Capítulo 4

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Tuve el día libre ya que había tomado fotos en la casa de ‘’One Direction. ’’ Me pase toda la tarde viendo televisión hasta que anocheció.

Sentía algo muy raro dentro de mí, la verdad tenía muchas ganas de ver a Niall y no tenía idea del porqué, Dios mío ______ ¿en qué estás pensando? Será mejor que me vaya a dormir.

«Tenía un gran dolor de cabeza, me levanté casi en la madrugada a tomarme una pastilla, a ver si eso me quitaba de la cabeza al tonto de Niall Horan.

Mañana ya no estarás pensando en él, hablé conmigo misma. Me fui a la cama; estaba por dormir cuando escuché que tocaban mi ventana, creí que estaba alucinando, pero después me dio un poco de miedo, pensé que podría ser un ladrón. Me acerqué lentamente a la ventana y abrí las cortinas.»

— ¡Dios mío Niall! Casi muero de un susto—dije algo molesta tocándome el pecho.

—Lo siento—se disculpó. ¿Puedo entrar?

— Sí.

— Bien—entró.

— ¿Qué quieres?

— Sólo quería hablar contigo.

— ¿Y por eso vienes a  las 3:00a.m?—pregunté y el rió. ¿No pudiste tocar la puerta?

 — ¿Qué pensaría tu papá si un chico quiere hablar con su hija a las 3:00a.m? al igual despertaría a tus hermanos—agache la cabeza al oír lo que dijo.

— Niall, mi papá nos abandonó y no tengo hermanos—dije.

— ¿Qué? Oh, no, no, lo siento yo, yo no sabía.

— No te preocupes—le sonreí a medias. ¿Y de qué querías hablar?

— No lo sé, tenía ganas de verte.—me dijo dulcemente.

— ¿Y por eso viniste a las 3:00a.m?

— Hey, para ya— rio. ¿Y tú qué haces despierta a esta hora?

— Me levanté para una pastilla y además tuve una pesadilla.

— ¿Qué soñabas?—preguntó curioso.

— Contigo.

—Rió— Entonces ¿si sueñas conmigo es una pesadilla?

— Sí, o sea soñar con Niall Horan, uy que miedo—fingí temblar y el rió. ¿Importa si me acuesto?— le pregunté.

— Adelante—bostece al acostarme— Oye, yo quería hablar de algo que siento, es que no sé… cada vez que te veo siento una corriente y quería saber si tú sentías lo mismo no sé, no digo que tú sientas lo mismo, es más, no lo creo, bueno puede que no, pero no estoy diciendo que tú no sientas algo—suspiró cansando— ¿tú sientas lo mismo? ¿_____?—sonrió.

«Al día siguiente sonó mi alarma, pero sentí que algo me rodeaba, voltee a ver  mi lado izquierdo y…»

— ¡Que! Niall, Niall—lo moví. Despierta.

— 5 minutos más Louis.—contestó adormilado.

— ¡Niall!—grité.

— ¿Qué? ¿Qué?—se paró de golpe por mi grito.

— ¿Qué pasó? Oh, no! No me digas que tú y yo…—no completé la oración y él asintió— Oh, no, no Dios perdí la virginidad con Niall Horan no puede ser—dije asustada y el rió. ¿De qué te ríes imbécil?

— Es que no sucedió nada, me quedé dormido. — contestó y le dí un puñetazo.

— Por hacerme creer que habíamos tenido algo. 

— Oye, tú te quedaste dormida y estabas temblando, entonces te tapé y aún así seguías con frío, entonces...—lo interrumpí.

— Entonces te aprovechaste.

— ¡Claro que no!

— Reí— ¿Quieres comer?  

— Creo que ya te caigo bien—levantó los pulgares y yo lo fulminé con la mirada— ¿Qué? Claro que no, me odias, me odias—corrigió.

— Muy bien, has ganado tu comida—bajamos. — ¿Qué quieres comer?

— Lo que sea, adoro la comida.

— Reí— Mmm, bueno yo tengo ganas de spaghetti.

— ¿No es muy temprano?

— Si, pero se me antojó.

— Entonces ¿Qué esperamos? ¡a cocinar!

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— ¿Quieres ver televisión?—pregunté.

— ¿Qué tal si pones el programa donde pasan tus fotos?

— ¿Seguro?—le pregunté no muy convencida.

— Sí.

— Créeme nosotros sabemos más de tu vida que tú mismo—puse el canal.

— Y bien aquí imágenes de One Direction en un parque cuando estuvieron en el hotel, pero miren aquí hay una foto de Niall en plenos boxers—dijo la conductora del programa.

— ¡Oye! Ya ni tengo privacidad—dijo sorprendido y enojado, provocándome una risa.  

—Y ya que hablamos de Niall Horan, se le vio agarrado de la mano en el hotel con una chica misteriosa o bueno no tan misteriosa ya que ella trabaja en esta misma empresa como fotógrafa ¿será el comienzo de un nuevo amor?—siguió diciendo la conductora pero apagué la televisión.

— Oh, no, no, Dios, ahora creen que salgo contigo, soy yo la que debe de inventar chismes pero no conmigo—dije desesperada.

— ¿Te moleta que crean que somos novios?—dijo inocentemente.

— ¡Si! Luego me seguirán a mí también y ya no podré ganar dinero, sabía que no era bueno tener ninguna relación afectiva contigo— al decir eso vi como sus facciones cambiaron rápidamente a una furiosa y desconcertada.

— Si tienes razón—dijo. Me molesta que crean que somos novios, pff—rió— como si me fuera a fijar en una paparazzi.

— ¿Perdón?—dije indignada.

— Yo nunca me fijaría en ti, una estrella con una paparazzi, que absurdo y yo no salgo con pobres—dijo de lo más arrogante.

— Yo no voy a dejar que hables así de mí—fui a la puerta y la abrí— ¡sal de mi casa! ¡Ahora! Eres un egocéntrico.

— Ni quien quisiera estar contigo—salió.

— ¡Pero bien que dormiste anoche conmigo!—le grité.

La fotógrafa que capturó mi corazón «Niall Horan y tú»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora