Un nuevo despertar [Finalizado]

Capítulo 3: La mañana de David

Lunes 13/08/2018
La mañana que tuvo David fue muy extraña para el según me contó.
Esa mañana me sentía un poco extraño, sentí mi cuerpo más ligero de lo normal pero con un extraño nuevo peso en mi pecho, al sentir esto pensé que sería alguno de esos dolores momentáneos que daban por mi entrenamiento, así que segui durmiendo como si nada. Después de un rato escuche una voz muy extraña que al parecer provenía de un piso de abajo, esto se me hizo muy extraño ya que mi casa es de un piso.
Me levanté muy asustado y rápidamente abri mis ojos, quede atónito debido a que me encontraba en una enorme habitación, está era muy hermosa, las paredes eran de color rosa pastel, la cama en la que estaba era mucho más grande que la mía además de que era muy suave, está tenia colchas de color blanco con almohadas rosas igualmente suaves, había también un montón de muebles blancos y una gema ventana en la cual se podía observar un gran jardín con muchas flores de diferentes colores y con varios autos lujosos estacionados.
Al levantarme de la cama y quitarme de encima las cobijas me percate que ahora traía puesto una pijama rosa que me tapaba todo el cuerpo, parecía como de viejita, entonces decidí quitarme la pero al momento de tocarme mi cuerpo me sentí un gran bulto en mi pecho, rápidamente desabroche todos los botones, fue tanta mi velocidad que termine rompiendo los botones, entonces fue cuando ví que ahora tenía pechos, mi mente me ordenaba acariciarlos a lo cual no dude ni un segundo y lo hice, me quedé acariciando los hasta que recordé que no estaba ni en mi casa ni mucho menos en mi cuerpo.
Camine por la habitación hasta encontrar un espejo, una vez que lo encontré me mire en el y al parecer era la chica que había conocido ayer. Me examine un poco delante del espejo, por examinarme me refiero a observar mi cara y mi cuerpo haciendo varias poses, mientras hacia eso vi como mi nuevo cabello está sujeto de manera de chonguito, así que desamarre la liga que lo sujetaba y dejé caer mi largo cabello, me llegaba hasta un poco más abajo de mis hombros, incluso llegó a cubrirme un poco los pechos. Tome un mechón del suave y sedoso cabello rubio y me detuve un momento para olerlo y acariciarlo, entonces pensé "este cabello es más suave y huele mucho mejor que el mío".
Luego de hacer todo eso llegó a mi mente la idea de cómo se vería Lizbeth desnuda, así que sin perder nada de tiempo me quite esa pijama que traía puesta y empecé a jugar mis pechos, además que puede contemplar que abajo de la pijama traía puestas unas lindas braguitas de color azul con un pequeño moñito en la parte de enfrente. También para hacer bien el trabajo me acaricie un poco debajo de mis bragas y al momento de hacerlo senti algo que nunca había sentido, fue algo tan placentero que solté un pequeño gemido, me pareció muy lindo y quería volver a hacerlo.
Pero en ese momento escuché que alguien venía así que deje lo que estaba haciendo e intente volver a poner me esa pijama rosa. Una persona entro en la habitación, era una señora algo vieja vestida de mucama, para mí suerte no era la mamá de Lizbeth sino una de sus muchas sirvientas que entró corriendo.
-sirvienta: buenos días señorita, se encuentra bien esta mañana??
-david(en Liz): obvio que estoy bien por qué no lo estaría *dije con un tono sarcástico*
-sirvienta: señorita!!! esa no es la manera de hablar.
-david(en Liz): que dices???
Entonces recordé que este no era mi cuerpo sino el de Lizbeth, así que recordé más o menos como hablaba ella y empecé a hablar así.
-david(en Liz): mis más sinceras disculpas por mi comportamiento.
-sirvienta: está bien señorita no le comentare nada a sus padres, solo venía a avisarle que necesita darse prisa porque llegará tarde al instituto.
La sirvienta deja sobre la cama el uniforme y sale del cuarto algo apresurada sin decir nada.
Cuando salió veo que junto a la cama hay una mesita de noche de color blanco que tiene ensima el celular de Lizbeth, lo tome y veo que tiene un mensaje de mi celular, que por cierto no estaba registrado, que decía: "actúa natural no dejes que te descubran, nos vemos en la entrada del instituto".
Luego de eso tome el uniforme y me quite la pijama rota y me acerqué a lo que parecía un ropero, primero empecé con las bragas azules que traía  puestas me las cambie por unas rosas con un moño en el centro que se encontraban debajo de todas las demás, después tome un sostén rojo e intente ponerme lo pero al parecer era imposible así que lo aventé y continúe poniéndome la falda de color negro que me llegaba hasta las rodillas, intente estirarla para que me cubriera más pero parecía imposible, después me puse la blusa blanca y el chaleco negro, luego me puse las largas calcetas blancas que llegaban justo a mis rodillas y al final me puse unas zapatillas negras y al final me vi en el espejo. Al contemplar me así sentí una sensación un poco extraña era como si me gustaría usar falda y quisiera usarla para toda mi vida, pero mi pensamiento fue interrumpido por la misma sirvienta que volvió a entrar al cuarto, venía con un cepillo y unas ligas para el pelo. Me pidió que me sentará en la cama y eso hice, entonces comenzó a cepillar me mi largo cabello y me hizo una colita de caballo, según ella para más rápido.
Cuando terminó de peinarme baje por las largas escaleras, parecía  que la casa tenía mínimo tres pisos ya que aún continuaban hacia arriba, mis cosas ya estaban listas y además venían con un almuerzo que se veía muy delicioso, me lo entrego otra sirvienta y salí corriendo directo a la camioneta de color negro en donde me estaba esperando un señor que me saludo muy cordialmente y me llevo hasta el instituto. En el camino observé lo grande que se veía esa enorme mansion desde afuera y también aprecie el hermoso jardín que tenia junto con esos lujosos autos.
Ya llegando al instituto el chófer se bajó, me abrió la puerta muy cordialmente y me acompañó hasta la entrada como todo un caballero, luego de eso regreso al auto y se marchó.

Espero les guste este nuevo capítulo si ven alguna cosa que me falte por favor avisenme.