Un Insoportable Caballero ( 3er libro Serie "Un Cambio Inesperado")

Capítulo 16

Capítulo 16

       El restaurante era aún más elegante e impresionante. Benjamin fue un caballero al instante en que se sentaron en la mesa, por lo que Nicole se preguntaba si acaso ese hombre que tenia al frente de ella era él mismo que había conocido en Londres.

     Pidieron su orden por individual. Aunque Benjamin quería brindar el almuerzo. No obstante, Nicole había preferido que no. Aquello no le parecía justo. No se encontraban en una cita, mucho menos quería deberle algo. El personal de recursos humanos le había facilitado sus viáticos para que ella pudiese costearse sus gastos adicionales.

— Serán tres días muy largos. Llenos de mucho trabajo...Mañana tendremos la reunión. Y me encuentro algo tenso por eso.— le dijo Benjamin al romper su silencio.

    Nicole lo miró a la cara y decidió dejar atrás su actitud antipática y fría con él. ¿Qué ganaba siéndolo?

— No lo había dicho antes...Pero estoy agradecida por haber sido invitada al evento benéfico, estoy contenta por ello... Del resto, estoy segura que haremos un buen trabajo. No hay porque estar tan tenso o nervioso por eso.— le sonrió Nicole. Y a Benjamin le pareció una sonrisa realmente hermosa.

— Gracias por aceptar... Pensé que no lo harías después de todo lo que yo he hecho...—la miró a los ojos, abriéndose por primera vez a ella—. Lo lamento.

—Soy una profesional, lord Benjamin. Y era parte de mi trabajo estar aquí, por lo que no me debe nada por ello... Sólo cumplo con mis obligaciones con ética y lo mejor que puedo—expresó, ocultándole que sí, lo había pensado, pero se había atenido a lo que había aprendido desde pequeña. Era un ser responsable.

— Agradezco que seas así— hizo un gesto que mostraba su tristeza—. Y no te culpo si piensas que todo el tiempo que nos hemos conocido he sido un tonto...Si que lo era...

— La gente cambia...De una manera u otra... Todos tenemos derecho de remediar nuestros errores... En esta oportunidad se ha tomado en serio la petición de su padre. Y nos encontramos aquí por trabajo. Y juntos haremos lo mejor...

— Gracias por tus palabras... Tienes razón.

    Y antes ellos se presentó de nuevo un silencio ensordecedor. Un silencio que les hablaba privadamente de aquello que ambos deseaban ignorar. Benjamin al no querer asfixiarla con aquello que él sabía que había empezado a sentir por ella. Y Nicole por aquello que quería evitar.

    ¿Estarían preparados para la realidad que se les avecinaba?

    Ninguno de ellos conocía la respuesta.

     Cuando la noche llegó, para ambos fue incómodo verse en medio de aquella habitación. Benjamin esperó que ella se cambiara para él hacer lo mismo luego. ¿Quién le hubiese dicho horas antes de tomar el vuelo a Chicago que la vería en pijama y dormir en la misma habitación? Sentía aquello tan cruel, cuando poco a poco entendía, que ella jamás le correspondería. Se había mantenido distante y formal, en vez de buscar ser más cercano en esos tres días. Era claro que era inmune a él y que nunca sería parte de su vida.

    Nicole salió del baño con un mono y una franelilla y con su cabello suelto, sintiendo los ojos de Benjamin observarla como si la estuviese viendo por primera vez.

— Lamento si me tarde mucho...

— No, no lo hiciste...— expresó al levantarse para entrar al baño. Sus ojos mostraban una cierta tristeza. Como si le hubiesen robado algo.

    Nicole se acostó en su cama. No apagó las luces para no ser descortés. Cuando Benjamin salió del baño ella ya se había dormido. Algo que le ayudó a él contemplarla aún más. En realidad era tan hermosa. Sonrió un poco al sentirse un perdedor que había malgastado toda su vida en vanidades. Si hubiese tenido otra manera de ver la vida, tal vez ella le correspondería. Pero, ¿a quién pretendía engañar?

     Él había querido siempre llevarle la contraria a su padre. Ser un verdadero rebelde y dolor de cabeza. Había hecho una pequeña empresa, que mantenía gracias a su socio Maxwell y a sus empleados. Había buscado marcar la diferencia... Y lo único que había conseguido era haberla perdido, antes de conocerla.

     Ella había conocido al hombre en que se había transformado toda su vida, en un mujeriego que no deseaba compromisos, que no se inmutaba ni le preocupaba lo que pensaban los demás. Ahora debía vivir con las consecuencias.

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Honestamente cada vez que leo sus comentarios me sorprendo que les guste, como dije en una ocasión, es una de las novelas que siento que debo editar, y es por ello que me he sentado a editarla y actualizar nuevos capítulos. Me alegra saber que les gusta, seguiré escribiendola y terminarla para continuar con la cuarta parte.  Gracias por sus comentarios, votos y apoyo. Gracias de corazón....