17

6.6K 855 186
                                    

Era el mediodía cuando Yoongi y Jimin volvieron a casa, apenas ambos pusieron un pie dentro de ella la señora Park se abalanzó sobre ambos aprisionando sus cuerpos en un fuerte abrazo. Con ojos llorosos reviso cada parte del cuerpo de Jimin, asegurándose que cada pequeño músculo de su hijo estuviera en perfectas condiciones sin un solo rasguño. Se deshizo en lágrimas culpándose por dejar solo a Jimin tanto tiempo y completamente asustada de lo que podría haber pasado si Yoongi no hubiera estado ahí junto a su hijo, luego se unió el padre de Jimin, fundiéndose en un apretado abrazo junto con su adorado hijo.

- Me alegra tanto que estén bien-dijo Hye con lágrimas en los ojos-me siento tan culpable por esto, no te debimos dejar solo tanto tiempo Jimin.

- Mamá ya casi acabo la universidad, ya no soy un pequeño cachorro-dijo Jimin con un poco de molestia. -Ya no llores mamá, ya todo paso-Jimin tomó la mano de su madre entre las suyas. -No te sientas culpable.

- ¿Entonces quién era?-Preguntó Joong muy interesado en saber la identidad de ese loco que estuvo persiguiendo a su adorado cachorro-¿Lo conocían?

- Nunca lo había visto papá, me sorprendió no saber quien era, de camino a la comisaría pensé en todos mis conocidos, me pregunte quien de todos sería, pero no fue nadie que yo conociera.

- ¿Y tú Yoongi lo conocías?-Esta vez Joong se dirigió a su hijo adoptivo.

- Nunca lo vi, todo esto me parece un poco extraño, ese beta es extraño eso es seguro, pero... no puedo creer que haya estado acosando a Jimin de la nada, sin conocerlo primero o algo... digo... ¿quién acosa a alguien que vio por casualidad?

- Ese beta estaba perturbado-dijo Jimin recordando el estado del beta cuando lo divisó a través de un cristal. -El chico estaba ido, miraba un punto exacto y desviaba la mirada a todas partes en un segundo, decía cosas sin sentido y luego caminaba de una esquina a otra mordiendo la uña de su dedo índice-seguramente tiene problemas mentales o algo así.

- Seguramente-dijo Yoongi algo inseguro.

- ¿Qué les parece unas vacaciones?-Preguntó de repente Hye.

- Eso estaría bien. Concordó Joong-ambos necesitan unas largas vacaciones, les hará bien pasar algo de tiempo entre hermanos.

- Eso es algo de lo queríamos hablar con ustedes-mencionó algo cohibido Jimin tomando la mano de Yoongi que estaba a su lado.

- Jimin es mi pareja destinada-habló Yoongi con tranquilidad, observando la dificultad que tenía Jimin para decir lo que pasaba entre ambos.

Los señores Park se quedaron inmóviles un par de minutos asimilando las palabras de Yoongi, para después sonreír con incredulidad y luego al ver las caras serias de sus dos cachorros supieron que estaban hablando en serio.

- Pero que... -Hye no sabía qué decir ante esa información pero estaba segura de que si el destino había juntado a ese par, era por que así debía ser-que sorpresa, nunca me lo hubiera imaginado-prosiguió con asombro en sus palabras. -Bueno ustedes siempre se la pasaban peleando y ahora son pareja.

- Entonces... -Habló Joong muy serio-supongo que al fin ustedes van a mudarse de esta casa. Para luego sonreír con malicia.

- ¡¿Qué?!-gritaron ambos.

- No pueden echarnos-dijo Jimin con un puchero. -Me gusta mi casa, aún soy su cachorrito.

Los padres de Jimin rompieron en carcajadas por ver la cara de su pequeño hijo, adoraban cada expresión de él y sobre todo cuando hacía esa carita de cachorrito apaleado y luego la cara de su hijo adoptivo Yoongi que estaba en medio de una expedición de asombro e incredulidad una que duró unos pocos segundos.

-Supongo que van a querer dormir durante las noches y creo que con nosotros aquí no lo van hacer, será mejor si nos mudamos amor-se dirigió Yoongi a Jimin con total descaro y luego bajó la voz para que solo Jimin le escuchara. - Aunque aún no sé si eres ruidoso pero lo voy averiguar muy pronto.

