NECESARIO.
Jung Suga, se mordió la lengua, intentando así que la rabia que le consumia no se le notara mucho. Suspiro en medio de la noche, abrumado por las recientes noticias, desde hace cinco años humanos que el no veia ni le dirija la palabra a su padre TaeTae, cinco años, pero en el purgatorio eran cinco décadas, mucho más de lo que esperaba. Y también, la reciente noticia de que su no tan querido padrino, el tío Min JungKook, hijo de Satanás y el muy temido alquimista carmesí, lo iría a visitar, lo tenía con un mal sabor de boca.— Se me están juntando los dueños de mis desgracias. —murmuro, de muy mala gana, a la vez que miraba por la ventana, la tenue luz de la entrada al reino de los cielos, escucho una queja, como la que hacen los recién nacidos cuando quieren ser amamantados, volteó y encontró a otro de los causantes de sus penurias. JiMin buscaba con la manito las frazadas, estaba dormido, Suga lo sabía, por eso solo lo miraba y se burlaba en silencio de las muecas del menor, quien intentaba buscar las mantas fallando en el intento.— Eres un problema incluso cuando duermes. —decia a la vez que lo arropaba muy bien con las mantas y lo acercaba más a él, para que no sintiera el frío que se colaba por las puertas. (Ya que ahora la antigua sala de star era la nueva habitación principal, y ellos dormían ahí).
Entonces fue ahí, donde el castaño, de apellido reconocible y temido en los cuatro reinos de la tierra, infierno, humanidad, paraíso y el suyo, de donde venía, el reino Oscuro, se hizo una pregunta que estaba evitando desde el principio.— ¿Desde cuando se me hizo tan necesario tenerte cerca?. —le pregunto a un dormido JiMin.
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Amo Suga. © |YoonMin| #6
Fanfiction❝JiMin está muerto, su alma está en el limbo, fue de las pocas almas que no tuvieron a donde ir, ni al cielo ni al infierno. Es por eso que el Dios de la Muerte lo llevo consigo, para dárselo de regalo a su hijo, de nombre Suga. Ahora JiMin es el es...
