iba a volver y seguiría encerrado; como Salazar, que seguirá en su celda hasta que desembarcaran. Hizo una abdominal de nuevo y volvió al suelo, se sentía solo, volvió a hablar mucho con Edward pero no había vuelto a ver a Matehus desde que se cumplió la apuesta, no sabía que le ocurría, pero si sabía que tenía unas horas de descanso demás porque Steve Morris si cumplió su promesa, y ahora a Steve le tocaba matarse más todos los días. A veces le daba un poco de compasión el esfuerzo que hacia su amigo, pero una apuesta es una apuesta. Volvió a hacer otra abdominal, las clases con Galán iban perfectas, había aprendido a saludar, a despedirse y a decir la hora en vietnamita, hoy en su clase aprenderá a decir lugares importantes que se verán en la guerra y luego el repaso de las demás cosas aprendidas. Volvió a hacer otra abdominal.

— ¡Descansen! —Grito Foster— El entrenamiento ha terminado, vuelvan a sus actividades.

Su hermano partió a bañarse y Steve partió dedicándole una sonrisa de cansancio, ojala que cuando Matheus aparezca cancele la apuesta, Steve ya había pagado las consecuencias.

— Gray —Lo llamo Galán— ¿Quieres tomar la clase ahora? ¿O esperamos hasta el horario habitual?

— Si puedo salir de esa clase de una vez, mejor comencemos ahora.

Partieron hacia la sala de juntas, Galán saco unos papeles y se los dio, eran imágenes de lugares importantes que habían utilizado en guerras pasadas, había una estación de radio, una embajada, carreteras, una plaza, un palacio, una península, un aeropuerto y una ciudad, todas eran de distintos países y con diferentes colores, unos con personas y otros vacíos mostrando solo la estructura del lugar.

— Saca una imagen —Ordeno Galán.

Cerro los ojos y saco la primera que palpo, los abrió y se encontró con la ciudad de Honolulu, la ciudad a la cual había viajado con su familia en unas vacaciones de verano en 1960 cuando tenía once años, su madre estaba embarazada de su hermano Theon, sus hermanos gemelos tenían diez años, y su hermano Daniel tenia trece años. Todos jugaban y reían en la playa, iban a comer en un elegante restaurante, hacían fogatas, observaban el enorme volcán y luego se acostaban con miedo de que este inicie una erupción; eran los mejores días de su vida, era feliz junto a sus hermanos y se emocionaba al esperar a su pequeño hermano más que a nadie.

«Pero ahora esos recuerdos murieron al igual que tus padres, y tú sigues acá, vivo y con una sola meta que cumplir.»

— Saque Honolulu —Dijo un poco nostálgico— ¿Cómo se dice?

— Sacaste una ciudad —Respondió Galán— Ciudad se dice: thành phố.

— Thành phố Honolulu.

— Colócale un poco más de acento —Ordeno Galán.

Erik repito la palabra con un poco más de acento y Galán asintió orgulloso.

— Saca otra.

— Salió un aeropuerto —Le presto la imagen.

— Es muy fácil decirlo —Respondió Galán— Sân bay.

— Bien —Dijo y pronuncio de nuevo la palabra, sintió que lo había dicho tal y como el Sargento lo había pronunciado.

— Bien, Erik —Respondió Galán orgulloso— Vas a ser un gran soldado y eres muy bueno aprendiendo este idioma.

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