- ¡Min Yoongi!-Gritaron a la vez los señores Park.

Y Jimin en ese momento era un tomatito rojo.

🐺

Durante las dos semanas siguientes Jimin y Yoongi no tuvieron un minuto a solas, después de las palabras descaradas de Yoongi los señores Park no los dejaban ni a sol, ni a sombra eso hasta que Jimin se cansó de su sobreprotección que en parte era por lo de su acosador asesino que para esas alturas ya estaba en la cárcel esperando sentencia.

- Mamá, papá, siento decirles esto pero... ya dejé ser virgen hace mucho tiempo.

Jimin escogió un mal momento para decir esas palabras. Su padre casi se atraganta con la comida y su madre, pues ella sí lo hizo con su bebida, a tal punto en que el agua salió de su boca y Yoongi, pues... él solo se dedicó a dejar los palillos a un lado y se dedicó a contar en su mente del 1 al 10, pero según sus cálculos tendría que contar hasta el 10000, esperaba que cuando llegara a esa cantidad las ganas de matar a cualquiera que puso una mano encima de su bola de azúcar, se disipará de su mente.

- Siento ser así de directo pero es la verdad-Jimin terminó por decir y luego se levantó del comedor y se disponía a salir-y solo para que lo sepan mi celo se acerca y... bueno ya saben...

Con la cara roja salió del comedor con el pulso acelerado, ¿cómo es que fue tan descarado? Se preguntó mientras tomó su chaqueta junto con sus llaves para luego abrir la puerta principal. Aún su corazón palpitaba como loco, podía sentir que su pecho estaba a punto de romperse, igual como en la película Alien, cuando esos bichos salen del tórax gritando y con sangre por todas partes, en eso estaba exagerando pero se sentía de esa manera.

Ahora estaba caminando por el parque, necesitaba un poco de aire fresco después de esa confesión. Sus manos aún temblaban y agradeció a todos los dioses que Yoongi no fuera tras él. Con un suspiro se sentó en una banca y sacó la bolsita de galletas que compro de camino, una a una las pequeñas galletas de chispas de chocolate fueron desapareciendo al igual que los nervios y la ansiedad de Jimin.

- Jiminie, hola-saludó alegremente alguien detrás de él, su voz la conocía muy bien y en ese momento recordó algo que tuvo que hacer hace como dos semanas atrás.

- Jin Hyung, hola, olvidé contactarme contigo-dijo apresuradamente con arrepentimiento es su voz. - Lo siento tanto, yo olvidé por completo que...

- Tranquilo no pasa nada, llame a alguien más para que me reemplazara, pero dime... ¿cómo estás?, no te he visto durante días habló Jin tranquilamente con una ligera sonrisa tomando asiento a un lado de Jimin.

- Estoy bien, es... me surgieron algunos problemas y bueno... me mantuve en casa todo este tiempo, no me apetecía salir.

- Debe ser algo grave, supe que presentaste un oficio para que te permitieran tomar un descanso de la universidad, ¿está todo bien?

- Si, no te preocupes, es solo que... -Jimin no estaba seguro si debía contarle a Jin lo de su acosador, nadie sabía que estaba involucrado con el caso del depredador de rosas blancas, así es como le había apodado la prensa, un nombre algo ridículo pero las personas de los periódicos solían ser así de amarillistas. - Es solo que me dediqué a reforzar mi lazo con mi alfa, ya sabes como es eso.

-¡Oh! -Por la impresión de Jin esa noticia debió tomarlo por sorpresa. - Eso es... eso es fantástico Jimin, no sabía que tenías algo serio con ese alfa-dijo Jin un poco incómodo. - ¿Estás seguro de él ?, digo... hay algo que debo contarte pero no se como lo vayas a tomar.

- Dime que es-respondió Jimin calmadamente.

- Es sobre ese alfa con el que has estado saliendo. La cosa es que durante estas dos semanas ese tipo ha estado rondando por ahí acompañado de Ren y bueno yo pensé que ya habías terminado con él y para ser sincero no me esperé que bueno, que estés pensando en tener algo serio con él.

Jimin no era el tipo de omega que reaccionaba de forma violenta ni mucho menos pero decir que su sangre estaba hirviendo de rabia era poco.

Unclothed (Omegaverse)YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora